VVAA. Carta Del Restauro. 1972

download VVAA. Carta Del Restauro. 1972

of 18

Transcript of VVAA. Carta Del Restauro. 1972

  • 8/7/2019 VVAA. Carta Del Restauro. 1972

    1/18

    CARTA DEL RESTAURO 19721

    El Ministerio de Instruccin Pblica en el intento de llegar a criterios uniformes en la

    actividad especfica de la Administracin de Antigedades y Bellas Artes en el campo de laconservacin del patrimonio artstico, ha reelaborado, teniendo en cuenta la opinin del

    Consejo Superior de Antigedades y Bellas Artes, las normas sobre restauracin. Tales

    normas reciben el nombre de "Carta del Restauro 1972", estn precedidas de un breve

    informe y seguidas de cuatro anexos que contienen instrucciones para:

    1. La salvaguardia y restauracin de antigedades;

    2. La forma de proceder en las restauraciones arquitectnicas;

    3. La ejecucin de restauraciones pictricas y escultricas;

    4. La tutela de los centros histricos.

    Los anexos deben considerarse documentos que forman parte de la propia Carta.

    I n fo rm e

    La conciencia de que las obras de arte entendidas en la acepcin ms amplia, que va

    desde el ambiente urbano a los monumentos arquitectnicos, a los de pintura y escultura,

    desde los hallazgos del paleoltico a las expresiones figurativas de las culturas populares

    deben ser tuteladas de forma orgnica e igualitaria, lleva necesariamente a la elaboracin de

    normas tcnico-jurdicas que sancionen los lmites dentro de los cuales debe entenderse la

    conservacin, ya sea como salvaguardia y prevencin, ya como intervencin de restauracinpropiamente dicha. En tal sentido constituye un ttulo de honor de la cultura italiana que,

    como conclusin de una praxis de restauracin que poco a poco se haba ido corrigiendo de

    las arbitrariedades de la restauracin de repristino, se elaborase ya en 1931 un documento

    que fue llamado "Carta del Restauro"2, donde, si bien el objeto quedaba limitado a los

    monumentos arquitectnicos, las normas generales fcilmente podan alcanzar y extenderse

    a toda restauracin incluso de obras de arte pictricas y escultricas.

    Desgraciadamente dicha "Carta de la Restauracin" no tuvo nunca la fuerza de una

    ley, y cuando despus, debido a la creciente toma de conciencia de los peligros a los que

    una restauracin, realizada sin criterios tcnicos oportunos, expona a las obras de arte, se

    entendi en 1938 atender esta necesidad, no slo creando el Instituto Central de

    1Traducida por Mara Jos Martnez Justicia a partir del texto italiano. Se ha mantenido el nombre del

    documento en el idioma original porque se considera que es as como la conocen los profesionales de esta disciplina

    en general, sean italianos o no.

    2N. del T. Tambin he seguido el mismo criterio de mantener el nombre en italiano, por lasmismas razones.

  • 8/7/2019 VVAA. Carta Del Restauro. 1972

    2/18

    Restauracin3

    de obras de arte, sino tambin encargando a una Comisin ministerial la

    elaboracin de normas unificadas que, a partir de la arqueologa, abarcasen todas las ramas

    de las artes figurativas, tales normas, que se podran definir sin duda como areas,

    permanecieron tambin ellas sin fuerza de ley, como instrucciones internas de la

    Administracin, y ni la teora ni la praxis que a continuacin fueron elaboradas por el

    Instituto Central de Restauracin se extendieron a todas las restauraciones de obras de arte

    de la Nacin.

    El fallido perfeccionamiento jurdico de tal reglamentacin sobre restauracin no

    tard en revelarse como pernicioso, tanto por el estado de impotencia en el que quedaba

    frente a las arbitrariedades del pasado tambin en el campo de la restauracin (y sobre todo

    de vaciamientos y alteraciones de ambientes antiguos), sino tambin como consecuencia de

    las destrucciones blicas, cuando un comprensible, aunque muy reprobable sentimentalismo

    frente a los monumentos daados o destruidos, vino a forzar la mano y a llevar a cabo

    restauraciones y reconstrucciones sin las cautelas y precauciones que haban sido la gloria

    de la actuacin italiana en restauracin.No menores daos podan producirse debido a las exigencias de una modernidad mal

    entendida y de un urbanismo vulgar que, en el crecimiento de la ciudad y en razn del

    trfico, llevaba incluso a no respetar ese concepto de ambiente, que haba representado una

    conquista notable de la "Carta del Restauro" y de las sucesivas instrucciones, rebasando el

    criterio restringido del monumento individual. En relacin con el campo ms controlable de

    las obras de arte pictricas y escultricas, aunque una mayor cautela en la restauracin a

    pesar de la falta de normas jurdicas- haya evitado daos graves, como las consecuencias de

    las funestas limpiezas integrales como lamentablemente ha sucedido en el extranjero, sin

    embargo, la exigencia de la unificacin de los mtodos ha resultado imprescindible para

    intervenir con eficacia sobre obras de propiedad privada, obviamente no menos importantes

    para el patrimonio artstico nacional que las de propiedad estatal o en cualquier caso pblica.

    Carta

    Ar t . 1 .- Todas las obras de arte de todas las pocas, en la acepcin ms amplia, que

    va desde los monumentos arquitectnicos a los de pintura y escultura, aunque sean

    fragmentos, y desde el hallazgo paleoltico a las expresiones figurativas de las culturas

    populares y del arte contemporneo, pertenecientes a cualquier persona o ente, con la

    finalidad de su salvaguardia y restauracin, son objeto de las presentes instrucciones que

    toman el nombre de "Carta del Restauro 1972".Art . 2 .- Adems de las obras indicadas en el artculo precedente quedan asimilados a

    stas, para asegurar su salvaguardia y restauracin, los conjuntos de edificios de inters

    monumental, histrico o ambiental, especialmente los centros histricos; las colecciones

    artsticas y las decoraciones de interiores conservadas en su disposicin tradicional; los

    jardines y parques que son considerados de especial importancia.

    Art. 3 .- Entran en el mbito de la presente instruccin, adems de las obras

    3Se refiere, lgicamente, al conocido centro romano, fundado por Cesare Brandi.

  • 8/7/2019 VVAA. Carta Del Restauro. 1972

    3/18

    definidas en los artculos 1 y 2, tambin las operaciones encaminadas a asegurar la

    salvaguardia y restauracin de los restos antiguos hallados en el curso de investigaciones

    terrestres y subacuticas.

    Art. 4 .- Se entiende por salvaguardia cualquier medida conservadora que no

    implique la intervencin directa sobre la obra; se entiende por restauracin cualquier

    intervencin encaminada a mantener vigente, a facilitar la lectura y transmitir ntegramente

    al futuro las obras de arte y los objetos definidos en los artculos precedentes.

    Art. 5 .- Cada Superintendencia e Instituto responsable en materia de conservacin

    del patrimonio histrico-artstico y cultural elaborar un programa anual y especfico de los

    trabajos de salvaguardia y de restauracin, as como de las investigaciones en el subsuelo y

    bajo agua, bien por cuenta del Estado, bien por otros Entes o personas, que ser aprobado

    por el Ministerio de Instruccin Pblica, una vez recabada la opinin del Consejo Superior de

    Antigedades y Bellas Artes. En el mbito de dicho programa, e incluso despus de la

    presentacin del mismo, cualquier intervencin sobre las obras definidas en el artculo 1

    deber ser ilustrada y justificada mediante un informe tcnico en el que se hagan constar,adems de los problemas de conservacin de la obra, el estado actual de la misma, la

    naturaleza de las intervenciones necesarias y el coste econmico que se estime oportuno

    para hacerles frente.

    Dicho informe ser igualmente aprobado por el Ministerio de Instruccin Pblica,

    previo informe para los casos urgentes o dudosos y para aquellos previstos por la ley del

    Consejo Superior de Antigedades y Bellas Artes.

    Art. 6 .- En relacin con los fines mencionados en el artculo 4, deben establecerse

    las operaciones de salvaguardia y restauracin y en ellas se prohbe, para todas las obras

    definidas en los artculos 1, 2 y 3, lo siguiente:

    1) Complementos estilsticos o analgicos, incluso en formas simplificadas y aunque

    existan documentos grficos o plsticos que puedan indicar cul hubiera sido el estado o el

    aspecto de la obra completa;

    2) Remociones o demoliciones que cancelen el paso de la obra de arte a travs del

    tiempo, a menos que se trate de limitadas alteraciones deformadoras o incongruentes

    respecto a los valores histricos de la obra o de complementos en estilo que la falsifiquen;

    3) Remociones, reconstrucciones o traslados a emplazamientos distintos de los

    originales; a menos que esto no est determinado por razones superiores de conservacin;

    4) Alteraciones de las condiciones accesorias o ambientales en las que ha llegado

    hasta nuestro tiempo la obra de arte, el conjunto monumental o ambiental, el conjunto dedecoracin interior, el jardn, el parque, etc.

    5) Alteracin o remocin de las ptinas.

    Art . 7 .- En relacin con los mismos fines del artculo 6, e indistintamente para todas

    las obras definidas en los artculos 1, 2 y 3, se admiten las siguientes operaciones o

    reintegraciones:

    1) Aadidos de partes en funcin esttica o reintegraciones de pequeas partes

    histricamente verificadas, llevadas a cabo segn los casos o determinando de forma clara la

    periferia de las integraciones o bien adoptando material diferenciado aunque acorde,

  • 8/7/2019 VVAA. Carta Del Restauro. 1972

    4/18

    claramente distinguible a simple vista, en particular en los puntos de encuentro con las

    partes antiguas, que adems deben ser marcadas y fechadas donde sea posible;

    2) Limpiezas que, para las pinturas y las esculturas policromadas, no deben llegar

    nunca al esmalte del color, respetando la ptina y los posibles barnices antiguos; para todas

    las otras clases de obras no debern llegar a la superficie desnuda de la materia que

    conforma las propias obras de arte;

    3) Anastilosis documentada con seguridad, recomposicin de obras fragmentadas,

    sistematizacin de obras lagunosas, reconstruyendo los intersticios de poca entidad con

    tcnica claramente diferenciable a simple vista o con zonas neutras colocadas en un nivel

    diferente al de las partes originales, o dejando a la vista el soporte original, de todas formas

    no integrando nunca ex novo zonas figuradas o insertando elementos determinantes para la

    figuratividad de la obra;

    4) Modificaciones y nuevas inserciones con fines estticos y de conservacin de la

    estructura interna o de sustento o soporte, a condicin de que, una vez finalizadas las

    operaciones, su aspecto no resulte alterado ni en el cromatismo ni en la materia visible en lasuperficie;

    5) Nueva ambientacin o colocacin de la obra, cuando no existan ya o se hayan

    destruido el ambiente o la sistematizacin tradicional, o cuando las condiciones de

    conservacin exijan el traslado.

    Art. 8 .- Toda intervencin sobre la obra, o junto a ella, segn los fines definidos en

    el artculo 4, debe realizarse de tal forma y con tales tcnicas y materiales que puedan dar

    la seguridad de que en el futuro sean posibles nuevas intervenciones de salvaguardia o

    restauracin. Adems, toda intervencin debe ser estudiada previamente y argumentada

    por escrito (ltimo apartado del art. 5) y durante su curso deber llevarse un diario, al que

    seguir un informe final, con la documentacin fotogrfica de antes, durante y despus de la

    intervencin. Adems se documentarn todas las investigaciones y anlisis que

    eventualmente se realicen con el auxilio de la fsica, la qumica, la microbiologa y otras

    ciencias. De todas estas documentaciones se depositar una copia en el archivo de la

    Superintendencia competente y se enviar otra al Instituto Central de Restauracin.

    En el caso de limpiezas, en un lugar de la zona tratada, a ser posible marginal,

    deber conservarse un testigo del estado anterior a la intervencin, mientras que en el caso

    de aadidos, las partes eliminadas debern ser conservadas o documentadas, en la medida

    de lo posible, en un archivo-depsito especial de las Superintendencias competentes.

    Art. 9 .- El uso de nuevos procedimientos de restauracin y de nuevos materiales,respecto a los procedimientos y materiales cuyo uso est vigente o, en todo caso, admitido,

    deber ser autorizado por el Ministerio de Instruccin Pblica, bajo el conforme y justificado

    parecer del Instituto Central de Restauracin, al que corresponder tambin la promocin de

    actuaciones en el propio Ministerio para desaconsejar materiales y mtodos anticuados,

    nocivos y en cualquier caso no contrastados, sugerir nuevos mtodos y el uso de nuevos

    materiales y definir las investigaciones a las que se debe dotar con un equipamiento y con

    especialistas distintos al equipamiento y plantilla disponibles.

    Art . 10.- Las medidas encaminadas a preservar de las acciones degradantes y de las

  • 8/7/2019 VVAA. Carta Del Restauro. 1972

    5/18

    variaciones atmosfricas, trmicas e higromtricas las obras definidas en los artculos 1, 2 y

    3, no debern alterar sensiblemente el aspecto de la materia y el color de las superficies, ni

    exigir modificaciones sustanciales y permanentes del ambiente en el que las obras nos han

    sido transmitidas histricamente. Sin embargo, en el caso de que fuesen indispensables

    modificaciones de este gnero, a causa del inters superior de la conservacin, tales

    modificaciones debern ser realizadas de forma que se evite cualquier duda sobre la poca

    en la que han sido hechas y del modo ms discreto.

    Art. 11.- Los mtodos especficos de los que nos valemos como procedimientos de

    restauracin, especialmente para los monumentos arquitectnicos, pictricos, escultricos y

    para los centros histricos en su conjunto, as como para la ejecucin de las excavaciones,

    vienen especificados en los anexos A, B, C, y D de las presentes instrucciones.

    Art. 12.- En los casos en los que sea dudosa la atribucin de las competencias

    tcnicas y surjan conflictos en este tema, decidir el Ministro a la vista de los informes de los

    Superintendentes o Directores de los Institutos interesados, una vez consultado el Consejo

    Superior de Antigedades y Bellas Artes.

    ANEXO A

    I nstr ucciones para la salvaguardia y restauracin de

    Ant igedades

    Adems de las normas generales contenidas en los artculos de la "Carta del

    Restauro", en el campo de las antigedades es necesario tener presentes exigencias

    especiales relativas a la salvaguardia del subsuelo arqueolgico y a la conservacin y

    restauracin de los hallazgos acaecidos durante las prospecciones terrestres o subacuticas

    con relacin al artculo 3.

    El problema prioritario de la salvaguardia del subsuelo arqueolgico est

    necesariamente ligado a la serie de disposiciones y leyes referidas a la expropiacin, a la

    aplicacin de vnculos especiales, a la creacin de reservas y parques arqueolgicos. En

    conexin con las distintas medidas que hay que tomar en los diferentes casos, ser

    imprescindible en todo caso el oportuno reconocimiento del terreno, encaminado a recoger

    todos los datos posibles localizados en superficie, los materiales cermicos esparcidos, la

    documentacin de elementos que eventualmente hayan aflorado, recurriendo adems a la

    ayuda de la fotografa area a las prospecciones (elctricas, electromagnticas, etc.) del

    terreno, de modo que el conocimiento lo ms completo posible de la naturaleza arqueolgicadel mismo permita la adopcin de las directrices ms oportunas para la aplicacin de las

    normas de salvaguardia, el establecimiento de la naturaleza y lmites de los vnculos, la

    redaccin de los planes reguladores y la vigilancia en el caso de que se lleven a cabo labores

    agrcolas o edilicias. Para la salvaguardia del patrimonio arqueolgico submarino, ligada a las

    leyes y disposiciones que afectan a las excavaciones subacuticas, y dirigidas a impedir la

    indiscriminada e irresponsable violacin de los restos de navos antiguos y de su carga, de

    ruinas sumergidas y de esculturas hundidas, se imponen medidas muy especiales,

    comenzando por la exploracin sistemtica de las costas italianas con personal

  • 8/7/2019 VVAA. Carta Del Restauro. 1972

    6/18

    especializado, con el fin de llegar a la elaboracin de una Forma Maris con la indicacin de

    todos los restos y monumentos sumergidos, tanto para protegerlos como para proceder a la

    programacin de las investigaciones cientficas subacuticas.

    La recuperacin de los restos de una embarcacin antigua, no deber iniciarse antes

    de haber preparado los locales y el equipamiento necesario, que permita poner a resguardo

    los materiales recuperados del fondo marino, as como todos los tratamientos especficos

    que requieren sobre todo las partes lgneas, mediante abundantes y prolongados lavados,

    baos de sustancias consolidantes, que determinan las condiciones del aire y de la

    temperatura. Los sistemas de extraccin y recuperacin de embarcaciones sumergidas

    debern de ser estudiados en cada caso, con relacin al estado particular de los restos,

    teniendo en cuenta tambin las experiencias adquiridas internacionalmente en este campo,

    sobre todo en los ltimos decenios. En estas especiales condiciones de rescate as como en

    las exploraciones arqueolgicas terrestres normales- debern considerarse las especiales

    exigencias de conservacin y restauracin de los objetos segn su tipo y su materia: por

    ejemplo, para los materiales cermicos y para las nforas se tomarn todas las precaucionesque permitan la identificacin de posibles residuos o huellas de su contenido, que

    constituyen datos preciosos para la historia del comercio y de la vida en la antigedad;

    adems, deber prestarse especial atencin al examen y fijacin de posibles inscripciones

    pintadas, especialmente en el cuerpo de las nforas.

    Durante las operaciones arqueolgicas terrestres, mientras las normas sobre la

    recuperacin y documentacin se engloban ms especficamente dentro del marco de las

    normas relativas a la metodologa de las excavaciones, por lo que concierne a la

    restauracin deben observarse las medidas que, durante las operaciones de excavacin,

    garanticen la conservacin inmediata de los hallazgos, especialmente si son susceptibles de

    un deterioro ms fcil, y la posterior posibilidad de salvaguardia y restauracin definitivas.

    En el caso de hallazgos de elementos sueltos de decoraciones de estuco, pintura,

    mosaico, u opus sectile, es necesario antes y durante su remocin mantenerlos unidos con

    lechadas de yeso, con gasas y adhesivos adecuados, de forma que se facilite su

    recomposicin y restauracin en el laboratorio. En la recuperacin de vidrios es aconsejable

    no proceder a limpieza alguna durante la excavacin ya que estn fcilmente sujetos a la

    exfoliacin. Por lo que respecta a cermicas y terracotas es indispensable no perjudicar con

    lavados o limpiezas precipitadas la posible presencia de pinturas, barnices e inscripciones.

    Se impone una delicadeza especial al recoger objetos o fragmentos de metal, sobre todo si

    estn oxidados, recurriendo, adems de a sistemas de consolidacin, tambin a soportesadecuados cuando sea necesario. Se deber prestar especial atencin a las posibles huellas

    o improntas de tejidos. En el marco de la arqueologa pompeyana, sobre todo, est

    comprendido el uso, ya experimentado amplia y brillantemente, de obtener moldes de los

    negativos de plantas y de materiales orgnicos frgiles mediante lechadas de yeso aplicadas

    en los huecos que han quedado en el terreno.

    Con el fin de cumplir estas instrucciones se hace necesario que durante el desarrollo

    de las excavaciones se garantice la disponibilidad de restauradores preparados, cuando sea

    necesario, para una primera intervencin de recuperacin y fijacin.

  • 8/7/2019 VVAA. Carta Del Restauro. 1972

    7/18

    Con particular atencin deber ser considerado el problema de la restauracin de

    aquellas obras de arte destinadas a permanecer o a ser reinstaladas, tras su extraccin, en

    el lugar del hallazgo, especialmente pinturas y mosaicos. Se han experimentado con xito

    varios tipos de soportes, bastidores y pegamentos en relacin con las condiciones climticas,

    atmosfricas e higromtricas, que permiten la reinstalacin de las pinturas en ambientes

    adecuadamente protegidos de un edificio antiguo, evitando el contacto directo con las

    paredes y proporcionando, en cambio, un montaje fcil y una conservacin segura. De todas

    formas, deben evitarse integraciones, dando a las lagunas una tonalidad semejante a la del

    revoco en basto, as como el uso de barnices o ceras para reavivar los colores, porque

    siempre estn sujetas a alteraciones, siendo suficiente una esmerada limpieza de las

    superficies originales.

    Respecto los mosaicos es preferible, cuando sea posible, su reinstalacin en el

    edificio del que provienen y de cuya decoracin constituyen parte integrante, y, en tal caso,

    despus de su arranque (que con los mtodos modernos puede ser hecho incluso en

    grandes superficies sin necesidad de realizar cortes) el sistema de asentarlos mediante unanima metlica inoxidable resulta, hasta ahora, el ms idneo y resistente a los agentes

    atmosfricos. Por el contrario, para los mosaicos destinados a su exposicin en el museo, es

    ya ampliamente utilizado el soporte sandwich de materiales ligeros, resistente y manejable.

    Los interiores con pinturas parietales in situ (cuevas prehistricas, tumbas,

    pequeos recintos) requieren especiales exigencias de salvaguardia debido a los peligros

    derivados de la alteracin climtica; en estos casos es necesario mantener constantes dos

    factores esenciales para la mejor conservacin de las pinturas: el grado de humedad

    ambiental y la temperatura ambiente. Tales factores son fcilmente alterados por causas

    externas y ajenas al ambiente, especialmente por la afluencia de visitantes, por la

    iluminacin excesiva, por fuertes alteraciones atmosfricas externas; por ello se hace

    necesario arbitrar medidas especiales, incluso en la admisin de visitantes, mediante

    cmaras de climatizacin interpuestas entre el ambiente antiguo, que hay que proteger, y el

    exterior. Tales medidas vienen siendo aplicadas ya en Francia y en Espaa en el acceso a

    los monumentos prehistricos pintados, y seran deseables tambin en muchos de nuestros

    monumentos (tumbas de Tarquinia).

    Para la restauracin de los monumentos arqueolgicos, adems de las normas

    generales contenidas en la "Carta del Restauro", y en las instrucciones para la forma de

    actuar en las restauraciones arquitectnicas, habr que tener presentes algunas exigencias

    en relacin a las tcnicas antiguas peculiares. Ante todo, cuando para la restauracincompleta de un monumento -que adems comporta necesariamente su estudio histrico-,

    se deba proceder a catas de excavacin, al descubrimiento de los cimientos, las operaciones

    deben ser llevadas a cabo con el mtodo estratigrfico que puede ofrecer datos preciosos

    sobre las vicisitudes y fases del propio edificio.

    Para la restauracin de paos de muro de opus incertum, quasi reticulatum,

    reticulatum y vittatum se utiliza el mismo tipo de material y los mismos tipos de formato, se

    debern mantener las partes restauradas en un plano ligeramente ms rebajado, mientras

    que para los paos de muro de ladrillo ser oportuno puntear o rayar la superficie de los

  • 8/7/2019 VVAA. Carta Del Restauro. 1972

    8/18

    ladrillos modernos.

    Para la restauracin de las estructuras de sillera4

    se ha experimentado con xito el

    sistema de reproducir los sillares con las medidas antiguas, usando no obstante lajas del

    mismo material unidas con mortero mezclado en superficie con polvo del mismo mrmol

    para obtener una entonacin cromtica.

    Como alternativa al retranqueo de la superficie en las reintegraciones de restauracin

    moderna, puede ser til practicar un surco de contorno que delimite la parte restaurada o

    insertar una delgada lmina de materiales diferentes. Tambin se puede aconsejar en

    muchos casos un tratamiento diferenciado de la superficie de los nuevos materiales

    mediante un oportuno picado5

    de las superficies modernas. Por ltimo, ser conveniente

    colocar en cada zona restaurada, placas con la fecha o insertar siglas o marcas especiales.

    El uso del cemento con superficie revestida de polvo del mismo material del

    monumento que se restaura puede resultar tambin til en la integracin de tambores de

    columnas antiguas de mrmol, de tufo o calizas, estudiando la obtencin de un aspecto ms

    o menos rstico con relacin al tipo de monumento; en el mbito romano el mrmol blancopuede ser reintegrado con travertino o caliza, en combinaciones ya experimentadas con

    xito (restauracin de Valadier en el Arco de Tito). En los monumentos antiguos, y

    particularmente en los de poca arcaica o clsica, se debe evitar la combinacin de

    materiales distintos y anacrnicos en las partes restauradas, que resulta estridente y

    ofensiva incluso desde el punto de vista cromtico, a la vez que se pueden utilizar diferentes

    recursos para diferenciar el uso del mismo material con el que est construido el

    monumento y que es preferible mantener en las restauraciones.

    Constituye un problema peculiar de los monumentos arqueolgicos la forma de cubrir

    los muros deteriorados, en los cuales hay que mantener ante todo la lnea irregular del perfil

    de la ruina, y se ha experimentado la aplicacin de una capa de mortero mezclada con

    cermica molida que parece dar los mejores resultados, tanto desde el punto de vista

    esttico, como del de la resistencia a los agentes atmosfricos. Respecto al problema

    general de la consolidacin de los materiales arquitectnicos y de las esculturas al aire libre,

    se han de evitar experimentos con mtodos no comprobados suficientemente y que puedan

    producir daos irreparables.

    Las medidas para la restauracin y conservacin de los monumentos arqueolgicos

    deben ser estudiadas adems con relacin a las diversas exigencias climticas de los

    distintos ambientes, especialmente diferentes en Italia.

    ANEXO B

    I nstr ucciones para la e jecucin de restaur aciones

    arqui tectnicas

    4Enla terminologa latina -opus quadratum-.

    5Realizado con el escoplo o el cincel -el trmino usado en el original es scalpellatura-.

  • 8/7/2019 VVAA. Carta Del Restauro. 1972

    9/18

    Supuesto que las obras de mantenimiento realizadas oportunamente aseguren larga

    vida a los monumentos, evitando que se agraven sus daos, se recomienda el mayor

    cuidado posible en la vigilancia continua de los inmuebles, adoptando medidas de carcter

    preventivo con el fin de evitar intervenciones de mayor amplitud.

    Adems, se recuerda la necesidad de considerar todas las operaciones de

    restauracin bajo un perfil sustancialmente conservador, respetando todos los elementos

    aadidos y evitando en todo caso intervenciones innovadoras o de repristino.

    Siempre con el fin de asegurar la supervivencia de los monumentos, se ha venido

    considerando la posibilidad de nuevos usos de los edificios monumentales, cuando stos no

    resulten incompatibles con los intereses histrico-artsticos. Las obras de adaptacin

    debern limitarse al mnimo, conservando escrupulosamente las formas externas y evitando

    alteraciones sensibles de la individualidad tipolgica del organismo constructivo y de la

    secuencia de los recorridos internos. La redaccin del proyecto de restauracin de una obra

    arquitectnica debe estar precedida de un estudio atento del monumento, elaborado desde

    distintos puntos de vista (que tenga en cuenta su posicin en el contexto territorial o en eltejido urbano, los aspectos tipolgicos, las apariencias y cualidades formales, los sistemas y

    caracteres constructivos, etc.) tanto con relacin a la obra original, como tambin a los

    posibles aadidos y modificaciones. Parte integrante de este estudio sern las

    investigaciones bibliogrficas, iconogrficas y de archivo, etc., para recabar todos los datos

    histricos posibles. El proyecto se basar en un completo levantamiento planimtrico y

    fotogrfico, interpretado tambin bajo el aspecto metrolgico, de los trazados reguladores y

    de los sistemas proporcionales y comprender un cuidadoso estudio para verificar las

    condiciones de estabilidad.

    La ejecucin de los trabajos pertinentes a la restauracin de monumentos, que a

    menudo consisten en operaciones muy delicadas y siempre de gran responsabilidad, deber

    ser confiada a empresas especializadas y si es posible en rgimen de "adjudicacin directa",

    en lugar de "por contrata" o "subasta".

    Las restauraciones deben ser continuamente vigiladas y dirigidas para asegurarse de

    su buena ejecucin y para poder intervenir rpidamente cuando aparezcan datos nuevos,

    dificultades o desplomes de muros; para evitar, en fin, especialmente cuando intervienen la

    piqueta y el martillo, que desaparezcan elementos antes ignorados o que eventualmente

    han pasado desapercibidos en la indagacin previa, pero que son ciertamente tiles para el

    conocimiento del edificio y para la direccin de la restauracin. En particular, antes de

    raspar, pintar, o eliminar eventualmente enlucidos, el director de los trabajos debe constatarla existencia o no de cualquier huella de decoracin, cules fueron las texturas originales y

    el colorido de las paredes y de las bvedas.

    Constituye una exigencia fundamental de la restauracin el respetar y salvaguardar

    la autenticidad de los elementos constructivos. Este principio debe siempre guiar y

    condicionar la eleccin de las operaciones. Por ejemplo, en el caso de muros con desplomes,

    incluso cuando necesidades perentorias sugieran su demolicin y reconstruccin, antes que

    nada ha de examinarse e intentarse la posibilidad de enderezarlos sin sustituir la

    construccin original. Del mismo modo, la sustitucin de las piedras corrodas solo podr

  • 8/7/2019 VVAA. Carta Del Restauro. 1972

    10/18

    producirse motivada por graves exigencias previamente comprobadas.

    Las sustituciones y posibles integraciones de paramentos murales, donde sea

    necesario y siempre en los lmites ms restringidos, debern ser siempre distinguibles de los

    elementos originales, diferenciando los materiales o las nuevas superficies empleadas; pero

    en general parece preferible realizar a todo lo largo del contorno de la integracin una seal

    clara y persistente que testimonie los lmites de la intervencin. Esto podr lograse con

    laminillas de metal idneo, con una serie continua de pequeos fragmentos de ladrillo o con

    surcos visiblemente ms o menos anchos y profundos segn los diferentes casos.

    La consolidacin de las piedras u otros materiales deber intentarse

    experimentalmente cuando los mtodos ampliamente probados por el "Istituto Centrale del

    Restauro" den garantas efectivas.

    Deber adoptarse todo tipo de precaucin para evitar el agravamiento de la

    situacin; asimismo, debern ponerse en prctica todas las operaciones encaminadas a

    eliminar las causas de los daos. Por ejemplo, apenas se observen sillares atravesados por

    grapas o pernos de hierro que se hinchan con la humedad, conviene desmontar la partedaada y sustituir el hierro por bronce o cobre; o mejor por acero inoxidable que ofrece la

    ventaja de no manchar las piedras.

    Las esculturas de piedra colocadas en el exterior de los edificios o en las plazas

    deben ser vigiladas, interviniendo cuando sea posible adoptar, a travs de la praxis indicada

    ms arriba, un mtodo adecuado de consolidacin o de proteccin aunque sea temporal.

    Cuando esto resulte imposible, convendr trasladar la escultura a un local cubierto.

    Para la buena conservacin de las fuentes de piedra o de bronce, es necesario

    descalcificar el agua, eliminando las incrustaciones de cal y las limpiezas peridicas

    inadecuadas.

    La ptina de la piedra debe ser conservada por evidentes razones histricas,

    estticas e incluso tcnicas, ya que, en general, desempea funciones de proteccin, como

    lo demuestran las corrosiones que se inician a partir de las lagunas de la ptina. Se pueden

    eliminar las materias acumuladas sobre las piedras (residuos polvorientos, holln, guano de

    paloma, etc.) usando cepillos vegetales o chorros de aire a presin moderada. Por tanto,

    debern evitarse los cepillos metlicos y los rascadores, as como tambin debern

    excluirse, en general, chorros de arena natural, de agua y de vapor a elevada presin e

    incluso son desaconsejables los lavados de cualquier tipo.

    AN EXO CI nstru cciones para la e j ecucin de restauracin de

    p intu ras y escul tu ras

    Operaciones pre l im inares.

    La primera operacin que hay que realizar, antes de toda intervencin sobre

    cualquier obra pictrica o escultrica, es un reconocimiento cuidadoso de su estado de

    conservacin. En tal reconocimiento se incluye la comprobacin de los diferentes estratos

    materiales de que pueda estar compuesta la obra, y si son originales o aadidos, y asimismo

  • 8/7/2019 VVAA. Carta Del Restauro. 1972

    11/18

    la determinacin aproximada de las distintas pocas en que se produjeron las

    estratificaciones, modificaciones y adiciones en general. A continuacin deber redactarse

    un informe que constituir parte integrante del programa y el comienzo del diario de

    restauracin. Seguidamente debern tomarse las fotografas necesarias de la obra para

    documentar el estado previo a la intervencin restauradora; estas fotografas, segn los

    casos, debern realizarse, adems de con luz natural, con luz monocromtica, con rayos

    ultravioleta sencillos o filtrados, y con rayos infrarrojos. Es siempre aconsejable hacer

    radiografas, incluso en los casos en que a simple vista no se aprecien superposiciones. En el

    caso de pinturas muebles, deber fotografiarse tambin el reverso de la obra.

    Si a partir de los documentos fotogrficos que sern detallados en el diario de

    restauracin- se observasen elementos problemticos, deber reflejarse dicha problemtica.

    Despus de haber obtenido las fotografas, debern realizarse catas mnimas, en

    puntos que no sean vitales para la obra, que abarquen todos los estratos hasta el soporte, y

    as quedarn determinadas las secciones estratigrficas, siempre que existan

    superposiciones, y podr determinarse tambin el estado de la preparacin.Deber sealarse en la fotografa de luz natural el punto preciso de las pruebas y,

    asimismo, deber ponerse en el diario de restauracin una nota de referencia a la fotografa.

    Por lo que respecta a las pinturas murales, o sobre piedra, terracota o cualquier otro

    soporte inmvil, debern determinarse las condiciones de ste en relacin con la humedad,

    definiendo si procede de filtraciones, condensaciones o capilaridad; deben tomarse muestras

    del mortero y del conjunto de los materiales del muro, determinado su grado de humedad.

    Siempre que se adviertan o se supongan formaciones de hongos, se realizarn

    asimismo anlisis microbiolgicos.

    El problema ms especfico de las esculturas, cuando no se trate de esculturas

    barnizadas o policromadas, ser el de determinar el estado de conservacin de la materia en

    que se realizaron y eventualmente obtener radiografas.

    Precauciones durante la e jecucin de la in terv encin restauradora.

    Las investigaciones preliminares habrn proporcionado los medios para orientar la

    intervencin en la direccin adecuada, ya se trate de una simple limpieza, de un

    asentamiento de estratos, de eliminacin de repites, de un traslado de soporte o de una

    reconstruccin de fragmentos. Sin embargo, el dato que sera el ms importante respecto a

    la pintura, la determinacin de la tcnica empleada, no siempre podr tener una respuesta

    cientfica y, por tanto, la cautela y la experimentacin con los materiales que se vayan autilizar en la restauracin no debern considerarse cuestiones superfluas de un conocimiento

    genrico (basado en informacin emprica, y no cientfica) de la tcnica utilizada en la

    pintura.

    Por lo que respecta a la limpieza, sta podr ser realizada principalmente de dos

    formas: con medios mecnicos o con medios qumicos. Debe excluirse cualquier sistema que

    impida la visualizacin o que dificulte la posibilidad de intervencin o control directo en la

    pintura (como el sistema Pethen Koppler y similares).

    Los medios mecnicos (bistur) debern ser usados siempre con la ayuda del

  • 8/7/2019 VVAA. Carta Del Restauro. 1972

    12/18

    pinacoscopio, aunque no siempre se trabaje bajo su lente.

    Los medios qumicos (disolventes) han de ser de tal naturaleza que puedan ser

    neutralizados inmediatamente, adems de ser voltiles y de que no se fijen de forma

    duradera sobre los estratos de la pintura. Antes de usarlos debern llevarse a cabo

    experimentos para asegurarse de que no puedan atacar el barniz original de la pintura, all

    donde el corte estratigrfico revele la presencia de una capa que presumiblemente pueda

    identificarse como tal.

    Antes de proceder a la limpieza, cualquiera que sea el medio con que se lleve a cabo,

    es necesario asimismo controlar minuciosamente la estabilidad de la capa pictrica sobre su

    soporte, y proceder al asentamiento de las partes desprendidas o en peligro de

    desprendimiento. Este asentamiento podr realizarse, segn los casos, de forma localizada o

    con la aplicacin de un adhesivo extendido de manera uniforme, cuya penetracin puede

    asegurarse con una fuente de calor constante, si no es peligrosa para la conservacin de la

    pintura. Pero siempre que se haya realizado un asentamiento, constituye una regla estricta

    la eliminacin de cualquier resto del adhesivo de la superficie pictrica. Para este fin, tras elasentamiento, deber realizarse un minucioso examen con la ayuda del pinacoscopio.

    Cuando haya que proceder a la proteccin general del anverso de la pintura, debido a

    la necesidad de realizar operaciones en el soporte, es imprescindible que tal proteccin se

    realice despus de la consolidacin de las partes levantadas o desprendidas, y con una cola

    de muy fcil disolucin y distinta a la empleada en el asentamiento del color.

    Si el soporte es de tabla y aparece atacado por carcoma, termitas, etc., deber

    someterse la pintura a la accin de gases insecticidas adecuados, que no puedan daar la

    pintura. Debe evitarse la impregnacin con lquidos.

    Siempre que el estado del soporte, o el de la imprimacin, o el de ambos (en

    pinturas de soporte mueble) exija la destruccin o bien la remocin del soporte y la

    sustitucin de la imprimacin, ser necesario que la imprimacin antigua sea levantada

    ntegramente a mano con el bistur, ya que rebajarla no sera suficiente, a menos que sea

    slo el soporte la parte debilitada y la imprimacin se mantenga en buen estado. Es

    aconsejable, siempre que sea posible, conservar la imprimacin para mantener la superficie

    pictrica en su conformacin original.

    En la sustitucin del soporte lgneo, cuando sea indispensable, debe excluirse la

    utilizacin de un nuevo soporte compuesto de madera aglomerada, y slo es aconsejable

    efectuar el traslado a un soporte rgido cuando se tenga la completa certeza de que ste no

    tendr un ndice de dilatacin diferente al del soporte eliminado. Asimismo, el adhesivo delsoporte a la tela de la pintura trasladada deber ser fcilmente soluble, sin daar la capa

    pictrica ni el adhesivo que une los estratos superficiales a la tela del traslado.

    Cuando el soporte de madera original est en buen estado, pero exista la necesidad

    de enderezarlo, reforzarlo o embarrotarlo, debe tenerse presente que, donde no sea

    propiamente indispensable para la fruicin esttica de la pintura, es siempre mejor no

    intervenir sobre una madera antigua ya estabilizada. Si se interviene, hay que hacerlo con

    reglas tecnolgicas muy precisas, que respeten el movimiento de las fibras de la madera. Se

    deber tomar una muestra de sta para determinar la especie botnica concreta y averiguar

  • 8/7/2019 VVAA. Carta Del Restauro. 1972

    13/18

    su ndice de dilatacin. Cualquier aadido habr de realizarse con madera ya estabilizada y

    en pequeos fragmentos, para que resulte lo ms inerte posible respecto al soporte antiguo

    en el que se inserta.

    El embarrotado, cualquiera que sea el material con que se haga, debe asegurar sobre

    todo los movimientos naturales de la madera a la que queda fijado.

    En el caso de pinturas sobre tela, la posibilidad de un traslado debe ser realizada con

    la destruccin gradual y controlada de la tela deteriorada, mientras que para la eventual

    imprimacin (o preparacin) debern usarse las mismas precauciones que para las tablas.

    Cuando se trate de pinturas sin preparacin, en las que el color, muy diluido, se aplic

    directamente sobre el soporte (como en los bocetos de Rubens) no ser posible su traslado.

    La operacin de reentelado, en el caso de que se realice, debe evitar a la pintura

    compresiones excesivas y temperaturas demasiado altas. Deben excluirse siempre y

    taxativamente operaciones de aplicacin de una pintura sobre tela en un soporte rgido

    (maruflage).

    Los bastidores de la nueva tela deben estar concebidos de tal manera que asegurenno slo la tensin justa, sino tambin la posibilidad de establecerla automticamente

    cuando, a causa de las variaciones trmicas o higromtricas, la tensin llegue a ceder.

    Precauciones que hay que tener presentes en la e jecucin de la restauracin de

    p in tu ras m ura les.

    En las pinturas sobre soporte mvil la determinacin de la tcnica puede dar lugar a

    veces a una investigacin sin conclusin definitiva y, hoy por hoy, irresoluble incluso en

    cuanto a las categoras genricas de pintura al temple, al leo, a la encastica, a la acuarela

    o al pastel; en las pinturas murales, realizadas sobre preparacin o bien directamente sobre

    mrmol, piedra, etc., la definicin del aglutinante utilizado no ser a veces menos

    problemtica (como en lo que se refiere a las pinturas murales de poca clsica); pero, al

    mismo tiempo, todava ms indispensable para proceder a cualquier operacin de limpieza,

    asentamiento, strappo o distacco6. Sobre todo si se ha de proceder a su arranque -strappo o

    distacco-, antes de la aplicacin de las telas protectoras, mediante un adhesivo soluble, es

    necesario asegurarse de que el disolvente no atacar o estropear el aglutinante de la

    pintura que hay que restaurar.

    Adems, si se tratase de un temple, y generalmente en las partes al temple de los

    frescos, donde determinados colores no podan aplicarse al buen fresco, ser imprescindible

    un asentamiento preventivo.A veces, cuando los colores de la pintura mural se presentan en un estado ms o

    menos avanzado de pulverizacin, ser necesario asimismo un tratamiento especial para

    intentar que el color pulverizado se pierda en la menor medida posible.

    Respecto al asentamiento del color, la investigacin deber orientarse hacia un

    fijativo que no sea de naturaleza orgnica, que altere lo menos posible los colores originales

    6N. de la T. Strappo: arranque slo de la pelcula pictrica. Distacco (o stacco): Arranque de la pelcula ms el

    revoco. He mantenido la terminologa italiana por ser ya lugar comn en el lenguaje de la restauracin.

  • 8/7/2019 VVAA. Carta Del Restauro. 1972

    14/18

    y no se haga irreversible con el tiempo.

    El color pulverulento ser analizado para ver si contiene formaciones de hongos y

    cules son las causas a que puede atribuirse su desarrollo. Una vez establecidas dichas

    causas y tras elegir un fungicida adecuado, ser necesario cerciorarse de que no dae la

    pintura y pueda ser eliminado fcilmente.

    Cuando por necesidad haya que plantearse el arranque de la pintura de su soporte

    original, entre los mtodos que se pueden elegir con equivalentes probabilidades de xito, se

    recomienda el strappo, por la posibilidad de recuperar la sinopia preparatoria, en el caso de

    los frescos, y tambin porque libera la pelcula pictrica de residuos de un intonaco7

    degradado o en mal estado.

    Respecto al soporte sobre el que se volver a instalar la pelcula pictrica, tiene que

    ofrecer las mximas garantas de estabilidad, inercia y neutralidad (ausencia de PH);

    adems, ser necesario que pueda ser construido con las mismas dimensiones que la

    pintura, sin empalmes intermedios que inevitablemente saldran a la superficie de la pelcula

    pictrica con el paso del tiempo. El adhesivo con el que se fije la tela pegada a la pelculapictrica sobre el nuevo soporte deber poder eliminarse con toda facilidad con un

    disolvente que no dae la pintura.

    Cuando se prefiera mantener la pintura trasladada sobre lienzo, naturalmente

    reforzado, el bastidor deber ser construido de tal manera -y con tales materiales- que

    tenga la mxima estabilidad, elasticidad y automatismo para establecer la tensin que, por

    cualquier razn -climtica o de otra ndole- pudiese variar.

    Cuando se trate de arrancar mosaicos en lugar de pinturas, habr que asegurarse de

    que las teselas, donde no conformen una superficie totalmente plana, sean arrancadas

    adecuadamente de forma que puedan ser fijadas y dispuestas en su colocacin original.

    Antes de la aplicacin del engasado y de la armadura de sostn, habr que cerciorarse del

    estado de conservacin de las teselas y eventualmente consolidarlas. Especial cuidado habr

    que prestar a la conservacin de las caractersticas tectnicas de la superficie.

    Precauciones que hay que tener presentes en la e jecucin de restauraciones de

    obras escul tr icas.

    Despus de determinar el material y en su caso la tcnica con que han sido

    realizadas las esculturas (si en mrmol, piedra, escayola, cartn-piedra, terracota, cermica

    vidriada, arcilla sin cocer, con o sin pintura, etc.), donde no haya partes pintadas y sea

    necesaria una limpieza, debe excluirse la ejecucin de lavados que, aunque dejen intacta lamateria, ataquen la ptina.

    Por ello, en el caso de esculturas halladas en excavaciones o en el agua (mar, ros,

    etc.), si hubiera incrustaciones, debern ser quitadas preferiblemente con medios

    mecnicos, o, si se hace con disolventes, tendrn que ser de tal naturaleza que no ataquen

    7N. de la T. Revoco fino sobre el que se aplica la pintura al fresco y que se prepara por jornadas sobre el arriccio;

    en castellano equivale a enlucido, pero la terminologa italiana -mucho ms precisa en este caso- es frecuentemente

    utilizada en el lenguaje de los restauradores.

  • 8/7/2019 VVAA. Carta Del Restauro. 1972

    15/18

    el material de la escultura y que tampoco se fijen sobre aqul.

    Cuando se trate de esculturas de madera y sta se encuentre en mal estado, el uso

    de consolidantes deber subordinarse a la conservacin del aspecto originario de la materia

    lgnea.

    Si la madera est infectada por carcoma, termitas, etc., habr que someterla a la

    accin de gases adecuados, pero se ha de evitar en lo posible la impregnacin con lquidos

    que, aun en ausencia de policroma, podran alterar el aspecto de la madera.

    En el caso de esculturas fragmentadas, para el uso de posibles pernos, sujeciones,

    etc., deber elegirse un metal inoxidable. Para los objetos de bronce se recomienda un

    especial cuidado en cuanto a la conservacin de la ptina noble (atacamitas, malaquitas,

    etc.), siempre que por debajo de sta no existan signos de corrosin activa.

    Adver tencia para la insta lacin de obras de ar t e restauradas.

    Como lnea de conducta general, una obra de arte restaurada no se deber poner de

    nuevo en su lugar originario si la restauracin estuvo motivada por la situacin trmica ehigromtrica del lugar en conjunto o del muro en particular, o si el lugar o el muro no fueran

    a ser tratados inmediatamente (saneados, climatizados, etc.), de forma que garanticen la

    conservacin y salvaguardia de la obra de arte.

    ANEXO D

    I nstru cciones para la t ut e la de los " Centr os Histr icos"

    Con el fin de identificar el concepto de "Centros Histricos", debern tomarse en

    consideracin no slo los antiguos centros urbanos tradicionalmente entendidos como tales,

    sino, ms en general, todos los asentamientos humanos cuyas estructuras, unitarias o

    fragmentarias -incluso si se han transformado parcialmente a lo largo del tiempo- se hayan

    constituido en el pasado o en lo sucesivo, y tengan particular valor de testimonio histrico,

    arquitectnico o urbanstico.

    Su naturaleza histrica se refiere al inters que dichos asentamientos presentan

    como testimonios de civilizaciones del pasado y como documentos de cultura urbana, incluso

    independientemente de su valor intrnseco artstico o formal, o de su peculiar aspecto como

    ambiente, que pueden enriquecer y resaltar posteriormente su valor, en cuanto que no slo

    la arquitectura, sino tambin la estructura urbanstica poseen por s mismas un significado y

    un valor.Las intervenciones de restauracin en los centros histricos tienen la finalidad de

    garantizar -con medios e instrumentos ordinarios y extraordinarios- la permanencia en el

    tiempo de los valores que caracterizan estos conjuntos. La restauracin no se limita, por

    tanto, a operaciones destinadas a conservar nicamente los caracteres formales de

    arquitecturas o ambientes aislados, sino que se extiende a la conservacin sustancial de las

    caractersticas del conjunto del organismo urbanstico completo y de todos los elementos

    que concurren para definir dichas caractersticas.

    Para que el conjunto urbanstico en cuestin pueda ser adecuadamente

  • 8/7/2019 VVAA. Carta Del Restauro. 1972

    16/18

    salvaguardado, tanto en su continuidad en el tiempo como en el desarrollo de una vida

    ciudadana y moderna dentro de l, es necesario sobre todo que los centros histricos sean

    reorganizados en su ms amplio contexto urbano y territorial y en sus relaciones y

    conexiones con futuros desarrollos; todo ello, adems, con el fin de coordinar las

    actuaciones urbansticas de forma que se consiga la salvaguardia y la recuperacin del

    centro histrico a partir del exterior de la ciudad, a travs de una planificacin adecuada de

    las intervenciones territoriales. A travs de tales intervenciones (efectuadas mediante

    instrumentos urbansticos), se podrn configurar as las funciones que no son compatibles

    con su recuperacin en trminos de saneamiento y conservacin.

    La coordinacin debe considerarse tambin con relacin a la exigencia de proteccin

    del contexto ambiental ms general del territorio, sobre todo cuando ste haya asumido

    valores de especial significado estrechamente unidos a las estructuras histricas tal como

    han llegado hasta nosotros (como por ejemplo, el cerco de colinas en torno a Florencia, la

    laguna vneta, las centuriaciones romanas del Valle del Po, la zona de cabaas cnicas de

    Apulia, etc.)Por lo que respecta a los elementos individuales, a travs de los cuales se efecta la

    salvaguardia del conjunto, hay que considerar tanto los elementos edilicios como los dems

    elementos que constituyen los espacios exteriores (calles, plazas, etc.), e interiores (patios,

    jardines, espacios libres, etc.), y otras estructuras significativas (murallas, puertas,

    fortalezas, etc.), as como posibles elementos naturales que acompaan el conjunto

    caracterizndolo de forma ms o menos acentuada (entornos naturales, cursos fluviales,

    singularidades geomorfolgicas, etc.).

    Los elementos edilicios que forman parte del conjunto han de conservarse, no slo

    en sus aspectos formales, que determinan la expresin arquitectnica o ambiental de aqul,

    sino tambin en sus caracteres tipolgicos en cuanto expresin de funciones que asimismo

    han caracterizado a lo largo del tiempo la utilizacin de los propios elementos.

    Cualquier intervencin de restauracin debe ir precedida, con objeto de investigar

    todos los valores urbansticos, arquitectnicos, ambientales, tipolgicos, constructivos, etc.,

    de una atenta lectura histrico-crtica, cuyos resultados no se encaminan tanto a determinar

    una diferenciacin operativa -puesto que en todo el conjunto definido como centro histrico

    se deber actuar con criterios homogneos-, cuanto principalmente a la individualizacin de

    los diferentes grados de intervencin a nivel urbanstico y a nivel edificio, para definir el

    tratamiento necesario de "saneamiento de conservacin".

    A este propsito hay que precisar que por "saneamiento de conservacin" se debeentender, sobre todo, el mantenimiento de las diferentes estructuras edilicias en general

    (mantenimiento del trazado, conservacin de la red viaria, del permetro de las manzanas,

    etc.); y, adems, el mantenimiento de los caracteres generales del ambiente, que comporta

    la conservacin integral de los perfiles monumentales y ambientales ms significativos, y la

    adaptacin de los dems elementos o conjuntos edilicios individuales a las exigencias de la

    vida moderna, considerando slo excepcionalmente las sustituciones, incluso parciales, de

    los propios elementos y slo en la medida en que ello sea compatible con la conservacin del

    carcter general de las estructuras del centro histrico.

  • 8/7/2019 VVAA. Carta Del Restauro. 1972

    17/18

    Los principales tipos de intervencin a nivel urbanstico son:

    a).- Reestructuracin urbanstica: est dirigida a verificar, y eventualmente a

    corregir, all donde sea necesario, las relaciones con la estructura territorial o urbana con la

    que forma unidad. Es de particular importancia el anlisis del papel territorial y funcional

    que el centro histrico ha desempeado a lo largo del tiempo y en el presente. En este

    sentido, ha de prestarse especial atencin al anlisis y a la reestructuracin de las relaciones

    existentes entre centro histrico y desarrollos urbansticos y edilicios contemporneos, sobre

    todo desde el punto de vista funcional, con particular atencin a la compatibilidad de

    funciones direccionales.

    La intervencin de reestructuracin urbanstica deber tender a liberar los centros

    histricos de aquellas finalidades funcionales, tecnolgicas o, en general, de uso, que

    produzcan sobre ellos un efecto catico y degradante.

    b).- Reordenacin viaria; se refiere al anlisis y revisin de las conexiones viarias y

    de los flujos de trfico que atacan su estructura, con el fin primordial de reducir sus aspectos

    patolgicos y reconducir el uso del centro histrico a funciones compatibles con lasestructuras de otros tiempos.

    Hay que considerar la posibilidad de integracin de los equipamientos y servicios

    pblicos estrechamente conectados con las exigencias vitales del centro.

    c).- Revisin del mobiliario urbano; esto afecta a las calles, plazas y a todos los

    espacios libres existentes (patios espacios interiores, jardines, etc.), con el fin de una

    conexin homognea entre edificios y espacios exteriores.

    Los principales tipos de intervencin a nivel edificio son:

    a).- Saneamiento esttico e higinico de los edificios, que tiende al mantenimiento

    de su estructura y a un uso equilibrado de la misma; esta intervencin se realiza segn las

    tcnicas, las modalidades y las advertencias a que se refieren las precedentes instrucciones

    para la realizacin de restauraciones arquitectnicas (Anexo B). En este tipo de

    intervenciones es de particular importancia el respeto a las cualidades tipolgicas,

    constructivas y funcionales del edificio, evitando aquellas transformaciones que alteren sus

    caracteres.

    b).- Renovacin funcionalde los rganos internos, que se ha de permitir solamente

    all donde resulte indispensable para los fines de mantenimiento en uso del edificio. En este

    tipo de intervencin es de fundamental importancia el respeto a las cualidades tipolgicas y

    constructivas de los edificios, prohibiendo todas aquellas intervenciones que alteren sus

    caracteres, as como los vaciamientos de la estructura edilicia o la introduccin de funcionesque deformen excesivamente el equilibrio tipolgico-constructivo del organismo.

    Instrumentos operativos de los tipos de intervencin antes enumerados son

    esencialmente:

    -planes generales de ordenacin, que reestructuren las relaciones entre centro

    histrico y territorio y entre centro histrico y ciudad en su conjunto;

    -planes parciales relativos a la reestructuracin del centro histrico en sus elementos

    ms significativos;

    -planes de ejecucin sectorial, referidos a una manzana o a un conjunto de

  • 8/7/2019 VVAA. Carta Del Restauro. 1972

    18/18

    elementos reagrupables de forma orgnica8.

    8La "Carta del Restauro 1972" fue redactada por Cesare Brandi con la colaboracin de Guglielmo De Angelis

    DOssat.