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SCETE EGIPTO, SIGLO III-V ilagro Eucarístico de La narración de este Milagro Eucarístico se remonta a los primeros siglos del cristianismo y forma parte de la colección de apotegmas de los Padres del desierto. Estos monjes vivían en Egipto como eremitas para seguir el ejemplo de San Antonio Abad. Un monje fue asaltado por ciertas dudas acerca de la presencia real de Jesús en el pan y el vino consagrados. Durante la Misa, luego de la consagración, en vez del pan, apareció el Niño Jesús. En esa misma Misa estuvieron presentes otros tres monjes que tuvieron la misma visión. n los Dichos y hechos de los Padres del Desierto, encontramos la descripción de un antiquísimo Milagro Eucarístico. Cuenta el padre Daniel el Faranita que “nuestro Padre Arsenio nos decía que un monje de Scete, que era muy laborioso pero poco cultivado en lo concer- niente a la fe, decía por ignorancia: “el pan que comemos no es realmente el Cuerpo de Cristo, sino sólo un símbolo”. Dos ancianos oyeron esta afirmación y sabiendo que era un hombre piadoso y bueno, pensaron que hablaba sin culpa y por ignorancia. Decidieron ir a su encuentro y le dijeron: “padre, hemos escuchado que hay uno que dice una tesis contraria a la fe: “el pan que recibimos no sería realmente el Cuerpo de Cristo, sino sólo un símbolo”. Dijo el anciano: “¡soy yo que lo digo!”. Entonces, comenzaron a exhortarlo: “tú no debes creer en eso, sino en aquello que nos ha enseñado la Iglesia Católica. Nosotros creemos que este pan es el Cuerpo de Cristo y este cáliz es la Sangre de Cristo, es una realidad y no un símbolo”. […] Pero el anciano respondió: “si no sucede algo que me convenza, no creeré”. Los dos padres le dijeron: “rezaremos esta semana a Dios sobre este misterio, y creemos que Dios nos lo revelará”. […] Cumplida la semana, el día domingo, fueron todos a la iglesia y se ubicaron lejos del resto; el viejo estaba en medio de los otros dos monjes, sobre una grada. Entonces, sus ojos se abrieron: en el momento en el que fue depositado el pan del sacrificio, sólo ellos tres pudieron ver que en vez del pan aparecía un niño. Cuando el sacerdote estaba por partir el pan, bajó del cielo un ángel del Señor que con una espada inmoló al niño y vertió su sangre en el cáliz. Cuando finalmente el sacerdote fraccionó el pan en pequeños pedazos, también el ángel partió al niño en pequeños pedazos. Luego, los tres se acercaron para recibir los santos dones y al viejo se le ofreció carne empapada de sangre. Ante esta visión, sobrecogido de terror, gritó: “!creo, oh, Señor que el pan es tu Cuerpo y el cáliz es tu Sangre!”. Inmediatamente la carne tomó apariencia de pan, según el misterio, y así pudo comulgar dando gracias a Dios”. E Cristo abrazando al Abad Mena (VI siglo) Detalle de la pintura de Fra Angelico: San Antonio Abad en el desierto Cristo sentado en el trono y la Virgen María rodeada de santos en el Monasterio de Apolo, en Bawit Monasterio de San Antonio Abad, Egipto San Moisés, monje del desierto © 2006, Edizioni San Clemente Monasterio Copto dedicado a San Pablo, ubicado en las costas del Mar Rojo Monasterio de San Pablo Detalle del monasterio de San Antonio abad a los pies del monte Qulzum

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SCETEEGIPTO, SIGLO III-V

ilagro Eucarístico de

La narración de este Milagro Eucarístico seremonta a los primeros siglosdel cristianismo y forma partede la colección de apotegmasde los Padres del desierto.Estos monjes vivían en Egiptocomo eremitas para seguir el ejemplo de San AntonioAbad. Un monje fue asaltadopor ciertas dudas acerca de lapresencia real de Jesús en elpan y el vino consagrados.Durante la Misa, luego de laconsagración, en vez del pan,apareció el Niño Jesús. En esa misma Misa estuvieronpresentes otros tres monjesque tuvieron la misma visión.

n los Dichos y hechos de los Padres delDesierto, encontramos la descripción de unantiquísimo Milagro Eucarístico. Cuenta

el padre Daniel el Faranita que “nuestro PadreArsenio nos decía que un monje de Scete, que eramuy laborioso pero poco cultivado en lo concer-niente a la fe, decía por ignorancia: “el pan quecomemos no es realmente el Cuerpo de Cristo,sino sólo un símbolo”. Dos ancianos oyeron esta afirmación y sabiendo que era un hombre piadoso y bueno, pensaron que hablaba sin culpay por ignorancia. Decidieron ir a su encuentro yle dijeron: “padre, hemos escuchado que hay unoque dice una tesis contraria a la fe: “el pan querecibimos no sería realmente el Cuerpo de Cristo,sino sólo un símbolo”. Dijo el anciano: “¡soy yoque lo digo!”. Entonces, comenzaron a exhortarlo:“tú no debes creer en eso, sino en aquello que nos

ha enseñado la Iglesia Católica. Nosotros creemosque este pan es el Cuerpo de Cristo y este cálizes la Sangre de Cristo, es una realidad y no unsímbolo”. […] Pero el anciano respondió: “si nosucede algo que me convenza, no creeré”. Losdos padres le dijeron: “rezaremos esta semana aDios sobre este misterio, y creemos que Diosnos lo revelará”. […]

Cumplida la semana, el díadomingo, fueron todos a la iglesia y se ubicaronlejos del resto; el viejo estaba en medio de losotros dos monjes, sobre una grada. Entonces,sus ojos se abrieron: en el momento en el quefue depositado el pan del sacrificio, sólo ellostres pudieron ver que en vez del pan aparecía unniño. Cuando el sacerdote estaba por partir elpan, bajó del cielo un ángel del Señor que con

una espada inmoló al niño y vertió su sangre enel cáliz. Cuando finalmente el sacerdote fraccionóel pan en pequeños pedazos, también el ángelpartió al niño en pequeños pedazos. Luego, lostres se acercaron para recibir los santos dones y alviejo se le ofreció carne empapada de sangre. Anteesta visión, sobrecogido de terror, gritó: “!creo,oh, Señor que el pan es tu Cuerpo y el cáliz es tuSangre!”. Inmediatamente la carne tomó aparienciade pan, según el misterio, y así pudo comulgardando gracias a Dios”.

E

Cristo abrazando al Abad Mena (VI siglo)

Detalle de la pintura de Fra Angelico: San Antonio Abad en el desierto

Cristo sentado en el trono y laVirgen María rodeada de santos enel Monasterio de Apolo, en Bawit

Monasterio de San AntonioAbad, Egipto

San Moisés, monje del desierto

© 2006, Edizioni San Clemente

Monasterio Copto dedicado aSan Pablo, ubicado en las costasdel Mar Rojo

Monasterio de San Pablo

Detalle del monasterio de San Antonio abad a los pies del monte Qulzum