Pascarelli Flores Fiorini

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Maestra en Diseo Comunicacional (DICOM), FADU, UBAAo 1Seminario: Historia de la SemiologaProfesora: Daniela FioriniAlumna: Paola Pascarelli FloresFecha de entrega: (30/10/13)

Trabajo Prctico

IAutor seleccionado: Mijal Bajtn. Categoras: Lo neutro; Lo ajeno; Lo mo.

El primer argumento que Bajtn esgrime en su texto sobre los Gneros Discursivos es la naturaleza dialgica del discurso. Contrario a la opinin segn la cual el oyente es un sujeto pasivo cuyo rol en la comunicacin es ser receptor del mensaje de un emisor, Bajtn considera que tanto el hablante como el destinatario son sujetos activos de la comunicacin discursiva. Segn este planteamiento, todo discurso es una respuesta a algn discurso anterior que, a su vez, est orientado a producir otras respuestas ms. Ahora bien, si hasta entonces se haba considerado que las unidades lingsticas (tales como fonemas, palabras u oraciones) eran consideradas tambin como unidades de la comunicacin, Bajtn aclara que esta medida slo aplica a la lengua, y que en el discurso la unidad mnima es el enunciado. As pues un discurso es un conjunto de enunciados concretos producidos por un sujeto discursivo en el marco de un dilogo. Los enunciados, para ser reconocidos como tal sin correr el riesgo de caer en el error de confundirlos con unidades lingsticas, se caracterizan por una serie de rasgos: En primer lugar se definen los lmites del enunciado a travs del cambio de los sujetos discursivos, es decir, cuando el enunciado de un hablante concluye y da paso a la respuesta (otro enunciado) del destinatario. As, el enunciado puede ser desde una palabra hasta una enciclopedia, por ejemplo; En segundo lugar un enunciado posee plenitud de sentido, es un planteamiento concluso que expresa la visin de su autor y por tanto tiene la capacidad de producir una respuesta, se relaciona directamente con enunciados ajenos; Y en tercer lugar se comprende que el enunciado establece un contacto directo con la realidad, es la respuesta a los discursos ajenos anteriores, presentes y futuros en torno al mismo objeto. Es la postura activa de un sujeto discursivo en una esfera de sentidos especfica. Para cumplir con estas caractersticas, todo enunciado debe estar inscrito en una forma discursiva genrica y estable, es decir, un Gnero discursivo. Dependiendo del tipo de circunstancia (esfera cultural o de sentido) en la que un hablante se expresa, sus enunciados asumen el Gnero discursivo adecuado para generar una respuesta coherente. Se vale para ello de la asimilacin de enunciados ajenos como parmetros del gnero discursivo y como discursos a ser respondidos. A su vez hace uso de recursos lingsticos que por no pertenecer a nadie ms que a la necesaria intercomprensin conceptual del lenguaje, representan lo neutro. De esta forma es como se gesta finalmente lo mo, el propio enunciado. As pues, la construccin del sentido es para Bajtn tanto social en cuanto discurso, como individual en cuanto respuesta especfica de un sujeto de discurso en un contexto particular.

IIAutor seleccionado para la comparacin: Eliseo Vern

La Teora de los Gneros discursivos de Bajtn y la Teora de los Discursos sociales de Vern tienen, en realidad, ciertas similitudes que se ocultan tras la forma de nombrar y definir los procesos comunicativos. Sin embargo, en el tratamiento del objeto que ambos estudian (el discurso) existe una diferencia fundamental: si bien ambos coinciden en que el discurso est determinado tanto por un contacto directo con la realidad, como por los enunciados ajenos pasados, presentes y futuros (o condiciones de produccin y condiciones de reconocimiento, para utilizar trminos de Vern), cada uno conceptualiza al enunciado de forma diferente. Para Vern el enunciado no es la unidad mnima del discurso, sino que hace referencia al contenido, al tema del discurso, mientras que el dispositivo de la enunciacin, como acto del decir y sus modalidades, sustituye al Gnero discursivo. En la Teora de los Discursos sociales el texto es la unidad mnima del discurso. No obstante, debemos insistir en que ambos postulados contienen ms bien diferencias formales, despus de todo los textos son enunciados en la teora bajtiniana.La semiosis social como red significante infinita que propone Vern, segn la cual un discurso resulta ser una suerte de sntesis dialctica que circula entre sus condiciones de produccin y reconocimiento, se asemeja considerablemente a la naturaleza dialgica que describe Bajtn. As como para Vern toda produccin de un texto es un acto de reconocimiento de otros discursos, para Bajtn todo enunciado es respuesta a otros enunciados. Las marcas y huellas, propiedades significantes especificadas o no, son lo que Bajtn llamara enunciados ajenos que se reflejan en la expresividad del discurso propio. Los Gneros discursivos podran ser considerados restricciones de generacin del discurso, convirtindose as en condiciones de produccin; y la posibilidad de propiciar una respuesta, en tanto restriccin de recepcin, sera parte de las condiciones de reconocimiento. Finalmente, el discurso como un paquete de sentido o una configuracin espacio-temporal de sentido que plantea Vern, coincide perfectamente con la reiteracin de Bajtn segn la cual un enunciado es un eslabn en la cadena de la comunicacin discursiva. Slo la particularidad expresiva en el tratamiento del objeto de cado uno de estos autores, llev a que una teora profundizara en mayor medida en las condiciones de produccin a travs de los Gneros discursivos (Bajtn), y otra en las condiciones de reconocimiento (Vern).

IIIObjeto de estudio seleccionado: Codex SeraphinianusAutor: Luigi SerafiniAo: 1981Tipo de objeto: Libro ilustrado. Cdice.

Con el trmino Cdice suele denominarse a los libros manuscritos de creacin previa a la invencin de la imprenta. Ms especficamente son documentos que combinan lo pictrico con lo lingstico y que suelen registrar informacin de diversos aspectos culturales, sociales y econmicos de alguna civilizacin. Sin aquella pretensin universal que poseen las enciclopedias, los cdices son un Gnero discursivo considerablemente parecido: los cdices, as como las enciclopedias, recogen todos los conocimientos posibles acerca de un tema dado y lo presentan de forma esquematizada a travs de un breve texto explicativo acompaado de una ilustracin. Todo ello indica que la intencin del discurso es absolutamente didctica y la respuesta directa que intenta propiciar es la compresin. En este caso, sin embargo, se nos presenta una situacin completamente distinta. El Codex Seraphinianus es lo que fcilmente podra catalogarse como una enciclopedia surrealista: producto de una fantasa racional del autor, este cdice presenta un catlogo de criaturas, objetos y situaciones surreales. Tal como una enciclopedia, el texto est organizado presentando cada elemento a travs de una ilustracin y su correspondiente leyenda escrita. No obstante, el contenido lingstico constituye un cdigo indescifrable ideado por el mismo autor, quien valindose de un alfabeto original, intenta producir en el destinatario una sensacin infantil, una suerte de regresin proustiana a una poca en la que nos sentbamos frente a un texto en estado de analfabetismo y la comprensin pasaba por un reconocimiento distinto. El texto entero es una stira de los gneros discursivos: an cuando se exime a s mismo de los recursos lingsticos tradicionales, la composicin del discurso se presenta por la forma genrica del cdice y posee todos los rasgos caractersticos que lo hacen un enunciado perfectamente vlido con total plenitud de sentido. Justamente su mayor particularidad reside en el hecho de que asimilando, como es menester, una serie de enunciados ajenos, construye un enunciado propio y, sin embargo, la ubicacin de lo neutro es sorprendentemente difusa. Si lo neutro es aquello que plantea un acuerdo social de intercomprensin y en el Codex Seraphinianus no encontramos ni un solo significante lingstico de esta naturaleza cmo se explica que posea plenitud de sentido? La razn de esto reside en el hecho de que los enunciado no son indiferentes ni independientes unos de otros, sino que se reflejan mutuamente. As pues, la presencia del elemento pictrico aunado a los enunciados ajenos que se reflejan en la expresividad del discurso le otorgan su sentido concluso. Tal y como plantea Bajtn, el objeto del discurso y su sentido no bastan para abarcar la expresividad, que nicamente puede ser entendida en relacin con otros enunciados. Algunos enunciados ajenos que se pueden rastrear en este discurso, van desde la forma genrica del cdice, pasando por la esttica y filosofa del surrealismo, Jorge Luis Borges como sujeto discursivo y probablemente discursos tericos sobre semitica. Volveremos a tocar este tema en breve.En lneas generales, este texto particular es especialmente demostrativo del carcter tanto social como individual de la construccin de sentido. El contenido temtico y la composicin responden a normativas genricas, pero el estilo es absolutamente individual. Tal y como se presenta en un cdice autntico, este se divide en reas de conocimiento delimitadas de la realidad: flora, fauna, artefactos, anatoma, cultura, formas de organizacin social, alimentacin, ciencia, lenguaje y escritura, grupos tnicos Y aade ciertos tpicos propios del universo de fantasa creado por el autor como extravagantes juegos, y criaturas humanoides con funciones sociales particulares. Y aunque es metodolgicamente imposible hallar en l la huellas de todos los discursos ajenos que asimila y a los cuales responde, los contactos propios de los significados de los enunciados con la realidad concreta en esta circunstancia particular, en el marco de nuestra experiencia discursiva individual, nos remiten inevitablemente al mbito del arte. Luigi Serafini es un artista plstico, arquitecto y diseador italiano que desarroll su creacin durante los aos 70. Los enunciados propios de los discursos de las vanguardias artsticas tales como el surrealismo, el dadasmo o la Bauhaus son parte de su repertorio de enunciados ajenos. El Codex Seraphinianus es una respuesta a todo aquello, es una continuacin discursiva del trabajo de Borges; es una rplica a la cosificacin del hombre y la maquinizacin de la vida moderna; es una stira a los aspectos formales de la lengua y a las definiciones genricas de la vida, la organizacin y el sistema social. Es, ante todo, una obra de arte, una manipulacin contestataria de los estilos, de los gneros, de las composiciones. Demuestra a final de cuentas que la expresin no se ha logrado agotar en ningn discurso hasta ahora construido.

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