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Alex Guerra Terra

Rally Dakar y la destrucción del Patrimonio. Entrevista a Klaus Hönninger (Perú)

En Perú el Rally Dakar 2013 fue motivo de una devastadora des-

trucción, sobre todo donde se instaló el campamento del rally, en la zona de Pozo Santo, encima de algunas líneas de Nasca, pero también en Ocucaje, Palpa y el Tablazo de Ica, por donde pasaban algunos itinerarios (ver foto del recorrido), donde los coches pi-saban fósiles de tiburones, ballenas y otras especies, y los visitantes de-jaban la basura de la comida y la be-bida, sentados, en ocasiones, sobre, por ejemplo, una vértebra de tiburón arrancada a un fósil. Desde el mes de

enero de 2013 se vivió una seria po-lémica en la zona de Ocucaje debido a todas estas barbaries ocasionadas por el rally, que a su paso por esta tie-rra desértica, provocó serios estragos en los vestigios fosilizados del área, una de las más ricas del planeta en el área paleontológica, pero también en restos arqueológicos, y el entorno na-tural. Esto trajo como consecuencia el rechazo y protesta de la comunidad científi ca peruana e internacional ha-cia el rally, por la nula preocupación de las autoridades, especialmente del Ministerio de Cultura. Asimismo, y

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según el director del Museo Paleon-tológico Meyer-Hönninger, Klaus Hönninger Mitrani (uno de los prin-cipales bastiones contra los estragos que produce el rally en Perú y resto de países latinoamericanos), la in-adecuada legislación actual difi culta y, en algunos casos, impide, el estu-dio, rescate y exhibición de los restos fósiles que están siendo destruidos por acción, tanto de las competicio-nes, como de los expolios y la erosión natural. Según Hönninger, si los fó-siles fueran declarados Patrimonio Natural, y pasaran a ser regulados por la Dirección de Biodiversidad del Ministerio del Ambiente, probable-mente quedarían mejor protegidos y se podría apoyar la investigación, de descubrimientos importantísimos que se dan en la zona. Por ello, se hizo llegar al Gobierno Peruano una carta de protesta y a la prensa inter-nacional una nota fi rmada por más de cincuenta Premios Nobel Alterna-tivos, ofreciendo respaldo a la lucha peruana lucha contra el Dakar. Entre

los fi rmantes, algunos son muy cono-cidos, como David Suzuki de Cana-dá, Vandana Shiva de India, Bianca Jagger, Sima Samar de Afganistán, entre otros. Así, después de largos debates y enérgicas protestas, a me-diados de año se logró que en 2014 el rally no pase por Perú.

Sin embargo, sí lo hizo por Argen-tina, Chile y Bolivia, donde también ha arrasado, como cada año en Amé-rica (y antes en África, de donde el evento fue defi nitivamente expulsa-do), docenas de sitios arqueológicos y paleontológicos, así como naturales. De estos países, sobre todo en Chile el Colegio de Arqueólogos se orga-nizó para apelar contra el rally (que ya fue sometido a numerosas críticas en anteriores ediciones), para que éste no pasara en 2014 por ese país, o al menos la ruta fuera sometida a un buen estudio de impacto ambien-tal. Pero a pesar de la contundencia de las argumentaciones de este co-lectivo (similares a las presentadas por Ecuador, que sí consiguió alejar

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el rally de su territorio), el evento internacional ha continuado pasan-do por sitios ricos en Patrimonio de Chile. Quinientos vehículos pesados del rally pasaron por zonas ricas en Patrimonio Arqueológico y Ambien-tal, devastándolas impunemente. El domingo 5 de diciembre de 2013 comenzó el Rally Dakar 2014 en Ar-gentina, a partir de lo cual diversas organizaciones manifestaron enérgi-camente su preocupación en relación al daño arqueológico y patrimonial

que podía producir el evento. La abogada del colegio de Arqueólogos de Chile, Paola González, expresó que desde el punto de vista judicial, se acogió por primera vez un recur-so de protección en enero de 2013, que a enero 2014 (después de un año) se en-contraba en estado de fa-llo. De este modo, se espe-raba una resolución para efectuar un cambio en la forma en que se realiza el Dakar en Chile, que no lle-gó a tiempo. El argumento que los arqueólogos manejan, respecto a los daños que produce el evento deportivo, remite a 250 sitios arqueológicos destruidos, en base a estudios del Consejo de Monumentos Nacionales. Incluso se han publica-do fotos de importantes geoglifos de la región de Atacama, atravesados por

las gruesas llantas de los potentes 4 x 4. En este sentido resulta clave, para Paola González, exigir a los organi-zadores que se realice, de volver a hacerlo en Chile, una evaluación del impacto ambiental, tal como indica la legislación. Además, los trabajadores portuarios interpusieron un recurso de protección por posibles daños en Valparaíso. Bolivia por su parte, ha tenido la iniciativa a nivel privado, por parte de las comunidades origi-narias, de poner alambradas para im-pedir el paso en el territorio marcado para el rally, y algo parecido ocurrió en Argentina. Pero los intereses eco-nómicos creados son poderosos, y si bien es cierto que el evento aporta ciertos benefi cios a los países don-de se desarrolla, lo que éstos pagan para formar parte de la ruta, deja en evidencia que la gestión no es en rea-lidad tan benefi ciosa como parece, o la organización del evento quiere que parezca.

Para conocer más detalles sobre la lucha por la protección del Patrimo-nio relacionado con el rally Dakar en Perú, hemos entrevistado al director del Museo Paleontológico Meyer-Hönninger, el internacionalmente re-putado investigador peruano Klaus Hönninger Mitrani.

¿Cómo nace su lucha contra el rally Dakar ?

Cuando se anunciaba el primer ra-lly Dakar en Perú en el año 2011, mi principal preocupación fue sin duda, la del patrimonio y ecología. Yo era consciente que este tipo de eventos

Hubo daños importantes en varios esqueletos de ballenas, tiburones y delfi nes del mioceno. Además de las toneladas de basura que dejaron los espectadores en zonas donde antes no se encontraba ni una colilla de cigarrillo.

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se realizan en desiertos y los nuestros están aún prácticamente intocados, llenos de vestigios arqueológicos y paleontológicos. Debemos enten-der que la costa peruana es desérti-ca, las culturas que se desarrollaron en esta geografía no desperdiciaban terrenos de cultivo y construían sus cementerios y templos en las zonas áridas. Adicionalmente, mi conster-nación aumentó cuando se anuncia-ba que parte del recorrido se iba a efectuar en el desierto de Ica, que no sólo alberga las mundialmente famo-sas líneas de Nazca, sino uno de los yacimientos más grandes del mundo de vertebrados fósiles que datan del eoceno, oligoceno y mioceno.

¿Qué medidas tomó para llamar la atención de los peligros que acarrea-ba la competencia en esa zona?

Sostuve una reunión con el Minis-terio de Cultura, representantes del Instituto Peruano del Deporte y re-presentantes de los organizadores franceses, quienes aseguraron que habían tomado todas las medidas necesarias para evitar los daños. Se negaron a informarme del recorrido, argumentando que era secreto, hecho que me hizo dudar de sus afi rmacio-

nes. Fue por ese motivo, que recurrí a los medios de prensa para advertir de los peligros y posibles daños al patrimonio que podría ocasionar el rally. Tanto el Ministerio de Cultura como los organizadores publicaron sendos comunicados negando mis afi rmaciones y desestimando mi de-recho a protesta por no ser parte del comité organizador ni miembro de algún ministerio.

¿Y ocurrieron los daños previstos?

Por supuesto, hubo daños importan-tes en los geoglifos de Pozo Santo en Pisco y daños a varios esqueletos de ballenas, tiburones y delfi nes del mio-ceno. Además de las toneladas de ba-sura que dejaron los espectadores en zonas donde antes no se encontraba ni una colilla de cigarrillo. Los daños reportados y documentados fueron

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Mi país tiene una envidiable historia, cultura, biodiversidad y ecología… no necesitamos de una carrera de autos que destruya la naturaleza e historia para promocionarlo.

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nuevamente negados por los respon-sables aduciendo que se trataba de un intento “de hacerme famoso”.

Eso fue en el año 2011, ¿qué pasó en el rally 2012?

Cuando llegaron Etienne Lavigne y Gregory Morac, directores de la ASO que es la organización francesa del rally, me citaron al Hotel Westin en Lima para hablar acerca de mi campa-ña de advertencias y daños. Invité al especialista y conocedor del desierto de Ica, Carlos Vildoso, quien semanas antes había denunciado ante France Press los daños severos al patrimonio en Ica. En la reunión se nos volvió a repetir que no éramos quiénes para protestar y poner en duda las medi-das de seguridad tomadas por ellos y los respectivos ministerios. Ante esa

posición, me retiré de la reunión ya que no vi la predisposición de tomar en cuenta las recomendaciones.

Hemos leído en la prensa que el Sr. Carlos Vildoso Morales se retractó de sus denuncias, ¿qué pasó?

Me sorprendió mucho ver que el Sr. Vildoso aparecía unos días más tar-de en conferencia de prensa conjun-tamente con el Sr. Lavigne y Morac, retractándose de sus denuncias y acusándome de “inventar” los da-ños, lo que es totalmente irrisorio y sin duda, producto de algún tipo de negociación entre ellos. En dicha con-ferencia, tres días antes del inicio de la competencia, se anunciaban una serie de medidas de seguridad, que tomo como un intento de acallar a un sector de la prensa preocupada, pero que por el poco tiempo, totalmente imposibles de realizar en un desierto tan grande como el de Ica.

Y a pesar de estas “medidas de segu-ridad”, ¿hubo daños en esta segunda edición del rally?

Nuevamente he podido documen-tar una serie de daños, inclusive fui acompañado de periodistas que cons-tataron las mentiras y contradicciones detrás de toda la organización. Como se puede leer en un reportaje del dia-rio “La República”, los representantes del Ministerio no conocían la ruta y no tenían el menor control sobre los organizadores franceses. Yo por mi parte, documenté las mentiras acerca

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de las supuestas ganancias que trae-ría el Dakar, cifras anunciadas por el Ministro de Comercio y Turismo, José Luis Silva Martinot, quien anunció ingresos por 700 millones de dólares, y cada semana bajaba de cifra llegan-do a anunciar al fi nal unos dudosos 59 millones, cifra que no se puede confi rmar. El Presidente de la Cámara de Turismo del Perú Sr. Carlos Cana-les refi ere, en una entrevista para el diario “El Comercio”, que el evento no trajo mayor impacto al turismo, desenmascarando toda la farsa que representa el rally Dakar.

Sabemos que fi nalmente para el 2014, los organizadores franceses dejaron a Perú fuera de la ruta, ¿cuál cree que fue el motivo?

No quiero pecar de soberbio, pero pienso que el trabajo mediático inten-so, tanto nacional e internacional que he venido realizando y el hecho que el gobierno de Ecuador negara una participación en la ruta a raíz de los informes de daños entregados, tanto de Perú como de Chile y Argentina, llevó a los organizadores franceses a “tomar unas vacaciones” para enfriar el tema. De hecho, no lo han enfriado porque la lucha por la protección del patrimonio nacional continuará en caso decidan reincorporar al Perú en el 2015, esta vez con medidas legales severas, ya que he podido reunir una enorme cantidad de pruebas que ame-ritan una denuncia ante los juzgados de prevención del delito y penales.

Hemos leído en la prensa internacio-nal acerca de las amenazas de muerte que ha recibido por su posición con-tra el rally Dakar y por la protección

del patrimonio cultural y ecológico. ¿Qué hay de cierto en ello?

Recibí las primeras amenazas después del anuncio del gobierno ecuatoriano de no aceptar la propuesta del rally Dakar, en cuya argumentación men-cionan mi informe de los daños oca-sionados en Perú. Inicialmente fueron llamadas al móvil desde números no identifi cables, luego unos mensajes escritos que pasaron bajo la puerta de mi casa advirtiendo que iban a atentar contra mi vida si mantenía mi lucha contra el rally. Este hecho llevó a dife-rentes organizaciones a protestar con-tra este intento de intimidarme. Tuve que cambiar de número y mudarme a otra vivienda.

Entonces, entendemos que continua-rá con su lucha para evitar el regreso del rally Dakar?

Por supuesto, esta competencia no sólo destruye nuestra ecología y pa-trimonio, sino que no le trae ningún benefi cio importante al país. Cuesta mucho dinero y no justifi ca lo que el estado pregona de una supuesta pla-taforma publicitaria del Perú hacia el mundo. Mi país tiene una envidiable historia, cultura, biodiversidad y eco-logía… no necesitamos de una carrera de autos que destruya la naturaleza e historia para promocionar al país, basta invertir ese dinero en mostrar lo que tenemos y demostrar que lo cui-damos. •

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