Los Antonelli - Arquitectos de Gatteo - Giorgio Antei

download Los Antonelli - Arquitectos de Gatteo - Giorgio Antei

If you can't read please download the document

description

Los Antonelli - Arquitectos de Gatteo - Giorgio Antei

Transcript of Los Antonelli - Arquitectos de Gatteo - Giorgio Antei

  • Con la colaboracin de

    Regin Emilia RomaaConsejera de Cultura

    Departamento de Forl-CesenaConsejera de Cultura

    Alcalda de Gatteo

    Consulta para los emiliano-romanolos en el mundo

  • ARCI Solidariet Cesenate

    Instituto Italiano de Cultura de Caracas

    UNESCO

    Instituto Italo-Latino-Americano , I.I.L.A

  • Historia y actividad1. Introduccin2. Premisa3. Juan Bautista Antonelli4. Bautista Antonelli5. Cristbal de Roda Antonelli6. Juan Bautista Antonelli El Mozo7. Los Garavelli Antonelli8. Tcnica y arte de los Antonelli

    1. Introduccin

    Las actividades de los Antonelli en Espaa, frica y Amrica son poco conocidas entre loshistoriadores espaoles y casi desconocidas en Italia. La bibliografa es sumamente escasa y eltema poco investigado si se toma en cuenta la gran cantidad de tcnicos, ingenieros y arquitectosque trabajaron para la Corona espaola y la cantidad de obras notables que dejaron. Lasinformaciones ms fidedignas sobre las obras realizadas por los Antonelli al servicio de Espaa, a lolargo de noventa aos (1559-1649), siguen siendo las publicadas en los cuatro tomos de lasNoticias de los Arquitectos y Arquitectura de Espaa desde su restauracin, compiladas porEugenio Llaguno y Amirola y luego ampliadas con el aporte de nuevos datos y adiciones por JuanAgustin Cen-Bermudez (1).

    Cabe destacar que esta obra fue publicada en Madrid el ao de 1829 y an mantiene vigencia porlas informaciones que contiene. La otra obra fundamental, dedicada al Antonelli que fortific elCaribe, es el discurso de incorporacin a la Real Academia de la Historia de Diego AnguloIiguez (2) titulada Bautista Antonelli, las fortificaciones americanas del siglo XVI y publicada enMadrid el ao de 1942. Por ltimo, hay que mencionar el libro "Lopera del genio italiano allestero.Gli architetti militari" de Leone Andrea Maggiorotti. Es la nica publicacin en italiano que intentareunir las actividades de los arquitectos militares italianos al servicio de Espaa y Portugal;lamentablemente la obra, publicada en 1939 durante el fascismo en Roma, tiene muchos datos queno se corresponden a la verdad. Como se puede apreciar, es realmente escasa la atencindespertada por los que fueron los grandes arquitectos militares del Caribe durante los reinados deFelipe II, Felipe III y Felipe IV.

    En el caso de los Antonelli, la insistente repeticin de los mismos nombres y apellidos a lo largo deun siglo y durante tres generaciones, ha facilitado la confusin entre un personaje y otro, hadificultado aclarar las relaciones de parentesco familiar y ha contribuido a divulgar fechasincorrectas de sus actuaciones. Por ejemplo, Leone Andrea Maggiorotti da por segura la presenciade Juan Bautista Antonelli en el Caribe desde el ao de 1529 cuando, por el contrario, el primerAntonelli en pisar Amrica fue Bautista (hermano menor de Juan Bautista) quien, el 25 de marzode 1582, lleg a Ro de Janeiro en ocasin del fracasado intento de llegar al estrecho de Magallanespara construir dos fuertes proyectados por Tiburcio Spannocchi. Otro ejemplo: muchos de loshistoriadores que han tratado sobre los trazados regulares y ortogonales de las ciudadeshispanoamericanas, atribuyen a Juan Bautista Antonelli la paternidad del plano urbano en damerode la ciudad de Santiago de los Caballeros de Guatemala, fundada en 1543 en el valle del Panchoyy hoy conocida como Antigua. Naturalmente hay quienes no comparten tal atribucin; entre ellosest Diego Angulo Iguez quien, por haber estudiado a fondo la actuacin de Bautista Antonelli en

  • el Caribe, ni siquiera nombra el apellido del ingeniero italiano en su Historia del ArteHispanoamericano (4), cuando estudia la arquitectura de Guatemala.

    Sidney Markman (5), el acucioso historiador del patrimonio monumental guatemalteco, expresserias dudas acerca de ese hecho y prefiri sealar que: no actual evidence for this conclusion isavailable. De la misma opinin es tambin la historiadora guatemalteca Cristina Z. de Lujn.(6). En cambio, otros historiadores, como Erwin Walter Palm (7), Pal Kelemen (8), GabrielGuarda (9), Jorge Hardoy (10), Verle L. Annis (11)y otros, dan por segura la autora deltrazado a Juan Bautista Antonelli a pesar de no contar con el menor apoyo documental. Comoveremos ms adelante, Juan Bautista Antonelli el mayor (1527-1588) nunca viaj a Amrica;lleg a Espaa en 1559 y en ese pas muri en el ao de 1588. Su hermano menor, Bautista, fue elingeniero militar que vincul el apellido a las fortificaciones del Caribe hasta el ao de su muerteacaecida en Madrid el ao de 1616. Continuaron las obras, su hijo Juan Bautista Antonelli (1585-1649) y su sobrino Cristbal de Roda (1560-1631). Ambos murieron en Cartagena de Indias. Nodeja de extraar, sin embargo, que hasta hoy en da y en la propia Espaa, se sigan suministrandodatos equivocados sobre las relaciones de parentesco de los Antonelli. En un libro reciente tituladoFortificacin y ciudad en los reinos de Felipe II (1998) de la historiadora AliciaCmara, (12) se dice: Ya nos hemos referido a la saga de los Antonelli, con Juan Bautista y suhermano Bautista como cabezas, y el hijo del segundo, Cristbal, despus (pag. 128). Error! El hijodel segundo se llamaba Juan Bautista. En otro prrafo, relacionado con la remuneracin salarial, seapunta: Lo que ganaba ese ao Cristbal Antonelli, sobrino del famoso Juan Bautista, que con diezaos de servicio se iba a hacer cargo de las obras de su padre, Bautista, mientras ste iba alestrecho de Magallanes. Cuando Bautista fue destinado en 1581 a ocuparse de la fbrica de losfuertes en el estrecho de Magallanes lo hizo con un sueldo de mil ducados al ao, el mismo sueldoque cuando fue a las Indias en 1586 (pag. 125).

    Es preciso aclarar lo siguiente: primero, el hijo de Bautista no poda hacerse cargo de las obras desu padre en 1581 porque naci en 1585. Segundo, Cristbal no era hijo de Bautista aunque ssobrino de Juan Bautista y de Bautista porque era hijo de una hermana de ambos de nombreCaterina, casada con Jacome Garavelli. Cristbal, adems, tena un hermano ms joven, Francisco,y los dos eran Garavelli Antonelli. El nico hijo de Bautista se llamaba tambin Juan Bautista(1585-1649) y, por lo tanto, era primo hermano de Cristbal y Francisco Garavelli Antonelli y deCristbal de Roda Antonelli. Para facilitar la confusin, Cristbal Garavelli Antonelli tambin tuvoun hijo, nacido en 1580, a quien llam Juan Bautista.

    Tambin extraa que en la bibliografa utilizada por la Dra. Alicia Cmara no se cite la fundamentalobra de Llaguno y Amirola del ao de 1829. De haberla consultado, se habra enterado que en eltomo III, pag. 45, se precisa lo siguiente: Cristbal Garavelli Antonelli (era ms conocido enEspaa por el segundo apellido que por el primero, sin duda porque aqu no tena otro padre que asu to Antonelli. La observacin es correcta a medias porque el hecho de anteponer el segundoapellido Antonelli, al primero, significaba identificarse como miembro de una familia que gozaba degran prestigio. Cristbal Garavelli Antonelli nunca viaj a Amrica; se desempe como ingenieromilitar y hidrulico y atendi las obras de varias fortificaciones levantinas. Su hijo Juan Bautistanaci en Valencia y tambin sigui la carrera que distingui a toda la familia.

    A fin de dejar en claro los distintos nexos de la familia Antonelli con los Garavelli y los Roda, seanexa a continuacin el rbol genealgico. Ms importante an es el cuadro que permite ubicaren el tiempo y en el espacio la presencia de los Antonelli y parientes en sus movimientos entreItalia, Espaa y Amrica. El cuadro tiene seis columnas y cada una de ellas corresponde a unpersonaje. A saber, la N 1 a Juan Bautista Antonelli, la N 2 a Bautista Antonelli, la N 3 a

  • Cristbal de Roda Antonelli, la N 4 a Juan Bautista Antonelli (el mozo), la N 5 a CristbalGaravelli Antonelli y la N 6 a Francisco Garavelli Antonelli.

    En cada columna hay, en sentido vertical, una secuencia de rectngulos que corresponden, cadauno de ellos, a una dcada. El perodo temporal comienza con el ao de 1520 y termina en el 1650.

    El color verde corresponde a la permanencia del personaje en Italia, el color naranja correspondeal perodo transcurrido en Espaa y el color violeta al tiempo de servicio en las fortificaciones deAmrica (rea del Caribe). As vemos, por ejemplo, que 5 de los 6 personajes nacieron en Italia yslo el hijo de Bautista (nmero 4), en Espaa. Cuatro de los seis murieron en Espaa y dos enAmrica. Dos de los seis nunca viajaron a Amrica.

    Adems se indican las fechas de nacimiento, de todos los viajes entre Espaa y Amrica y el ao demuerte de cada quien. Es posible observar que Cristbal de Roda Antonelli, el tcnico que dedicsu vida a Cartagena de Indias, nunca realiz un viaje a Espaa en sus cuarenta aos de vidaamericana y que Francisco Garavelli Antonelli slo estuvo en el Caribe (La Habana) un tiempomuy corto.

    Tambin se evidencia que desde la llegada a Espaa de Juan Bautista Antonelli el mayor en 1559hasta la muerte de su sobrino en 1649 en Cartagena de Indias, la familia estuvo por noventa aosal servicio de la Corona espaola.

    rbol genealgico

  • Los Antonelli son originarios del pueblo de Gatteo, ubicado en el Departamento de Forl-Cesena,

  • Regin Emilia-Romagna, prximo a las ciudades de Rimini y Cesena y a la costa del mar Adritico.En los libros de las Noticias de Llaguno y Amirola del ao 1829, se cita como lugar de nacimientoal pueblo de Gaeteo en la provincia de Romania. Este dato hizo suponer a Diego Angulo Iguezque los Antonelli eran de origen rumano y, en efecto, as lo seal en su trabajo acadmico. El datoequivocado debi crear confusin y por eso a nadie se le ocurri averiguar en qu parte deRumania se encontraba el pueblo de Gaeteo. Nadie lo encontr porque Gatteo est en Italia.

    Es muy poco lo que se conoce del perodo italiano de los Antonelli. El que ms tiempo permanecien Italia fue el mayor, Juan Bautista, puesto que tena aproximadamente treinta aos cuando salipara Espaa. En 1554, a la edad de 27 aos, Juan Bautista estuvo al lado de Vespasiano GonzagaColonna y de Carlos V en la toma de la ciudad de Siena. Luego, en Espaa, estuvo nuevamente conVespasiano Gonzaga por diez aos ocupado en la construccin de varias fortificaciones. El hermanomenor, Bautista, tena poco ms de veinte aos cuando emprendi viaje a la pennsula ibrica araz de haber sido requerido por su hermano.

    Aunque Gatteo fue el pueblo que los vio nacer, fue durante los aos al servicio de la Coronaespaola que los Antonelli pudieron destacarse en el desempeo de la profesin de ingenieroshidrulicos y de arquitectos militares. De los seis miembros de la familia que aqu ocupan nuestraatencin, seguramente fue Bautista Antonelli el que realiz las obras ms notables y el quedemostr un gran talento y seguridad en sus planteamientos tcnicos.

    En el ao de 1586, cuando Bautista Antonelli lleg por primera vez al rea del Caribe con elencargo real de examinar las costas y puntos de Amrica donde convenga levantar fuertes ycastillos, la nueva tipologa de las fortificaciones abaluartadas ya tena un siglo de haberseimpuesto. La evolucin de la artillera oblig a una urgente bsqueda de ms eficientes soluciones afin de adecuar las formas defensivas a las nuevas tcnicas ofensivas. La ineficacia de lasfortificaciones anteriores sometidas a los efectos de la plvora, pudo comprobarse durante laguerra de Carlos VIII de Francia contra el reino de Npoles (1494-95) cuando, por primera vez, seusaron balas de hierro. Coincide este hecho con la construccin del fuerte de Civita Castellana(1494) por Antonio da Sangallo y con los planteamientos de la arquitectura militar florentinamedicea que preludian el baluarte como sustituto de la torre. Todo comenz con Francesco deGiorgio Martini y con los incipientes ejemplos de Baccio Pontelli y El Francione hasta que Giulianoy Antonio da Sangallo maduraron y perfeccionaron la solucin abaluartada para convertirla en elsmbolo formal de la arquitectura militar hasta el comienzo del siglo XIX. Es significativo el hechoque ya en 1488 Lorenzo el Magnfico encargara a Giuliano el conjunto urbano fortificado de PoggioImperiale, seguramente la empresa urbanstica ms atrevida y avanzada del siglo XV. La muerteprematura del ms ilustre de los Medici (1492) paraliz la obra, mas no la genialidad de losSangallo y de las obras por ellos realizadas que, sin duda, los acreditan como los innovadores de laarquitectura militar en Italia a finales del Quattrocento y comienzos del Cinquecento. El recintoabaluartado de Firenzuola (1495-99), el fuerte de Sansepolcro (1500), el de Arezzo (1502), dePisa, de Liorna y el primer fuerte abaluartado del Cinquecento, que Antonio construy en Nettuno(1501) para el Papa Alejandro VI, son slo algunas de las obras que dictaron normas orientadoraspara las fortificaciones de los siglos venideros. El castillo de Nettuno , por ejemplo, puedeconsiderarse la primera fortaleza que correctamente resolvi las posibilidades defensivas delsistema abaluartado. Su planta cuadrada con un baluarte en cada uno de los ngulos establece unafigura regular que en Amrica se repiti a lo largo de tres siglos. En Venezuela, por ejemplo, laencontramos en el castillo de San Carlos Borromeo de Pampatar en la isla de Margarita (1662), enel de Santa Mara de la Cabeza de Cuman (1669) , en el San Carlos de la Barra del Lago deMaracaibo (1679) y en el San Carlos de La Guaira, levantado por el conde Roncali en 1769, esdecir, en las dcadas finales del siglo XVIII.

  • Con relacin a los Antonelli, es bueno sealar de una vez, que en ninguna de las tantasfortificaciones hechas o asesoradas por ellos y sus parientes, aparece la forma regular simtrica ymenos an la planta cuadrada con baluartes en cada uno de los ngulos. Como tendremosoportunidad de ver ms adelante, los Antonelli manifestaron siempre una predisposicin a la trazairregular porque eso les permiti una mayor libertad en adaptar las fortalezas a las escabrosidadesdel terreno. Lo de la traza irregular es una actitud conceptual tpicamente italiana que ya semanifest en la traza de Poggio Imperiale y otras obras de finales del siglo XV.

    Los Antonelli, con Vespasiano Gonzaga Colonna siguieron esos mismos criterios en las costaslevantinas de Espaa; en frica los aplicaron en el fuerte de Mazalquivir , diseado por JuanBautista Antonelli en 1574, y luego en Amrica que es donde ms hicieron uso de las trazasirregulares.

    En el siglo XVI, Espaa fue la nacin que se afirm en Europa y el imperio que se expandi en elmundo. Con su unificacin lograda a finales del siglo XV, cuando Coln descubri Amrica y laGranada morisca se rindi a los reyes catlicos se sentaron las bases de una rpida expansin confronteras siempre ms alejadas de la pennsula ibrica. Con Carlos V y Felipe II los lmitesterritoriales del reino se extendieron desde la frontera italiana que controlaba y frenaba el empujeturco en el este balcnico y, por el lado opuesto, cruzaba el ocano Atlntico, incorporaba elcontinente americano y llegaba hasta las Filipinas.

    Espaa necesitaba de arquitectos y ingenieros militares expertos en fortificaciones para levantarsus plazas defensivas y como las experiencias ms adelantadas para ese momento eran lasitalianas, fueron muchos los tcnicos italianos que formaron esa enorme legin de constructoresque sembraron de fortificaciones las posesiones espaolas de Europa, frica y Amrica. En 1559,con la paz de Cateau-Cambresis, Espaa obtuvo la total hegemona sobre Italia. Hegemona que,de manera explcita o implcita, ejerci en todos los principados italianos, inclusive en los que seproclamaban independientes, como el mediceo que en 1570 fue elevado al rango de granducato.Npoles era la capital del virreinato y con figuras como Alfonso II de Aragn (1485-95) y Pedro deToledo (1532-53) alcanz un nivel de centro intelectual que compiti con Roma y Florencia.Artistas y arquitectos italianos iban a Espaa y los espaoles venan a Italia para establecer unintercambio que nunca funcion en paridad de condiciones.

    Como observ Benedetto Croce (13): Los italianos iban a Espaa como maestros; los espaolesvenan a Italia como discpulos. Los primeros aportaron un arte propio; los segundos vinieron aponer su ingenio a1 servicio de un arte extranjero. Es el caso, para citar un ejemplo, del arquitectomilitar de Carlos V, Luis Escriv, quien lleg a Italia muy joven y en ella se form. Su castillo en laciudad de Aquila, comenzado en 1534, es la primera fortificacin abaluartada concebida por unespaol y levantada no en Espaa sino en Italia que era la frontera este del imperio. De la mismamanera, el castillo de La Fuerza en la entrada de la baha de La Habana, en Cuba, viene a ser laprimera fortaleza abaluartada en la frontera oeste y, por lo tanto, la primera de esa tipologa quese construy en Amrica. Ambas tienen algo en comn por tener la planta cuadrada y baluartes enlos cuatro ngulos. Muy superior la de Escriv por el impacto volumtrico, el gran patio central ysu integracin en el contexto urbano. La Fuerza, de La Habana, es mucho ms pequea y suemplazamiento no result muy acertado por encontrarse muy adentro de la baha y, por eso,dejando indefensa la entrada de la misma.

    En realidad, la Espaa peninsular no necesitaba tantas fortificaciones; las fronteras estaban muyalejadas y los pocos puntos vulnerables podan identificarse con los puertos de la costa levantinacomo Cartagena, Alicante, Pescola, Cdiz, Gibraltar, las Baleares y los puertos del norte de

  • frica. En todos estos lugares intervinieron varios tcnicos italianos, entre los cuales no faltaronnuestros Antonelli.

    En Espaa, la primera fortificacin abaluartada levantada en territorio peninsular es de fechabastante tarda. Es la de San Leonardo, en la provincia de Soria, construida por el milansBartolom Carln (Bartolomeo Carloni) para los Manrique de Lara. La construccin se realizentre 1564 y 1570 y su importancia ha sido destacada por el historiador Juan ManuelZapatero (14).

    Dejando a un lado el castillo de La Fuerza, de La Habana, primera fortificacin regular abaluartadade Amrica, la proliferacin de fortificaciones irregulares con baluartes comienza con BautistaAntonelli, a quien el monarca encarg de poner en marcha el primer Plano de defensa de lasIndias Occidentales. El teatro principal de esas operaciones fue el Caribe que, hasta el ao de1623, estuvo bajo el total control y dominio de Espaa. En ese ao los ingleses ocuparon la pequeaisla de St. Christopher y dieron comienzo a la internacionalizacin de ese Mediterrneo americano.En 1625 fue el turno de Barbados y, ms tarde, de otras islas de las pequeas Antillas hasta que en1655 Inglaterra le quit a Espaa la isla de Jamaica. Franceses y holandeses no se quedaron atrsy para la misma poca alteraron el cuadro de las posesiones europeas en esa parte de Amrica. Esinteresante observar los mapas del Caribe hispnico y no hispnico para darse cuenta de loscambios ocurridos (15).

    El Caribe fue el teatro de operaciones de Bautista Antonelli, de su hijo Juan Bautista y de CristbalRoda, sobrino del primero y primo del segundo. La presencia muy corta de Francisco GaravelliAntonelli prcticamente no dej ninguna huella.

    Para ofrecer una idea clara de cul fue el rea de actividades de los tres arquitectos militaresmencionados en el prrafo anterior, he elaborado un mapa que permite apreciar todas las rutasque tuvieron que emprender los Antonelli a fin de conocer las bahas, los terrenos apropiados paralos emplazamientos y inspeccionar la construccin en los mismos. Las ciudades de La Habana en laisla de Cuba y la de Cartagena de Indias en la actual Colombia, fueron los dos centros principalesen lo poltico, militar y comercial.

    El Caribe fue el rea de accin de los Antonelli desde 1586 hasta 1649. Sesenta y tres aos en loscuales tres generaciones de esa familia dedicaron su vida y su actividad profesional a la seguridadde las posesiones espaolas.

    2. Premisa

    Las actividades de los ingenieros y arquitectos militares italianos al servicio de la Corona espaolaen los siglos XVI y XVII, constituyen un rea de investigacin que no ha despertado mucho intersentre los historiadores de la arquitectura. La bibliografa es bastante escasa del lado italiano, y ladel lado espaol, aunque ms copiosa, an se apoya en la obra fundamental de Llaguno y Amirola,luego revisada y aumentada por Cen Bermdez. Los cuatro tomos fueron publicados en Madriden 1829, un ao antes de la muerte de Bolvar, acaecida en Santa Marta en 1830, cuando ya sehaba alcanzado la independencia del continente suramericano.

    El presente trabajo slo se limita al estudio de los miembros de una sola familia, la de los Antonelli,que a lo largo de casi un siglo (1559-1649) realiz obras relevantes para Carlos V, Felipe II, FelipeIII y Felipe IV. En Espaa, Portugal, frica del Norte y en el Caribe americano, se dedicaron aobras de vialidad, hidrulica y, mayormente, a levantar fortalezas que an hoy imponen sus

  • volmenes en tantos paisajes y se admiran por ese aspecto de perennidad que las distinguen.

    Los Antonelli no fueron los nicos. Es justo reconocer que el nmero de quienes intervinieron enlos proyectos y construccin de las tantas obras realizadas en estas y otras geografas, es muyelevado y muy poco conocido. Nombres como los de Paleari-Frattino, Calvi, Terzi, Cairato,Ravenna, Spannocchi, Gonzaga Colonna, Roda, Setara, Ferramolino, Casale, Tadini, Sabatini,Roncali, Turriani y tantos ms, representan un listado de apellidos que pocos espaoles y anmenos italianos sospechan la cantidad de obras por ellos levantadas en Espaa y sus posesiones.Esa importancia no radica solamente en la gran cantidad de obras que dejaron, sino en el hechoque varios de ellos, en especial los del siglo XVI, sembraron en varias partes del mundo losprincipios y criterios de la arquitectura militar abaluartada surgida en Italia en las dcadas finalesdel siglo XV, en pleno esplendor del Renacimiento.

    El libro de Leone Andrea Maggiorotti (1939) sigue siendo una isla solitaria que, a pesar de unoscuantos datos incorrectos, representa el testimonio precursor, luego ampliado con otros aportes y,en especial, por las valiosas investigaciones publicadas por el Instituto Italiano Castelli. Quedatodava mucho que hacer para rescatar del olvido a tantos nombres ilustres.

    Se oye a menudo lo que explican las guas especializadas, por ejemplo en La Habana que ElMorro es el ms importante castillo que los espaoles construyeron en Amrica. En Cartagena,que se trataba de la ciudad amurallada ms antigua de Amrica y en Araya que el castillo fueconstruido para evitar que los enemigos de Espaa robaran la gran riqueza de la sal. Y as por elestilo en otros lugares. Pero nunca se escucha decir que el ms importante castillo de Amrica enLa Habana, que las murallas de Cartagena y que el castillo de Araya fueron concebidos yconstruidos por los Antonelli.

    Despus de haber conocido y estudiado las dems obras de los Antonelli en Cuba, Mxico, PuertoRico, Panam, Colombia y Venezuela y de haber localizado con seguridad su lugar de origen,consideramos un deber, dar a conocer la tenaz dedicacin de esta familia que escribi uno de loscaptulos ms importantes de la historia de la arquitectura militar hispanoamericana.

    Ni siquiera en su pueblo natal, hasta agosto de 1999, se tena la menor idea de quines eran y quhicieron exactamente los Antonelli. De hecho, fue entonces, cuando desde Venezuela GrazianoGasparini, Arquitecto y Catedrtico de Historia de la Arquitectura en la Facultad de Arquitecturade Caracas de la Universidad Central de Venezuela, adems de estimado estudioso que desde 1955se dedica al estudio de esta familia de homo faber, se puso en contacto va fax con Mario Ornelli,alcalde de Gatteo, que se tuvieron noticias acerca de ellos. El fax enviado estaba acompaado dedatos y explicaciones de quines eran tales personajes, permitiendo as descubrir, con immensaalegra, que los conciudadanos Antonelli haban destacado por sus dotes como ingenieros militares.En la respuesta, a cargo del vicealcalde y consejero de cultura, Iglis Bellavista, y del archiveromunicipal, Luciano Abbondanza, autores de la bsqueda de documentos histricos municipales, sepudieron confirmar tanto los orgenes de la familia Antonelli, como el hecho de que hasta la fechaen Gatteo apenas se conoca la figura de Battista, y lo nico que se saba era que su nombreconstaba en el Archivo Municipal, todo ello gracias a las actas del legado testamentario dondeapareca la cantidad de 625 escudos reales que l haba dejado para los pobres de su pueblo natal.

    Exista, pues, rastro de un nico Antonelli, de profesin constructor, que haba emigrado a Espaay que haba dispuesto una herencia en favor de los pobres del Municipio de Gatteo para instituirun monte frumentario dentro del castillo malatestiano; toda esta informacin se desprende de lasiguiente inscripcin: Una casa de tres habitaciones y de tres plantas usadas como almacn de

  • dicho trigo y como habitacin del almacenero y del guardin, en cuya puerta de entrada hay unalpida de mrmol escrita en letras maysculas, aunque erosionadas por las inclemencias deltiempo, Este depsito de trigo lo mand construir el capitn Gi Battista Antonelli, IngenieroMilitar de los Serensimos Reyes de Espaa Felipe II y III. De ello trataremos en la seccincorrespondiente a Bautista.

    Tras el descubrimiento, se pusieron en marcha en 2002 las primeras investigaciones para localizarmaterial documental en Espaa y para llevar a cabo los reconocimientos fotogrficos y de lasmanufacturas antonellianas, con la consiguiente presentacin tanto en el Instituto Italo-Latino-Americano de Roma como en ocasin de la Semana de la Cultura Italiana, organizada por laEmbajada de Italia en La Habana, que cont con la presencia de una delegacin oficial delAyuntamiento de Gatteo, encabezada por el vicealcalde, Iglis Bellavista. En octubre de 2003 sellev a cabo en Gatteo, gracias a la colaboracin de estudiosos de fama mundial, el congresointernacional Omaggio agli Antonelli (Homenaje a los Antonelli), del que luego se publicaron lasactas. En enero de 2006, un nuevo impulso a las celebraciones antonellianas tuvo lugar gracias a laProvincia de Forl-Cesena y a su consejero de cultura, Iglis Bellavista, quien llev a Gatteo a la RAI(Radiotelevisin italiana) para realizar y, posteriormente, transmitir en el canal RaiDue, unreportaje-entrevista titulado Partiti da Gatteo a costruir fortezze (Salieron de Gatteo paraconsturir fortalezas) donde el propio Bellavista hablaba sobre los Antonelli. En 2007 la Consejerade Cultura de la Provincia de Forl-Cesena promovi una exposicin fotogrfica de GrazianoBartolini itinerante y con un peculiar impacto visual, sobre las fortalezas, los castillos, las murallasdefensivas, presentes en los tres continentes que presenciaron la labor de los Antonelli. Laanteprima de la inauguracin tuvo lugar en Gatteo y sta se llev tambin, en noviembre de 2007,a la Xa Edicin de la Semana de la Cultura Italiana, organizada por la Embajada de Italia en LaHabana. La exposicin cont con ilustres e importantes patrocinadores: Unesco Comisinnacional italiana, Cmara de los Diputados, Senado de la Repblica Italiana, Ministerio de losBienes y Actividades Culturales, Ministerio de Asuntos Exteriores, Embajadas de Espaa y deVenezuela, Presidencia de la Junta y de la Asamblea Legislativa de la Regin Emilia-Romaa,Ayuntamiento de Gatteo y, por supuesto, Provincia de Forl-Cesena, en calidad de organizadora, yen 2008 se exhibir en Forl y en Roma en sedes e instituciones de alto relieve.

    Queda an mucho camino por recorrer en este redescubrimiento de los Antonelli y el deseo es quelos habitantes de Emilia-Romaa, de la Provincia de Forl-Cesena y los ciudadanos de Gatteoprofundicen, estimen y se enorgullezcan de cuanto hicieron los miembros de esta familia; quepuedan meditar sobre el valor de las palabras de Diego Angulo Iguez, miembro de la RealAcademia Espaola de Historia de Espaa, pronunciadas en una frase lapidaria: ANTONELLI ESUNA PERSONALIDAD CUYA IMPORTANCIA URGE SUBRAYAR PARA EL MEJORCONOCIMIENTO DE LA HISTORIA DE AMRICA.

    Urge poner de relieve su importancia y estamos seguros que se lograr gracias al amor que surgey perdura entre todos los que nacieron en la misma tierra, pequea geogrficamente pero inmensaen lazos afectivos, digna cuna de esta familia de arquitectos militares que pusieron su genial sellode autor en tres continentes.

    As lo demostr el mismo Bautista quien, aunque ausente de Gatteo durante 47 aos, es decir,desde el da que se fue a Espaa, nunca olvid su lugar de origen y cuando sinti que se acercaba elmomento de dejar este mundo, dej parte de su fortuna a los pobres de su pueblo natal. Cuntanobleza y qu profunda demostracin de afecto y amor hacia quienes nunca haba conocido y que,sin embargo, siempre sinti cerca y record como a hermanos suyos.

  • Podemos por ltimo afirmar, citando a E. Llaguno y Amirola que "La familia de los Antonellidio a Espaa excelentes arquitectos militares e hidrulicos, contando con Roda ylos Garavelli. Todos salieron de la misma estirpe, que produjo la Romaa en Italia,y al que debemos las mejores fortificaciones de la pennsula, las que tuvimos enfrica y las que an subsisten en Amrica, porque son dignos de los mayores elogiosy de los lugares que ocupan en esta historia" (1)

    3. Juan Bautista Antonelli

    Gatteo 1527 - Toledo 1588

    La navegacin fluvial en Espaa

    Descartada la posibilidad de la presencia en Amrica de un Antonelli antes de 1582, convieneprecisar que la primera noticia de un Antonelli en Espaa se remonta al ao de 1559. Se trata deJuan Bautista Antonelli que, como hemos visto, naci en Gatteo, pueblo de la regin de Romaa,ubicado entre Rimini y Cesena y prximo a la costa Adritica. Deba contar poco menos de treintaaos de edad cuando viaj a la pennsula ibrica para seguir prestando sus servicios a la Coronaespaola. Aos antes, en 1554, haba participado en la toma de la ciudad de Siena al lado deVespasiano Gonzaga Colonna y del emperador Carlos V. Juan Bautista Antonelli fue el mayor delos cinco hijos del matrimonio de Gerolamo Antonelli con Lucrecia Scuire y debi nacer en 1527. Notenemos muchas noticias de sus actividades en Italia, pero es de suponer que ya tena ciertaexperiencia en planificar defensas y fortificaciones cuando fue a Espaa porque, de inmediato, fueenviado a reconocer el puerto de Cartagena de Levante y la costa prxima a la ciudad de Valencia.En el archivo de Simanca hay relaciones sobre las fortificaciones costeras de esa regin, fechadasen 1562 y firmadas por l. Tambin en la obra de Llaguno y Amirola se seala la fecha del ao1559 como el de la llegada a Espaa de Juan Bautista Antonelli; as consta en un memorial que lmismo envi a Felipe II.

    Las actividades de Juan Bautista Antonelli al servicio de Felipe II pueden dividirse en dos perodosbien definidos y diferentes: en el primero, desde 1560 hasta 1580, se dedica a las fortificaciones ydefensas en las costas levantinas y puertos del norte africano. En el segundo, desde 1580 hasta1588, ao de su muerte, lo dedica al estudio y obras hidrulicas para la navegacin de los ros deEspaa y, en particular, de la conexin entre Toledo y Lisboa por el ro Tajo. Durante el primerperodo cont con el apoyo y amistad del virrey Vespasiano Gonzaga Colonna quien estuvo al ladode Felipe II desde 1568 hasta 1578. Vespasiano Gonzaga (1531-1591), constructor de la pequeaciudad de Sabbioneta, fue un ilustre humanista y experto militar muy vinculado a la casa realespaola. Cuando adolescente, estuvo tres aos (1545-1548) en la corte madrilea de Carlos V encalidad de acompaante del prncipe Felipe; en 1564 se encuentra nuevamente en Madrid paracelebrar sus segundas nupcias con Ana de Aragn de los duques de Segorbe. En 1568 vuelve aEspaa por un perodo de diez aos con el fin de ayudar a Felipe II en las fortificaciones deCartagena de Levante, la costa valenciana y los puertos africanos de Oran y Mazalquivir. En 1571fue nombrado virrey de Navarra y en 1575 virrey de Valencia con el ttulo de prncipe. En 1585,cuando ya se encontraba en Sabbioneta, Felipe II le otorg el Tosn de oro, mxima condecoracinde la casa real. Juan Bautista Antonelli y su hermano menor, Bautista, en Espaa desde 1569,tuvieron un maestro y crtico severo en la figura de Vespasiano Gonzaga; lo acompaaron en todaslas inspecciones y construcciones desde Valencia, Cartagena de Levante, Alicante, Pescola, hasta

  • el norte de frica en Oran y Mazalquivir. Cuando Vespasiano Gonzaga regresa definitivamente aSabbioneta, su pequea Atenas humanstica y ejemplo sublime del urbanismo renacentista, losAntonelli no descuidaron las buenas relaciones y el prestigio que haban ganado en la corte, la cualapreciaba las capacidades tcnicas de los dos hermanos. Sobra aadir que el aval de VespasianoGonzaga fue decisivo para las relaciones con Felipe II.

    En 1580 Felipe II ocupa Portugal y lo incorpora a su reino. Fue una operacin militarrelativamente rpida y sin enfrentamientos en los campos de batalla porque la accin fue ms bienuna ocupacin pacfica que una conquista peleada. Felipe II encarg a Juan Bautista Antonelli debuscar soluciones para el fcil desplazamiento de las tropas, preparar los caminos y allanar lospuntos escabrosos del terreno para agilizar el traslado de vituallas, pertrechos y armamentos. Latopografa, sin embargo, era abrupta y llena de escabrosidades; los caminos malos y con variasasperezas difciles de superar. De ah surgi la idea de la navegacin fluvial y de las convenienciasque ella representaba para el traslado de los equipos pesados. Fue en Portugal donde JuanBautista Antonelli adelant a Felipe II las posibilidades de su proyecto. La idea encontr elentusiasmo real, y el primero de abril de 1581 Antonelli recibi una real cdula que le ordenaba...reconocer y ver el ro Tajo desde la villa de Abrantes en estos nuestros reinos de Portugal, hastala dicha villa de Alcntara, para ver cmo se podra hacer navegable.... Antonelli, con renovadoentusiasmo y sin perder tiempo, fue ...en un barco pequeo de hombres plcticos de la tierra y delro... desde Abrantes hasta Alcntara para observar y registrar ...la disposicin del ro, lacantidad de agua que suele llevar, la calidad del suelo y de la madre, y de las orillas y de los malospasos y presas de molinos.... Regres a Portugal por la misma va y, con fecha 22 de marzo de1581, present al rey una detallada relacin de todo lo observado y completndola con propuestasde factibilidad y estimacin de costos. El informe de Antonelli es un estudio hidrogrfico (DOC.N. 6), territorial, tcnico y comercial de gran envergadura y dominio de la materia.

    Demasiado largo para reproducirlo a continuacin y, sin embargo, demasiado importante paraignorarlo. Se reproduce al final en la seccin de Apndice.

    Las ventajas comerciales, la comunicacin rpida, los beneficios para la real hacienda y tambin elprestigio que dicha obra significaba a nivel internacional, tuvieron en el monarca su ms entusiastapatrocinador. Con real cdula del 23 de junio de 1581, Felipe II ordena al alcalde mayor deAlcntara y a los Consejos y dems Justicias de Castilla, prestar todas las facilidades y asistenciapara proveer lo necesario a las obras relacionadas con la navegacin del Tajo y atender a JuanBautista Antonelli que ha de tener el cargo principal de todo lo tocante a ello.

    En 1584 el rey organiz un viaje de Madrid a Aranjuez con el fin de demostrar lo adelantado delproyecto. Antonelli dise y construy las dos chalanas reales con toldos y cortinajes de damasco,columnas, arcos y cmodos asientos para los invitados. El propio Antonelli asumi el rol de capitndurante la navegacin fluvial.

    El viaje de la comitiva real (DOC. N. 11), segn documento de la poca, es otro testimonio deuna forma de vida digna de ser conocida.

    Los trabajos para hacer posible la navegacin procedieron con xito y en el mes de enero de 1588se llev a cabo, sin inconveniente alguno, el primer viaje de siete barcazas que en quince das

  • cubrieron la distancia entre Toledo y Lisboa. Cristbal de Roda Antonelli, sobrino de Juan Bautistay de Bautista, fue el capitn que estren la nueva ruta. Cristbal de Roda, miembro tambin dela familia originaria de Gatteo, fue llamado a Espaa por su to Juan Bautista hacia 1578, cuandoan no haba cumplido los veinte aos. Durante el viaje de regreso de las barcazas, desde Lisboa aToledo, la muerte sorprendi con gran sentimiento del Rey, al mayor de los Antonelli, el 17 demarzo de 1588. Fue el primero en haber llegado a Espaa, en 1559, y sirvi al rey por casi treintaaos. Se desconocen las causas de su muerte tan repentina y inesperada; posiblemente se debi aalguna disfuncin cardaca, o algo parecido, puesto que lo sorprendi en plena elaboracin de otrosproyectos de navegacin fluvial. Tena alrededor de sesenta aos. Tambin es posible que en suentierro estuviesen presente otros miembros de la familia. Su hermano Bautista, de cuarenta aosaproximadamente, se encontraba en Madrid para esa fecha y acababa de llegar de su segundoviaje a Amrica y primero al Caribe. Cristbal de Roda, se encontraba en el viaje de regreso de lasbarcazas y para finales de enero de 1588, an estaba en Lisboa. Es difcil admitir su asistencia en lafecha de las exequias de su to y protector. Otro sobrino, Cristbal Garavelli Antonelli, seencontraba en Espaa ocupado en las fortificaciones de la costa levantina. Otro sobrino, Francisco,hermano de Cristbal Garavelli, tambin se hallaba en la pennsula, puesto que haba sido llamadopor Juan Bautista en 1573.

    Nuestro ingeniero militar y hidrulico se desempe primero como ingeniero en las fortificacionesy luego en los estudios y obras de navegaci6n fluvial. Juan Bautista Antonelli fue el iniciador ypromotor principal del traslado de sus familiares, hermano y sobrinos, a Espaa. Hubo unmomento en el que varios miembros de la familia trabajaron juntos en la misma obra, bien sea enlas fortificaciones del Levante que en la navegacin del ro Tajo. Frente a las tantas informacioneserrneas sobre la actuacin de los varios Antonelli, en especial las relacionadas con las actividadesamericanas, conviene precisar que Juan Bautista Antonelli (1527-1588), el mayor, nunca viaj aAmrica. Absurdas, en consecuencia, las afirmaciones que lo indican autor del trazado de AntiguaGuatemala y otras obras.

    Con la muerte de Juan Bautista Antonelli vino a faltar el impulsor principal de los proyectos denavegacin fluvial. Su sobrino Cristbal de Roda Antonelli recibi el encargo de seguir en laorganizacin de los viajes y adelantar los proyectos pendientes, sin embargo, eso dur por pocotiempo. La muerte de Felipe II, acaecida 10 aos despus de la de Antonelli, signific tambin lamuerte del proyecto. Felipe III nunca mostr el entusiasmo de su predecesor y, al faltar el apoyoreal, todo pas al olvido. Cristbal de Roda viaj a Cuba en 1591 llamado por su to Bautista que yaestaba trabajando en el proyecto del castillo del Morro en la entrada del puerto de La Habana.

    Aunque el proyecto de navegacin fluvial no prosper, a pesar de haberse estrenado con xito,queda a Juan Bautista Antonelli el mrito y honor de haber sido el padre de la navegacin fluvialen Espaa. Martn Alonso Arias, regidor perpetuo de la villa de Alcntara, le dedic elpresente soneto (16) como homenaje a su memoria.

    El ingenio ms raro y peregrinoQue en el mundo universo se ha hallado,Y un juicio tan claro y acendrado

  • Que alcanza poco menos que divinoEs uno que de Italia a Espaa vino,Que servir a Filipo ha profesado,A quien el gran Monarca ha encomendadoQue por el hondo Tajo abra camino:La obra ms insigne y excelenteQue hasta hoy se ha visto en nuestra EspaaDe quien se han mil bienes prometido.

    4. Bautista Antonelli

    Gatteo 1547 - Madrid 1616

    El arquitecto militar del Caribe

    Bautista Antonelli fue el menor de los cinco hermanos y cuando naci en 1547 en Gatteo, suhermano mayor, Juan Bautista, ya tena casi veinte aos. Bautista fue el nico de los cinco enviajar a Amrica; las tres hermanas siempre se quedaron en Italia y el hermano mayor, JuanBautista, tampoco cruz el Atlntico. Estaba demasiado entregado a los proyectos de navegacinfluvial de los ros de Espaa.

    El hecho que Bautista tuviese un hermano mayor de nombre Juan Bautista y luego un hijo con elmismo nombre, ha facilitado la confusin entre los historiadores que se dedicaron a investigar lasobras vinculadas al apellido Antonelli. A mayor abundancia, los sobrinos Garavelli Antonelli sehacan llamar slo Antonelli a fin de beneficiarse del prestigio de ese apellido.

    No tenemos noticias de sus actividades en territorio italiano, aunque es fcil entender que muypoco pudo hacer dada su corta edad, aproximadamente veinte aos, cuando su hermano mayorJuan Bautista lo llam a Espaa hacia 1568-69. Tuvo la suerte de recibir una buena formacinprofesional durante los nueve aos (1570-1578) que trabaj al lado de Vespasiano GonzagaColonna, duque de Sabbioneta, virrey de Valencia y notable en la corte de Felipe II. En ese lapsopudo escuchar, observar y aprender, en las obras que Vespasiano Gonzaga y su hermano JuanBautista estaban planificando y construyendo en la costa levantina, en Valencia, Cartagena deLevante, Pescola, Alicante y en los puntos estratgicos de Mazalquivir y Oran en la costaafricana. Cuando Vespasiano Gonzaga regres definitivamente a Sabbioneta en 1578, BautistaAntonelli tena casi treinta aos y, lo ms importante, una buena formacin terica y prctica dearquitectura militar, ingeniera y tcnicas constructivas. Vespasiano Gonzaga, considerado comoun experto en el arte militar de su momento, se haba formado en la escuela de los Sangallo,Sanmicheli, Cataneo y otros; sus conocimientos los transmiti a Bautista Antonelli quien los aplicen varias fortificaciones abaluartadas de planta irregular. Lo de la planta irregular, como ya se dijo,es una de las caractersticas de la escuela italiana y comenz a manifestarse en variasfortificaciones de finales del siglo XV. Por ejemplo, en Ostia, Civita Castellana, Verruca, Pisa,etctera.

    En 1580, cuando Felipe II incorpor Portugal a su reino, Bautista, su hermano Juan Bautista y elsobrino de ambos, Cristbal de Roda Antonelli, estaban trabajando en obras de acondicionamientodel terreno y caminos para facilitar el movimiento de las tropas y el transporte de pertrechoshacia la frontera portuguesa. Fue en Lisboa cuando Felipe II llam a Bautista Antonelli paraconfiarle una importante misin en el continente americano.

  • El joven que se present al monarca era todo un hombre de 34 aos y dueo de una buenaformacin. La misin consista en viajar hasta el estrecho de Magallanes para construir dos fuertesa cada lado del canal a fin de controlar el nico paso navegable conocido en ese entonces entre losocanos Atlntico y Pacfico. El proyecto fue elaborado por Tiburcio Spannocchi y por su hermanoJuan Bautista y contemplaba, adems, la colocacin de una cadena atravesada para impedir elpaso.

    La armada del almirante lvaro Flores de Valds con Pedro Sarmiento de Gamboa comogobernador y Bautista Antonelli como ingeniero, sali de Cdiz el 9 de diciembre de 1581 rumbo aun destino lleno de contratiempos, dificultades y fracaso final. Fue el primer viaje de un Antonellial Nuevo Mundo y la primera tierra americana por l pisada fue Brasil. En efecto, la armada lleg aRo de Janeiro el 25 de marzo de 1582. En consecuencia, cualquiera de las tantas y supuestasactuaciones de los Antonelli en Amrica anterior al ao de 1582, debe descartarse.

    Despus de permanecer nueve meses en Ro de Janeiro, la expedicin levant anclas para seguir elviaje, con tan mala suerte que el 7 de enero de 1583 el barco La Concepcin, en el que viajabaAntonelli, encall a la salida de la baha. Se perdi el barco y todos los equipos tcnicos de losconstructores que, por carecer de sus instrumentos, consideraron intil seguir el viaje. Es desuponer que Bautista Antonelli encontrara solucionar el regreso por su cuenta puesto que sunombre no vuelve a mencionarse en los informes del viaje redactados por Sarmiento. La armadanunca lleg a su destino y el proyecto fallido deja entrever, entre otras cosas, bastanteimprovisacin en la planificacin de una empresa que, sin dudas, fue muy precipitada. Hay algo derivalidad, desafo y competencia en toda esa operacin mal orquestada; como si a la hazaadescubridora del portugus Magallanes se pretendiera demostrar y destacar la gran capacidadorganizadora de la armada espaola y de su monarca que, desde hace slo un ao, lo era tambinde Portugal y sus dominios.

    Aunque Antonelli estuvo asesorando en las fortificaciones de Ro de Janeiro y localidades vecinas,no se justifica una permanencia de nueve meses en dicho puerto, en especial si consideramos quela meta final y motivo del viaje estaba mucho ms al sur. Lo cierto es que el fracaso de la misin lecost un juicio al almirante lvaro Flores de Valds y, en el mismo, salieron acusaciones acerca dela buena vida que disfrutaban los viajeros en la baha de Ro de Janeiro, de la poca gana de seguirel viaje y de la negativa del almirante de intentar el rescate de los equipos hundidos con el barcoLa Concepcin.

    De regreso a Madrid, Bautista Antonelli enfrent dos aos de amargura y decaimiento a raz de suprimera y infeliz experiencia americana. Poco sabemos de sus actividades en Madrid desde 1583hasta 1586 ao de su segundo viaje al continente americano. En 1585 naci su hijo Juan BautistaAntonelli pero casi nada sabemos de la mujer que le dio su nico heredero. Por documentostestamentarios sabemos que se llamaba Mara de Torres.

    El secretario de la corte y su protector, Juan de Ibarra, fue quien lo anim y ayud para alistarseen el viaje programado para realizar el primer proyecto defensivo del Caribe. Era el momento delos saqueos en las incipientes ciudades hispanoamericanas, de los atracos a los barcos queregresaban cargados de riquezas y de las exploraciones y observaciones que ingleses, franceses yholandeses venan adelantando con el propsito de determinar cules islas, territorios y costaspodan ocuparse con el fin de proporcionar a sus respectivas monarquas cuota de poder en esaparte del mundo. En las primeras dcadas del siglo XVII este hecho vino a ser realidad y al Caribe,totalmente hispano en el siglo XVI, devino un Caribe internacional compartido por Espaa,Inglaterra, Francia y Holanda. No se puede olvidar que los tan despreciados piratas, eran hroes

  • para los ingleses. Es el caso de Sir Francis Drake a finales del siglo XVI y de Sir Henry Morgan enel XVII. En el siglo XVIII, adems, fue en el Caribe donde se resolvieron las diferencias entre lascoronas europeas.

    El 15 de febrero de 1586, Felipe II emite la real cdula (Doc. N 15) que nombra a BautistaAntonelli como su ingeniero ...para que vaya a examinar las costas y puntos de Amrica dondeconvenga levantar fuertes y castillos.... Fue el primer plano de defensa concebido por Felipe II yentre las varias obligaciones asignadas a Antonelli, se le encomendaron las inspecciones ypropuestas de proyectos para Cartagena de Indias, Panam, Chagre, Portobelo, La Habana, SantoDomingo, Puerto Rico y La Florida. Los ltimos tres sitios no fueron visitados en este viaje iniciadoen 1586, porque Antonelli se encontraba nuevamente en Madrid en 1588 para someter a TiburcioSpannocchi y dems consejeros de la corte, sus proyectos para las fortificaciones de Cartagena, deLa Habana y presentar ideas y propuestas para Portobelo y Chagre.

    Este segundo viaje de Bautista Antonelli a Amrica y primero a la zona del Caribe, sali de Sevillaen la primera mitad de 1586 en la armada del capitn lvaro Flores de Quiones. A bordo tambinse encontraba el maestre de Campo Juan de Tejeda, nombrado gobernador de Cuba por Felipe II.Llegaron a Cartagena de Indias el 18 de julio de 1586, tres meses despus de haber sido saqueadala ciudad por Francis Drake. Sin duda, la previsin real de activar el gran proyecto de fortificar elCaribe era correcto, solamente que se puso en prctica con unos veinte aos de retardo.

    Antonelli y Tejeda procedieron de inmediato a estudiar un plano defensivo provisional peroeficiente desde el punto de vista de la estrategia militar, puesto que la destruccin de Cartagena sedebi principalmente a la falta de previsiones defensivas en los puntos que ms lo reclamaban,como la entrada principal a la baha por Boca Grande. En esta primera inspeccin a lasinstalaciones de Cartagena, Bautista Antonelli advirti que la medida defensiva ms efectiva era lade cercarla de murallas aprovechando la proteccin natural de la costa y de las lagunas internas;esa observacin se convirti en realidad con el proyecto por l elaborado en 1595.

    Por una carta dirigida al duque de Medinasidonia, fechada el 14 de diciembre de 1586, sabemosque Tejeda y Antonelli, despus de haber organizado y dejado instrucciones para las obrasprovisionales de defensa de la ciudad, salieron a inspeccionar la baha de Portobelo y la boca del roChagre en el istmo de Panam. Antonelli qued muy bien impresionado por las caractersticasnaturales de la baha protegida de Portobelo y las consider ms favorables que la de Nombre deDios que, en su opinin, tena una baha muy abierta. Consider que Portobelo reuna las mejorescondiciones para fondear a los galeones destinados al comercio con Filipinas y Per. Todas lasriquezas, especies y otros productos provenientes del Pacfico se desembarcaban en Panam paraluego ser transportados, por tierra, hasta los galeones que las llevaran a Espaa por la va delAtlntico. Haban fuertes presiones para habilitar otra va para el transborde de una costa a otra;la propuesta contemplaba utilizar la baha de Fonseca, que hoy comparten las repblicas de ElSalvador, Honduras y Nicaragua, y de all abrir un camino hasta la costa caribea de Honduras.Bautista Antonelli an no conoca la baha de Fonseca pero s tena conocimiento que el camino portierra era mucho ms largo y ms dificultoso el traslado de los bultos. De ah su primerarecomendacin a la corte para trasladar Nombre de Dios a Portobelo (Doc. N 16) yconcentrar en este sitio todo lo inherente a las actividades comerciales con el Pacfico.

    Despus de regresar a Cartagena, donde nuevamente estudiaron las distintas posibilidadesdefensivas de la baha, continuaron con su programa de inspecciones. La meta siguiente fue LaHabana donde llegaron el 12 de julio de 1587.

  • De inmediato se dedica a estudiar el terreno y las varias alternativas de aprovecharlo mediante elemplazamiento del fuerte que luego se conocer como el Morro de los Tres Reyes. En los mesesfinales de 1587 madur la idea del Frente de tierra con los dos grandes baluartes, Austria yTejeda; una solucin muy antonelliana que acusa soluciones similares en otras de susfortificaciones. A los escasos siete meses de encontrarse en La Habana, Antonelli emprende unrepentino viaje a Espaa que interrumpe y aplaza el programa inicial de inspeccionar SantoDomingo, Puerto Rico y La Florida. Debi llegar a Madrid en el mes de abril de 1588,prcticamente un mes despus de la muerte de su hermano Juan Bautista acaecida el 17 de marzodel mismo ao. No se puede aceptar como motivo del viaje la muerte del hermano. La cercana delas fechas es mera coincidencia. En todo caso, es muy posible aceptar que ese retorno sbito aEspaa debi relacionarse con algn problema de importancia, puesto que el propio Tejeda,gobernador de Cuba, lo acompa.

    Antonelli trajo muchos planos, anteproyectos, ideas y proposiciones para Cartagena, Portobelo,Chagre y La Habana que someti a la atencin de su superior Tiburcio Spannocchi y demsmiembros de la corte.

    Una escueta relacin de gastos (Doc. N18) redactada por Antonelli puede consultarse en elApndice. No se conocen planos o proyectos de fortificaciones hechos por Antonelli relacionadoscon sus primeras inspecciones de Cartagena, Portobelo, Chagre y La Habana. Fue un viaje rpido,dedicado a la observacin y apuntar datos. Los planos conocidos de Bautista Antonelli son todosposteriores al ao de 1590.

    El ao de 1588, transcurrido en Madrid, fue un ao de gran tensin poltica con los Pases Bajos,con Inglaterra y, en especial, por la prdida de la hegemona naval con la derrota de la ArmadaInvencible. Francis Drake, el pirata del Caribe en 1586, es el hroe de Inglaterra en el desastre dela armada espaola. El plano de fortificar las plazas del Caribe se impone como accin prioritariapara la Corona. El podero naval de Inglaterra se perfila como una amenaza muy seria.

    El 23 de noviembre de 1588 una real cdula encarga a Bautista Antonelli, despus de haberrevisado y aprobado sus planos, la ejecucin de las fortificaciones de Puerto Rico, Santo Domingo,Florida, La Habana, Cartagena de Indias, Santa Marta, Nombre de Dios, Portobelo, Panam y RoChagre. Adems, deba viajar a Veracruz, en Mxico, para inspeccionar la fortificacin de San Juande Ula, estudiar la ruta de un camino de Veracruz a Mxico y reconocer la baha de Fonseca a finde compararla con la de Portobelo. Una tarea realmente ciclpea para un solo hombre si se tomanen cuenta las distancias, lo abrupto de la geografa y los medios de transporte. Eso de las distanciasmerece un comentario aparte. El espaol que lleg a Amrica qued asombrado de la escala de lanueva geografa; nunca haba visto ni recorrido distancias tan grandes, ros tan anchos, forestastan inmensas ni montaas tan altas. El concepto de dimensin era totalmente diferente al de lageografa peninsular y quien no lo haba experimentado personalmente, no poda siquiera imaginarlo que significaba ir por tierra, caminando y a caballo, desde Ciudad de Mxico a la baha deFonseca. Los encopetados seores de la corte no tenan idea del tamao del Nuevo Mundo y, poreso, ordenaban con facilidad un viaje al estrecho de Magallanes como si se tratara ir de Sevilla aMadrid. Las cosas cambiaron a partir del siglo XVII cuando el conocimiento y las proporcionesentre la pennsula y Amrica comenzaron a ser ms familiares. Conociendo la actividad de BautistaAntonelli en el Caribe y los pocos aos que estuvo en dicha rea, no deja de asombrar la capacidadde atender tantas obras en tantos sitios diferentes.

    La dcada que Antonelli estuvo en el Caribe, desde 1589 hasta 1599, fue la dcada de su gloria..

  • Diego Angulo Iguez dice: ...Por la categora de las obras que se le encomendaron,y el momento en que le cupo la suerte de vivir, momento crtico en la historia de lasfortificaciones americanas, prestan a su labor relieve verdaderamente excepcional,le convierten en el gran ingeniero del siglo XVI en Indias. Antonelli es unapersonalidad cuya importancia urge subrayar para el mejor conocimiento de lahistoria de Amrica... (17).As lo elogi el ilustre historiador espaol en su discurso de incorporacin a la Real Academia de laHistoria.

    El tercer viaje de Bautista Antonelli a Amrica y, para precisar, el segundo en el rea del Caribe, seorganiz a raz de la ya mencionada real cdula de 23 de noviembre de 1588, pero los cuatrobarcos que integraban la pequea flota, slo salieron de Sanlcar de Barrameda el 18 de febrero de1589. Juan de Tejeda tambin iba a bordo para volver a su cargo de gobernador en Cuba. Sinembargo las instrucciones de la corte contemplaban una visita a Puerto Rico y Santo Domingoantes de llegar a La Habana. Se trata de las dos islas que Antonelli no pudo visitar debido al viaje aEspaa hecho a comienzos de 1588. La primera etapa de este viaje de retorno al Caribe fue SanJuan de Puerto Rico donde llegaron despus de un mes de navegacin. Por mala suerte, el barcode Tejeda y Antonelli naufrag en las costas de la isla. Eso no impidi que de inmediatocomenzaran a estudiar las fortificaciones de la baha y darse cuenta de la escasa garanta defensivaque ofreca la vieja fuerza o fortaleza de Santa Catalina con sus torres cilndricas comenzadas aconstruir en 1533, sus reducidas reas para ubicar las bateras y adems emplazada, demasiadoadentro de la baha. El carcter medieval de su fbrica y su ubicacin, no eran los ms indicadospara la defensa de la ciudad y de la isla. Bautista Antonelli y Tejeda, encargados de llevar a cabo elambicioso plano defensivo del Caribe, proponen un nuevo proyecto para el castillo de San Felipedel Morro, situado en el extremo occidental de la isleta a la entrada del puerto. Ya exista unafortificacin en ese sitio, punto defensivo obligado para controlar la entrada a la baha, era unaplataforma casi a nivel del mar que Antonelli aprovech en su proyecto. En el mes que estuvo en laisla, ...traz el castillo, una plataforma junto al puerto y algunas obrasmenores... (18).

    Fue muy corto el tiempo que Antonelli pudo dedicar al Morro de San Juan; no obstante dej planosy instrucciones precisas que fueron luego ejecutadas por Francs de Alaya y Diego Menndez. Elresultado fue positivo puesto que en la incursin de Drake en el ao de 1595, el ataque fuerechazado y el ingls no pudo saquear la ciudad. Un croquis ejecutado por Pedro de Salazar en1591, seguramente recoge las instrucciones dejadas por Antonelli. Los dos grandes baluartes haciael Frente de tierra y la forma irregular del conjunto, adaptada a la topografa existente, sonsimilares a la solucin del Morro de La Habana y otras del mismo autor. La fortaleza San Felipe delMorro de San Juan de Puerto Rico, luego modificada, ampliada y reforzada durante los dos siglossiguientes, se convirti en la clave de la defensa de la ciudad. A pesar de las tantas modificaciones yampliaciones, el sello de Bautista Antonelli se advierte an hoy en la forma libre de la planta y en elconcepto de los dos baluartes del Frente de tierra.

    El 25 de abril de 1589 Antonelli y Tejeda anclaron en el ro Ozama, puerto de la ciudad de SantoDomingo. Fue el primer contacto de Antonelli con la primera capital americana, fundada casinoventa aos antes. Santo Domingo ya haba perdido gran parte de su importancia poltica yprosperidad comercial; ya no era el centro de irradiacin del cual salan las expediciones vidas deconocer siempre ms la geografa del Caribe y del Pacfico. La conquista de Mxico y Per y lascondiciones ms favorables y seguras de la baha de La Habana, mermaron la primaca del puertode Santo Domingo en favor de los de Veracruz, Cartagena y La Habana.

  • Tres aos antes, en enero de 1586, tambin Santo Domingo haba sido saqueada por FrancisDrake. El recinto amurallado de la ciudad, adems de endeble, estaba muy alejado del centrourbano. Quien lo hizo, seguramente pens que la ciudad iba a crecer con el mismo ritmo de lasprimeras dcadas del siglo XVI. Fue una previsin a futuro que no lleg a prosperar. Antonellielabor un nuevo diseo de la muralla, acercndola a la ciudad y aadindole baluartes alternos entoda su extensin. Como advirti Palm:

    ... el plano original de Antonelli, indica en grandes rasgos el curso de lasfortificaciones por el lado norte, incluyendo la colina de Buena Vista sobrestante aSanta Brbara, curso que efectivamente siguieron en los siglos XVII y XVIII,aunque la incapacidad de los oficiales locales no supo captar ni la sugestinprecisa de la distribucin de los bastiones ni el contorno ovalado (arrancando enuna curva perfecta desde la base del mar) que Antonelli, conforme a los preceptosde la tcnica militar, procur dar a su traza..." (19)

    Tambin en Santo Domingo la permanencia de Antonelli y Tejeda fue demasiado corta; dejaronplanos y instrucciones y el 15 de mayo de 1589 salieron hacia Cuba llegando a la baha de LaHabana el da 31 del mismo mes. Tejeda tena un justificado apuro de llegar a La Habana puestoque deba reintegrarse a su puesto de gobernador dejado vacante con motivo de su viaje a Espaaa comienzos de 1588. En carta al rey, Antonelli reconfirm la importancia del sitio del Morro y dela Punta para controlar la entrada a la baha. Al igual que en la baha de San Juan de Puerto Rico,donde La Fortaleza se encontraba despus de haber franqueado la entrada; tambin en LaHabana el castillo de La Fuerza se haba construido baha adentro y prcticamente imposibilitadode impedir la entrada a los barcos enemigos.

    Si La Fortaleza de San Juan de Puerto Rico an tena reminiscencias medievales con sus dostorres cilndricas, la Fuerza de La Habana, construida entre 1558 y 1577 por Bartolom Snchez yFrancisco de Calona, acusa una planta muy rgida, sin plaza de armas ni rampas para eldesplazamiento de los caones, muestra incipiente de conceptos vinculados al sistema abaluartado,pero resueltos con una preocupacin ms formal simtrica que funcional. La planta cuadrada conbaluartes en cada ngulo y troneras acasamatadas son resabios renacentistas vinculados a lasobras italianas de los Sangallo. El castillo de la Real Fuerza de La Habana es la fortificacinabaluartada ms antigua de Amrica y puede relacionarse con la fortaleza de Aquila en Italiaconstruida por el arquitecto militar espaol Escriv entre 1534 y 1549 y con el fuerte de Barletta,tambin en Italia, obra de Evangelista Menga, arquitecto de Carlos V y contemporneo a lafortaleza de Aquila.

    La Real Fuerza cubana fue morada de gobernadores y capitanes generales, de tropas y deempleados pblicos. Tuvo varios destinos y hoy, restaurado, es monumento de la historia y de lamemoria urbana de La Habana. Emplazado en un sitio privilegiado, cerca de la Plaza de Armas yde la Catedral, cumple un rol cultural en el casco histrico de La Habana vieja.

    A los siete meses de encontrarse en La Habana, Bautista Antonelli tuvo que viajar nuevamentepara ir a reconocer las fortificaciones de San Juan de Ula en Mxico, observar la ubicacin de laciudad de Veracruz, estudiar el camino entre Veracruz y Ciudad de Mxico, evaluar elaprovechamiento de la baha de Fonseca y opinar acerca de un camino entre sta y PuertoCaballos. Embarc el 26 de diciembre de 1589 acompaado por don Francisco Valverde y donDiego Lpez de Quintanilla.

    Antes de dejar La Habana, dej instrucciones muy precisas de los trabajos que deban ejecutarse

  • durante su ausencia a sabiendas que estara alejado de la obra unos cuantos meses. En efecto,estuvo afuera cerca de siete meses, aproximadamente hasta el mes de agosto de 1590. El trabajoprincipal consisti en desbaratar el terreno rocoso para iniciar el foso entre los dos baluartes de laparte del campo y la contraescarpa. Sobre el esfuerzo que debi significar la apertura del foso delFrente de tierra volver ms adelante. Fue una empresa ciclpea puesto que, segn relatos delsiglo XVIII, tiene desde el borde de la contraescarpa setenta pies de profundidad, mucha parte enpiedra viva. Es decir, un promedio de 18 metros. Bautista Antonelli hizo el replanteo de losbaluartes y coloc las piedras maestras en su sitio definitivo. Antes de viajar dej una lpidaesculpida en la propia roquedad que mira hacia el canal de entrada, que textualmente dice:

    REINANDO EL REY FELIPE SEGUNDO

    N.S. SIENDO GOVERNADOR Y CAPITAN

    GENERAL DE LA ISLA DE CUBA EL

    MAESSE DE CAMPO JUAN DE TEXEDA

    VINO BAUTISTA ANTONELLI A FORTI

    FICAR ESTE PUERTO

    20 DE SETR DE ANNO 1589

    Tamara Blanes Martin (20), con acierto seala que esta fecha de 20 de septiembre de 1589puede considerarse como la del comienzo del castillo. Antonelli sali tranquilo para Mxico porquesaba que el trabajo para abrir el foso y, a la vez, sacar los sillares, significaba trabajo de aos.

    Bautista Antonelli y compaa llegaron al puerto de San Juan de Ula el 18 de enero de 1590. Poruna carta de Valverde al rey, fechada el 28 de febrero de 1590 en Ciudad de Mxico, sabemos queAntonelli inspeccion las escasas defensas de San Juan de Ula (Doc. N19) y comenz a vercmo poda satisfacer las exigencias del virrey Luis de Velasco que ...habiendo considerado la pocadefensa de aquel fuerte, orden a Bautista Antonelli que trazase alguna defensa con que ayudase alo hecho, que fuese poco costosa y breve....

    La fortificacin de San Juan de Ula que encontr Antonelli era un lienzo de muralla con argollaspara amarrar los barcos y, en cada extremo, una torre cbica que serva de alojamiento. Es decir,una construccin totalmente alejada de cualquier principio del arte militar y de obra defensiva.Una situacin que Bautista Antonelli, su hijo Juan Bautista Antonelli y su sobrino Cristbal de RodaAntonelli, tuvieron que enfrentar y aguantar en varias oportunidades. En carta al rey deprimero de marzo de 1590, hay un prrafo que vale la pena reproducir. Dice losiguiente: ...Convendra mucho al servicio de V.M. al beneficio de su real hacienday al provecho de estas fortificaciones que V.M. me mandase dar una provisin, quelibremente yo pudiese mandar lo que conviene a su real servicio tocante a lasdichas fortificaciones, que s que en esto sera de mucho provecho por lo que hevisto en estas partes. Y si ha costado el fuerte de La Habana, que agora de presenteest hecho, doscientos cincuenta mil ducados, lo ha causado no haber habidopersona que tuviese zelo su real servicio, y tambin los ministros de V.M. habermandado cada uno gastar su real hacienda su gusto; y si esto no esta cargo de lapersona ingeniero que asista en las dichas fortificaciones dudo yo que se acierte,porque los dichos ministros de V.M. gobernadores muchos de ellos no entienden

  • qu es fortificaciones, y piensan acertar, y muchas veces yerran. De todo esto me haparecido dar razn a V.M. como tengo obligacin. Mi zelo es acertar en el serviciode V.M., y caminar por las pisadas de mi hermano Juan Bautista Antonelli... (Doc.N20)

    El hecho de enfrentar rechazos, opiniones desfavorables, crticas y modificaciones a los proyectos,soportar personal incompetente impuesto desde arriba y otros abusos, ha sido una constanteque tanto los Antonelli como otros ingenieros tuvieron que aguantar durante el quehacer de susactividades profesionales. El que ocupaba un cargo relevante, era Dios en una sociedad donde elindio nunca logr subir al primer peldao y el mestizo al segundo. En la jerarqua poltico-administrativa colonial, el poder era sinnimo de competencia. Lo que yo digo es correcto porqueyo soy el jefe!. Fue una constante que ha tenido vigencia a lo largo de tres siglos y que an hoy noha desaparecido de Hispanoamrica.

    El proyecto de Antonelli para el fuerte de San Juan de Ula, con los dos baluartes hacia el Frentede tierra, hecho el 27 de enero de 1590 y el traslado de la ciudad de Veracruz al sitio que hoyocupa, fueron muy criticados. A pesar de ello, la ciudad se mud y el castillo, que casi dos siglosdespus aparece en los planos de Agustn Lpez de Cmara (1762), tiene una gran similitud formalcon la idea de 1590. Tambin es de fecha primero de marzo de 1590 la solicitud de BautistaAntonelli al rey para que ...sea servido enviarme mi sobrino Cristbal de Roda para mi ayudante,porque cada da se van ofreciendo ms obras, y como estn tan apartadas las unas de las otras nopuedo yo acudir ellas como quisiera y tenindole aqu acudir l a unas partes y yo a otras .... Lasolicitud fue (Doc. N20) atendida y Cristbal de Roda Antonelli comenz a desempearse en LaHabana desde 1591.

    En una detallada relacin al rey, fechada el 10 de marzo de 1590, redactada en Ciudad de Mxico,Antonelli hace un extenso anlisis de la situacin del puerto de San Juan de Ula, de la necesidadde mudar la ciudad de Veracruz al lugar denominado Ventas de Buitrn, frente a la isla de SanJuan de Ula de las ventajas del Camino Nuevo entre Veracruz y Mxico que haba comenzado eldoctor Palacios. Dicha relacin ha sido publicada por Jos Antonio Caldern Quijano en sufundamental "Fortificaciones de Nueva Espaa" (21). No faltaron crticas a los proyectos deAntonelli, en especial las esgrimidas por el capitn Pedro Ochoa de Leguizamn. Segn PedroOchoa la construccin de obras defensivas era urgente y segn Antonelli, en cambio, necesitabande unos diez aos para realizarlas. Dada por terminada su visita en Mxico, Bautista Antonelli y sucomitiva emprendieron viaje, por tierra, hasta la baha de Fonseca donde llegaron el 14 de junio de1590. Despus de analizar las caractersticas de la gran baha y de lo largo y accidentado quehubiera resultado un camino hasta Puerto Caballos, Bautista Antonelli desaprob de manera muydura y enftica la proposicin del capitn Pedro Ochoa de trasladar a Puerto Caballos todas lasactividades comerciales con Filipinas y Per y entre el Pacfico y Atlntico. El desacuerdo lleghasta los insultos y las amenazas lo cual motiv una comunicacin inmediata de Antonelli a Juan deHerrera, secretario de Indias, en la que ratific que el comercio con el Pacfico deba de continuarsepor la va Panam-Portobelo. La corte as lo confirm y atendi todas las razones expuestas por elingeniero.

    En septiembre de 1590 Antonelli aparece nuevamente en La Habana despus de una ausencia dems de siete meses y en esa ciudad se qued hasta el 8 de octubre de 1594 cuando dejdefinitivamente a la isla para trasladarse a Tierra Firme para atender al traslado de Nombre deDios a Portobelo, a la fortificacin del ro Chagre, controlar la traza del camino desde Panam hastael Atlntico y inspeccionar las obras defensivas de Cartagena.

  • En los cuatro aos que Bautista Antonelli estuvo en La Habana, su ocupacin principal la demandel castillo del Morro. No faltaron otras actividades, una de ellas fue la construccin del fuerte deSan Salvador de la Punta, que, junto a la trada de agua potable del ro La Chorrera a la ciudad yasesoramientos varios, incluyendo los necesarios para las obras de la baha de Santiago, no ledejaron mucho tiempo para divagar.

    A mi entender, la obra cumbre de Bautista Antonelli es el Morro de los Tres Reyes de La Habana.Es cierto que en los proyectos de Puerto Rico, Santo Domingo, Mxico, ro Chagre, Portobelo,Panam, Cartagena y otros sitios no tuvo la posibilidad de disponer del tiempo que, en cambio, lededic al Morro. Eso no va en desmedro de las otras obras porque fue la calidad del diseo ycompetencia demostrada en las dems soluciones, lo que imprimi el sello de su personalidadarquitectnica. En el Morro de San Juan de Puerto Rico, en San Juan de Ula y en Cartagena, lasdecisiones fueron inmediatas y seguras. La facilidad de adaptar la obra a cualquier conformacintopogrfica, otorgan a sus fortificaciones un gran movimiento y una armoniosa irregularidad.Prcticamente todas las fortificaciones de Bautista Antonelli han pasado por modificaciones yampliaciones durante los siglos XVII y XVIII, sin embargo, ninguna de esas obras posteriores hanlogrado borrar la idea de su primer autor.

    Roberto Segre (22) capt de manera convincente y precisa el carcter de las fortificacionesantonellianas. Aos de permanencia, investigaciones y docencia en Cuba, han permitido a Segrellegar a las siguientes conclusiones que me complace citar: ...El castillo del Morro se adapta a laforma irregular del promontorio de piedra que cierra la baha, conformando una poligonalquebrada y un sistema de terrazas degradantes hacia el mar con el fin de crear las sucesivascortinas de fuego defensivo hasta ras de agua, culminante en la ltima batera denominada losdoce Apstoles. Los muros de las terrazas se yerguen netos y precisos en su perfeccingeomtrica, diferenciando los dos volmenes principales en los cuales se articula el permetro de lafortaleza: el envolvente, posterior, cuya altura corresponde al nivel de la proyeccin hacia tierrafirme, y el proyectado hacia el mar, cuya poligonal segmentada corresponde a la adaptacin delsistema regular originario a las condiciones fijadas por los farallones. La mole ptrea es un desafoal frgil maderamen de los barcos atacantes: no es mimetizarse con la naturaleza sino un resaltarpor la forma y el color -toda la construccin era ocre y blanca- un demostrar la propia existencia,incitando a la confrontacin abierta y directa, seguro de la inexorabilidad del resultado final.

    Hacia tierra, defendiendo los posibles ataques de retaguardia, reaparecen los baluartes macizos,casi simtricos -originados en la tipologa tradicional- defendidos por la secuencia de caones en suborde superior y las troneras perforadas en los flancos que defienden el acceso al castillo. Elprofundo foso seco -vaco de piedra convertida en construccin- establece un corte neto entre elpen y el resto del territorio, no salvado ni siquiera por el acceso principal, marginado a uncostado de los baluartes, reducido a la boca exterior de un profundo pasadizo abovedado. Es eldeseo de mantener las distancias, de convertirse en isla, reconstruyendo la naturaleza, levantandoel muro lmite del desfiladero sobre la roca viva, impidiendo al ojo observador descubrir el corte, laobra de la naturaleza y la obra del hombre.

    La posicin del Morro, alejado de la ciudad, impone una escala diferente de las precedentesedificaciones militares. Todas las funciones vitales de los soldados defensores deben consumirse ensu interior, compensando la carencia del medio urbano, por lo tanto la Plaza de Armas noconstituye el tpico espacio abierto de maniobras, encontrndose ocupado por los bloques de variospisos -cuarteles de las tropas, viviendas de los oficiales, vivienda del comandante, capilla-reproduciendo en el interior de la ciudadela el efecto ciudad. El patio queda convertido encallejones profundos de circulacin proyectados radicalmente hacia los bastiones y terrazas por

  • medio de rampas y escaleras que establecen la estructura dinmica asociada a la accin, almovimiento de los hombres actuantes en los diversos niveles defensivos para interrumpir elcamino lineal de la flota agresora. Antonelli ha logrado insertar en esta obra dos tradicionesantagnicas formando un conjunto homogneo: la integracin orgnica con la naturaleza de laherencia medieval y la abstraccin geomtrica del racionalismo renacentista.

    Al contar La Habana con las tres importantes fortalezas, adems de las murallas que rodean laciudad, se convierte en la primera plaza fuerte del Caribe, fuera de escala a las posibilidadesagresivas de los piratas. La arquitectura militar asume el valor de smbolo de la ciudad: cuandoFelipe II le concede el escudo en 1592, los tres castillos aparecen sobre el fondo azul del golfo deMxico, conjuntamente con una llave, representacin del comercio con el Nuevo Mundo. LaHabana ser de ahora en adelante el punto clave del sistema defensivo del Caribe, ncleo extremodel clmax comercial colonial que la har acreedora de la denominacin: Llave del Nuevo Mundo yantemural de las Indias Occidentales.

    Si bien cada una de las fortificaciones presenta peculiaridades propias, podemos generalizar unaserie de caractersticas que configuran el aporte de Antonelli a la arquitectura americana:

    1. La primaca de la experiencia directa sobre la elaboracin terica. Los diseos se adecan vezpor vez a cada uno de los factores incidentes en la estructura defensiva, asumiendoparticular importancia el mbito topogrfico.

    2. La asimilacin de las tcnicas y diseos renacentistas, reelaborados en cada respuesta sinconcesiones a apriorismos formales -tales como el predominio de la simetra o de lospoligonales cerrados- creando una estructura compositiva abierta, polidireccional, en cuantoal permetro y al desarrollo altimtrico en terrazas, que asimila los conceptos de integracinorgnica de las fortificaciones medievales.

    3. La concepcin unitaria de los elementos que definen la forma defensiva -impuesta por laparticularidad del medio- que elimina la relacin entre el baluarte -defensa activa- y lacortina -defensa pasiva- homogeneidad alcanzada con anterioridad a las propuestas deVauban.

    4. La interpretacin dinmica de la defensa, basada en las relaciones existentes entre losdiferentes puntos de valor estratgico de la zona protegida, asimilada a la idea de la unidadurbana... .

    Tambin la investigacin realizada por Tamara Blanes Martin (23) resulta una sntesis muyprecisa y detallada de las caractersticas del Morro de La Habana. En sus conclusiones, lamencionada historiadora precisa que: ...La planta del castillo del Morro, sin lugar a dudas, esrepresentativa de la escuela clsica moderna de fortificaciones abaluartadas del siglo XVI; no seajusta a las leyes o disposiciones que impona la escuela hispano-americana; slo algunoselementos aislados coincidan en sus magnitudes; sin embargo esto no le resta sus verdaderosvalores, porque en Amrica, generalmente, no hubo un patrn fijo debido a las caractersticastopogrficas particulares de las diferentes regiones del continente. Por tanto, mediante sus lneasse conjugan la singularidad del trazado, el riguroso geometrismo, las significativas magnitudes, ascomo las proporciones y riquezas de sus ngulos. La irregularidad del terreno no permiti, enparte, una perfecta simetra, pero tampoco le rest la perfeccin y belleza de la clsica plantarenacentista. Es por eso que esta fortaleza debe considerarse como una obra arquitectnica deprimer orden de finales del siglo XVI y la primera mitad del XVII en la ciudad de La Habana, puesexcepto los castillos de la Real Fuerza y de San Salvador de la Punta, durante ese perodo, no huboobras semejantes y realizadas con tanto rigor cientfico como las mencionadas... (23).

  • Comparto las observaciones de la mencionada historiadora, menos la del riguroso geometrismoque se pretende demostrar con la hipottica reconstruccin del trazado geomtrico de la plantaconcebido por la autora. La traza geomtrica no fue concebida a priori como nos la enseaTamara Blanes; el estudio para encontrarle una solucin geomtrica parece ms bien un ejercicioactual hecho sobre un plano de levantamiento de la planta y no una concepcin originaria. Enninguna de las fortificaciones de Juan Bautista y Bautista Antonelli hechas en Espaa, frica yAmrica, se vislumbran preocupaciones por la simetra. La irregularidad del diseo esconsecuencia de un acucioso estudio de adaptabilidad a un terreno difcil y nada tiene que ver concriterios de simetra que, por ejemplo, son tan evidentes en el castillo de la Fuerza Real. Son dosconceptos diferentes. La irregularidad como consecuencia del aprovechamiento de la configuracintopogrfica es una caracterstica de la escuela italiana que se manifiesta desde finales del siglo XVen un sinnmero de ejemplos. La nica simetra que impone un eje o un centro es la de las lneasfijantes de la cara de los baluartes (en el Morro, los de Austria y de Tejeda), pero casi todo el restolo resuelve la presencia del ingeniero durante el curso de los trabajos mediante proposiciones,intentos, maquetas y planos. Se respetan, lgicamente, medidas dictadas por el alcance de lasarmas de fuego, distancias entre baluartes, altura proporcional y otras normas, pero la forma finalse fundamenta ms en la lgica que en la geometra. En el Morro, la prolongacin de las dos lneasfijantes correspondientes a las dos caras de los baluartes Austria y Tejeda y su encuentro con elfondo de los orejones (lado cortina) forman una X que coincide con la mitad de la cortina, la mitaden ngulo de la contraescarpa y el ngulo del rediente (revelln macizo). La unin de estos trespuntos forma un eje a 90 con la cortina y puede generar -o no- la directriz del conjunto. En el casodel Morro de La Habana, el eje coincide con el extremo del Morrillo; en el Morro de San Juan dePuerto Rico no hay tal coincidencia.

    Bautista Antonelli demuestra actuar con ideas precisas y mucha seguridad en la toma dedecisiones. Tiene una predileccin formal definida en la solucin del Frente de tierra que se repitede manera similar en casi todas sus obras y que se expresa con el impacto visual de dos grandesbaluartes con orejones. Adems, sus trazas de planta irregular no se deben slo a las dificultadesdel terreno puesto que en sitios planos aplica la misma preferencia. El fuerte de Salvador de laPunta, y el castillo de Araya (Venezuela) recuerdan muy de cerca una similar traza italiana: la delcastillo de Grifalco dominando la ciudad de Cortona que, en 1554, construy Francesco Laparellipor encargo de Cosimo I de Medici. Tambin la planta del castillo de Mazalquivir, cerca de Oran,trazada por su hermano Juan Bautista, acusa una irregularidad que confirma cierta predileccinfamiliar para las formas libres.

    Desde septiembre de 1590 hasta septiembre de 1593 las obras del Morro marcharon lentamenteporque el gobernador Juan de Tejeda haba considerado prioritario, para ese momento, activar laconstruccin de San Salvador de La Punta; por eso, concentr en dicha obra gran parte delpersonal asignado al Morro. El fuerte de La Punta, trazado por Bautista Antonelli en 1588-89, seencuentra frente al Morro, en el lado opuesto del canal que da acceso a la baha; con suconstruccin se completaba el control total del puerto. La planta original concebida por BautistaAntonelli, segn su plano fechado en 1593, fue posteriormente modificado por Cristbal de RodaAntonelli que, como ya se ha sealado, haba llegado a La Habana en 1591. Tejeda apoy dichamodificacin y as se perdi una traza de gran movimiento en la ubicacin de la artillera yvariedad en los ngulos de tiro. El proyecto de Roda, segn plano de 1595, elaborado despus de lasalida definitiva de Bautista Antonelli de la isla de Cuba en 1594, vuelve a la forma trapezoidalirregular y, sin muchas modificaciones, es la que ha llegado hasta nuestros das. Bautista Antonellinunca estuvo conforme con la solucin final de La Punta. Hubo muchas presiones a intervencionesdel gobernador Tejeda que, sin duda, no beneficiaron el resultado final.

  • En carta al rey, fechada el primero de noviembre de 1591, Bautista Antonelli informa acerca deladelanto de las obras y detalla la proposicin de colocar una cadena sostenida por tres barcazasentre los dos fuertes del Morro y La Punta. En otra comunicacin de 5 de marzo de 1593, dacuenta que toda la gente que trabajaba en la fbrica de La Punta se pas al Morro para cerraraquella plaza. Otra obra importante que rinde cuenta al monarca es la de haber logrado lacanalizacin de las aguas del ro Chorrera al centro de la ciudad. Un xito personal, alcanzadodespus de 25 aos de intentos fracasados por anteriores expertos. Textualmente dice: ...Consta envo a V.M. una descripcin de este Puerto y del agua de la Chorrera (Doc.N22) que se ha trado esta villa, la cual se ha trado por industria ma. Y el maese de campoTejeda me prometi de parte de la villa mil ducados porque encaminase la dicha agua esta villa,pues el que la tena a su cargo no daba salida; y despus que la agua est aqu no se ha acordado dem. Suplico a V.M. que mande que me sea remunerado este trabajo y bien que he hecho a esta villay puerto, y no que uno lleve toda la ganancia, y yo que de la industria me quede sin premio; yquedo confiado que V.M. me har merced (Doc. N 25). An se conserva en la calle de laChorrera la lpida conmemorativa: el agua fue trada por el maese de Campo Juan de Tejeda;pero al maese de campo se le olvid honrar el compromiso adquirido con quien logr tanimportante resultado.

    En julio de 1593, Juan de Tejeda concluy su perodo de gobernador y fue reemplazado por Juande Maldonado. El propio Maldonado entreg a Bautista Antonelli una real cdula en la cual se leparticipaba el aumento de su sueldo en seiscientos ducados anuales y, adems, las expresiones delmucho aprecio que gozaba en la corte. Sin embargo, la armona con el nuevo gobernador de Cubadur muy poco.

    Como apunt Angulo Iguez: ...Maldonado incurri en la misma falta que suantecesor, alterando sus trazas, moviendo el personal a su antojo, repartiendo lospuestos de canteros entre parientes suyos que slo tenan categora de aprendices,atropellando, en una palabra, la orden que l mismo trajera de la Pennsula... (24)

    Es lo mismo de siempre. Cristbal de Roda Antonelli que se encontraba en La Habana desde 1591escribe al rey, en fecha 6 de julio de 1595, un ao despus de la partida definitiva de BautistaAntonelli de Cuba, que el gobernador no tiene amor a la fbrica, sino a coger dinero. Y, msadelante aade: me han amenazado que me han de acuchillar, y aunque me matenno dejar de hacer mi oficio real. (25) Es la misma queja de su to Bautista Antonelli cuandoen carta del primero de noviembre de 1591, denunciaba al rey (Doc. N23) que ...si yo pudierausar mi oficio, como es razn, ya estuviera el Morro puesto en Defensa....

    Tambin hubo un incidente con otro sobrino de Bautista Antonelli. Se trata de Francisco GaravelliAntonelli, hermano de Cristbal, y ambos hijos de Catalina Antonelli (hermana de Juan Bautista yBautista) casada con Jacome Garavelli. Francisco fue ofendido por el alcalde de La Habana y, al noconseguir satisfaccin, resolvi regresar a Espaa. Su permanencia en Cuba no lleg a los dos aos.

    El 8 de octubre de 1594 Bautista Antonelli pone fin definitiva a su perodo cubano. Deja las obrasdel Morro y de La Punta bajo el cuidado de su sobrino Cristbal de Roda Antonelli y marcha haciaNombre de Dios, Portobelo y Cartagena.

    En Cartagena qued menos de un mes, hasta el 20 de noviembre de 1594, da en que sali paraNombre de Dios y Portobelo. A pesar de los pocos das pasados en Cartagena, revis la estacadaque se estaba terminando y cuyas instrucciones y detalles elabor durante su primera visita de1586-87.

  • De este mismo ao de 1594 es el plano del recinto amurallado de Cartagena; un proyecto que, apesar de las modificaciones posteriores, imprimi a la ciudad su carcter definitivo. Juan ManuelZapatero(26), reconocido historiador de la arquitectura militar espaola en Amrica, seala que:...Bautista Antonelli proyecta para la defensa de Cartagena de Indias, un maravilloso estudiotcnico y tctico que revela su alta preparacin en el Arte de Fortificar con el sello caractersticode lnea exterior, propio de la Escuela Italiana..., ...la sensacional traza del recinto de laciudad, constituye un proyecto de fortificaciones real, de murallas, baluartes,revellines, contraguardias y fosos cuyo anlisis maravilla... (27)

    Como veremos ms adelante, su sobrino Cristbal de Roda y su hijo Juan Bautista, se alternaronen la construccin de dicha obra hasta mitad del siglo XVII.

    Desde Nombre de Dios y Portobelo envi al rey detalladas relaciones de los dos sitios, destacandoen primer lugar las bondades de la baha de Portobelo por lo hondo de sus aguas y por la seguridadque brindaba su conformacin natural. Estudi todos los caminos de la regin entre Panam,Nombre de Dios, Portobelo y Chagre, indicando los puntos estratgicos de fcil defensa en caso deataques enemigos. Demostr un gran sentido de organizacin militar en el emplazamiento detrincheras, fosos, estacadas y bateras que resultaron de gran utilidad cuando don Alonso deSotomayor las aprovech para derrotar a Drake en su fallido intento de llegar a Panam. Activ laconstruccin de la torre y plataforma en la boca del ro Chagre y traz el sitio para levantar lasestacadas defensivas de Portobelo.

    La segunda incursin de Drake al Caribe, cuya meta principal era la toma de Panam, se conocien Tierra firme con bastante antelacin y esto impuls las obras de defensa. El 8 de enero de 1596la armada de Drake, con 23 navos grandes, entraba en la baha de Nombre de Dios y sin encontrarmucha resistencia saque el pequeo casero y lo incendi. Ese primer encuentro entusiasm a losingleses; sin embargo, la marcha triunfal hacia Panam tan acariciada por Drake fue frenada porlas fortificaciones emplazadas por Bautista Antonelli. Al lado de Sotomayor y Juan EnrquezConabut, Antonelli estuvo en la lnea de combate organizando el buen uso de las instalacionesdefensivas. Hubo daos, destruccin y muerte en ambas partes, pero Drake no lleg a Panam. Laexpedicin inglesa fue un fracaso y Drake, enfermo y agobiado por viejas dolencias, muri frente ala baha de Portobelo.

    En 1597, Nombre de Dios fue trasladada definitivamente a Portobelo a pesar del lamentableestado en que la dej el ataque de Drake. En carta del 24 de junio de 1597, Antonelli pide eltraslado de Cristbal de Roda desde La Habana a Portobelo por considerar que las obras del Morrodeban de estar muy adelantadas y por necesitar ayuda en la construccin de los fuertes de SanFelipe, de Santiago y de Sotomayor para la defensa de la baha de Portobelo. Tambin traz elplano de la nueva ciudad y mejor los caminos con Panam.

    Desde finales de 1594 hasta 1599, ao de su regreso a la pennsula, Bautista pas casi cinco aosdedicados al proyecto defensivo y urbano de Portobelo. Siempre insisti en la necesidad deeliminar el sitio de Nombre de Dios y mudar el puerto y la poblacin a la ms segura baha dePortobelo. Despus del fracaso, derrota y muerte de Francis Drake, se entreg completamente a laplanificacin del nuevo centro portuario, seleccionando los lugares dnde emplazar lasfortificaciones, diseando las mismas, abriendo caminos, etctera. A pesar de las fiebres y malestarque padeci en este perodo panameo, no escatim esfuerzos para hacer de Portobelo la baha-puerto ms segura y activa del istmo panameo. En el viaje de regreso a Espaa pas nuevamentepor Cartagena, Santa Marta, Ro Hacha y lleg hasta San Agustn en La Florida donde asesor enla construccin de una fortificacin en madera. El castillo que hoy conocemos, San Marcos, de

  • planta cuadrada y con un baluarte en cada ngulo, no es obra de Antonelli, como lo ha sealadoalgn historiador. Es obra posterior a 1670 y demor ms de un siglo para concluirse.

    En 1599, a la edad de 52 aos, Bautista Antonelli se encuentra nuevamente en Madrid. Por pocotiempo, porque en 1600 lo encontramos en la costa del levante, en Gibraltar y en frica en la costamarroqu. En 1603 emprende su ltimo viaje a Amrica, esta vez en compaa de su hijo JuanBautista quien, para la fecha, contaba con 19 aos de edad. La misin que origin este viaje fue lade visitar las salinas de Araya en la costa oriental de Venezuela, a fin de buscar una solucin queacabara con la explo