CAROLINA ALFONSO DE LA PAZ - libroecuador.comlibroecuador.com/admin/paginas_interiores/Carolina...

9
1

Transcript of CAROLINA ALFONSO DE LA PAZ - libroecuador.comlibroecuador.com/admin/paginas_interiores/Carolina...

Page 1: CAROLINA ALFONSO DE LA PAZ - libroecuador.comlibroecuador.com/admin/paginas_interiores/Carolina Alfonso.pdfMaría Del CarMen alMeIDa TraDuCCIón a FranCés: hélène prouTeau IMpresIón:

1

Page 2: CAROLINA ALFONSO DE LA PAZ - libroecuador.comlibroecuador.com/admin/paginas_interiores/Carolina Alfonso.pdfMaría Del CarMen alMeIDa TraDuCCIón a FranCés: hélène prouTeau IMpresIón:

Naturaleza Creadora

CREATIVE NATURE

NATURE CRÉATRICE

NATURALEZA CREADORACREATIVE NATURENATURE CRÉATRICEE D I C I ó N , 2 0 1 4

Co p y r i g h t © Ca r o l i n a al f o n s o d e l a pa z, 2014w w w.C a r o l i n a a l f o n s o.C o m C a r o l i n a a l f o n s o.C o m@g m a i l .C o m

mI sINCERO AgRADECImIENTO A:

Te x T o s:Dr a. In é s Ma r í a Fl o r e sro b e rT C. Mo r g a ngé r a r D xu r I g u e r a

DI s e ñ o:al e x a n D r e Ma rT I n

Fo T o g r a F I a s D e l a o b r a: Ch r I s T o p h hI rT z

Fo T o g r a F í a D e l a a rT I s Ta: Cé s a r Fa r I a s

Tr a D u C C I ó n a e s pa ñ o l e I n g l é s: Ma r í a D e l Ca r M e n al M e I D a

Tr a D u C C I ó n a F r a n C é s: hé l è n e pr o u T e a u

IM p r e s I ó n: IM p r e n Ta Ma r I s C a l

eD I C I ó n: TraMa eD I C I o n e s

ró M u l o Mo ya pe r a lTa

Ju a n D e DI o s Ma rT í n e z n34-367 y po rT u g a l

Qu I T o, eC u a D o r

Te l F: 593 2 2246315Fa x: 593 2 2246317w w w.T r a M a.e C

CAROLINA ALFONSO DE LA PAZ

Isbn: 978-9942-13-960-3

Page 3: CAROLINA ALFONSO DE LA PAZ - libroecuador.comlibroecuador.com/admin/paginas_interiores/Carolina Alfonso.pdfMaría Del CarMen alMeIDa TraDuCCIón a FranCés: hélène prouTeau IMpresIón:

A Céline y Cyprien, mi luz y fuerza creadora.

Page 4: CAROLINA ALFONSO DE LA PAZ - libroecuador.comlibroecuador.com/admin/paginas_interiores/Carolina Alfonso.pdfMaría Del CarMen alMeIDa TraDuCCIón a FranCés: hélène prouTeau IMpresIón:

6 7

CAROLINA ALFONSO DE LA PAZ

eS/eN/Fr

es una serie de obras realizadas a lo largo de años de investigación y búsqueda con el fin de celebrar la vida y la sabiduría que emana de la naturaleza, de rendir homenaje a la fertilidad, a los ciclos de cultivo: siembra, crecimiento y cosecha. Al sol, a la luna y su relación con el ser humano y especial-mente a la feminidad, debido a su lazo directo con la vida.

Las obras son composiciones abstractas, hechas de co-lores vivos con una energía sensorial vibrante donde la luz impregna mi pintura de fuerza. Acrílicos, pigmentos naturales y hoja de oro de 23 quilates se mezclan en los lienzos de lino.

La hoja de oro es un componente fundamental en las obras, puesto que es el hilo conductor de la transforma-ción de los sueños e ilusiones a través de la historia. De símbolo de adoración en las culturas precolombinas, a unidad de medida de valor de mercado tras el paso de la conquista española, cambiando con ello radicalmente su significado. Este devenir nos lleva a plantearnos: ¿Cuál es en la actualidad nuestro oro?

Cada material utilizado posee una vida propia, por ello trabajo con pigmentos naturales provenientes de la tierra, sacados de elementos minerales e incluso orgánicos. En ciertas obras utilizo resina para evocar el agua como ele-mento vital.

Así de lA NATURAleZA NAce UNA iNTUicióN cReAdORA …

“NATURALEZA CREADORA” is a series of paintings

made throughout several years of investigation and soul searching, in order to celebrate life and the wisdom that nature brings forth. The paintings also pay homage to fer-tility, the crop cycles: sowing, growth and harvesting; to the sun, the moon and their relationship with mankind. In particular, this series of paintings acclaims everything feminine due to her direct link with life.

The paintings are abstract compositions, made up of vivid colors with a pulsating sensual energy, in which light infuses my work with strength. I mix acrylics, natural pig-ments and 23k gold leaf onto linen canvases.

Gold leaf is essential to my paintings. It is the common thread of dreams and aspirations that changed and evolved with the passage of time. From a symbol of worship in pre-Columbian cultures, gold became a market value unit as the Spanish conquest progressed, thereby changing its meaning radically. Its transformation leaves a lingering question, what is our gold nowadays?

Every material used has a life of its own. To me it is vital to work with natural pigments, which come from the earth either from minerals or from organic materials. In some works, I also use resin, alluding at water as a vital element.

ThAT is hOw cReATiVe iNTUiTiON is bORN fROm mOTheR NATURe…

est une série d’œuvres réalisées au cours d’années d’investigations et de recherches afin de célébrer la vie et la sagesse qui émanent de la nature. Il s’agit de rendre hommage à la fertilité, aux cycles de la culture (semence, croissance et récolte), au soleil, à la lune et à ses relations avec l’être humain et surtout à la féminité, en contact direct avec la vie.

Les œuvres sont des compositions abstraites, aux cou-leurs vives, et à l’énergie sensorielle vibrante où la lumière irrigue la peinture pour lui donner toute sa force. Les mé-langes d’acryliques, de pigments naturels et de feuilles d’or à 23 carats imprègnent les toiles de lin.

La feuille d’or est un matériau fondamental dans la mesure où l’or est le fil conducteur de la métamorphose des rêves et des illusions à travers l’Histoire.

Il passe de symbole sacré dans la culture précolombienne à une unité de valeur marchande après la conquête es-pagnole. Un changement radical. Ce qui nous amène à nous poser la question de savoir ce que représente l’or aujourd’hui.

Chaque matériau utilisé possède une vie propre, et voilà pourquoi il est tellement important de travailler avec des pigments naturels provenant de la terre, tirés d’éléments minéraux et même organiques. Dans certaines œuvres, la résine est utilisée pour évoquer l’eau comme élément vital.

c’esT AiNsi qUe de lA NATURe NAîT UNe iNTUiTiON cReATRice...

“CREATIVE NATURE”

“NATURE CRÉATRICE”

c’esT AiNsi qUe de lA NATURe NAîT UNe iNTUiTiON cRÉATRice...

ThAT is hOw cReATiVe iNTUiTiON is bORN fROm mOTheR NATURe…

Page 5: CAROLINA ALFONSO DE LA PAZ - libroecuador.comlibroecuador.com/admin/paginas_interiores/Carolina Alfonso.pdfMaría Del CarMen alMeIDa TraDuCCIón a FranCés: hélène prouTeau IMpresIón:

8 9

DRA. INÉS MARÍA FLORES

QuitoeS/eN/Fr

Historiadora de arte, museógrafa, perito cali-ficador de obras de arte, con licencia oficial. Curadora de exposiciones y programas de arte, nacionales e internacionales. Ejerci-cio profesional en México, Chile, Colombia y Ecuador.

Art historian, museographer, expert qualifier of artworks, with official license. Curator for national and international exhibitions and art programs. Has practiced her profession in Mexico, Chile, Colombia and Ecuador.

Historienne d’art, muséographe. Expert qua-lifié en œuvres d’art, avec licence officielle. Curatrice d’expositions et de programmes d’art, nationaux et internationaux. A exercé sa profession au Mexique, au Chili, en Colombie et en Equateur.

Carolina es una joven artista que ha alcanzado ya el reconocimiento de su trabajo, gracias a su creatividad y a su dedicación. Habiendo comen-zado temprano, su trayectoria, que registra es-

tudios en Estados Unidos, Italia y Francia, la ha conducido a la formulación de una propuesta pictórica que responde a los planteamientos contemporáneos, formulados mu-chas veces en términos que pueden parecer arbitrarios, pero que ocultan su propia lógica.

Esta artista, que suma ya numerosas exposiciones, tan-to individuales como colectivas, se alinea en la corriente innovadora de la plástica contemporánea; mas su obra responde a una óptica muy personal, con audaces juegos cromáticos que incluyen a veces el oro entre sus compo-nentes.

Lo no figurativo es el campo donde se mueve con gran solvencia esta artista, y sus abstracciones ofrecen al espectador un espacio muy amplio para la imaginación, gracias a lo cual diríase que se produce una interrelación entre quien ha producido la obra y quien la contempla.

Puede hablarse de atmósferas resplandecientes en la pin-tura de Carolina, gracias a la energía de sus lienzos y a la fuerza de los colores empleados en inusuales combina-ciones. El efecto es por lo general intenso y, si se quiere, suntuoso; además de remitirnos inconscientemente a las vibraciones musicales.

Mas también hay dinamismo en las obras de Carolina, lo cual obedece a la gestualidad con la que han sido pinta-das, y a la yuxtaposición de los colores; así como a los matices y veladuras que se hallan en sus lienzos.

Como es obvio, estos cuadros son el producto de cuida-dosos estudios, de incansables búsquedas y de una inte-ligente experimentación, que paradójicamente, produce el efecto de un mágico casualismo.

Al estudiar las más importantes exposiciones individuales de la pintora tituladas: “Instantes”, “Cambio de piel”, “Mi País” y “Espacio de luces”, puede hallarse vestigios del arte europeo, en especial de Kandinsky y de Klee a Miró.

Pero la obra de Carolina surge espontáneamente de una especie de escritura no controlada sino parcialmente y que, más que decir sugiere, en los términos de un vocabu-lario enigmático y enriquecido por las notas de un lirismo que hay que saber apreciar. Cada pieza es una fiesta de pormenores, de detalles significativos, de apuntes suge-rentes. La sutil conexión de todos sus trabajos con el mundo natural, les da una fuerza que radica en el gesto de la mano que aplica el pigmento.

El imaginario de las obras de Carolina enlaza diversos signos dominantes de un lenguaje estético que apela a lo simbólico y que linda con lo mágico. De modo que, con ricas cualidades cromáticas y con ágiles y dinámicos tra-zos; con manchas que armonizan la composición a base

Page 6: CAROLINA ALFONSO DE LA PAZ - libroecuador.comlibroecuador.com/admin/paginas_interiores/Carolina Alfonso.pdfMaría Del CarMen alMeIDa TraDuCCIón a FranCés: hélène prouTeau IMpresIón:

10 11

de un sorprendente equilibrio tonal, Carolina transforma la materia pictórica en un espacio de efectos admirables, a tono con una capacidad artística intransferible.

La obra de Carolina es una oportunidad para confirmar las ilimitadas posibilidades de la pintura contemporánea, siempre que no se le pierda el respeto a los cánones irre-nunciables del arte.

En cada obra, ella se supera a sí misma, tanto por su ofi-cio, que ha llegado a conocer a fondo, como por su capa-cidad creadora.

Carolina is a young artist whose work has re-ceived early recogntion due to her creativity and dedication. She began painting in her childhood, and her studies later took her to the United

States, Italy and France. Her artistic proposal responds to a contemporary approach, which at times may seem arbi-trary, but there is definitely an underlying sense of logic.

This artist, who has already participated in numerous solo and group exhibitions, is part of the innovative contempo-rary artistic current. Her work however, responds to a very personal perspective, which includes bold color schemes and sometimes gold among its components.

Carolina excels in the non-figurative realm, and her abs-tractions provide the viewer an ample cosmos for imagina-tion. That is why there is an interrelationship between the artist and the spectator.

We can easily speak of luminescent atmospheres in Caro-lina’s paintings due to the energy and the strength of the colors she applies in remarkable combinations. The effect is usually intense and even sumptuous, unconsciously re-minding us of musical vibrations.

In addition, there is movement in Carolina’s work, which is due to the gestural brush strokes with which she works in several layers of colors, and to the hues and glazes found in her canvases.

Her work derives from meticulous studies, relentless searches and intelligent experiments that surprisingly pro-duce an effect of magic fortuity.

As we analyze the most important solo exhibitions of this artist: “Instantes”, “Cambio de piel”, “Mi país” and “Espa-cio de luces”, we find traces of European art, in particular echoes from Kandinsky, Klee and Miró.

Her work emerges spontaneously from some sort of par-tially uncontrolled writing that suggests rather than talks, in a mysterious vocabulary enriched by emotional notes

Ces tableaux sont à l’évidence le résultat de choix soi-gneusement étudiés, de recherches inlassables, d’expé-rimentations intelligentes qui, paradoxalement, donnent une impression de hasard inspiré.

Ses expositions individuelles les plus importantes (“Ins-tantes”, “Cambio de piel”, “Mi país” et “Espacio de luces”) nous ont dévoilé quelques-unes de ses influences euro-péennes, en particulier Kandinsky, Klee et Miró.

Le travail de Carolina se déploie à partir d’une écriture à la fois inconsciente et réfléchie ; elle évoque plutôt qu’elle ne dit ; elle emploie un vocabulaire énigmatique où transpa-raît un lyrisme subtil. Chaque tableau foisonne de détails signifiants, de notes suggestives. Ses œuvres établissent un lien subtil avec le monde naturel, ce qui leur confère une force née du geste de la main appliquant le pigment.

L’imaginaire des œuvres de Carolina entrelace divers signes dominants d’un langage esthétique qui fait appel au symbolique et frôle le magique. Ainsi, avec de riches qualités chromatiques et des traits agiles et dynamiques, avec des taches qui harmonisent la composition basée sur un équilibre tonal surprenant, Carolina transforme la ma-tière picturale en un espace d’effets étonnants, en accord avec une esthétique unique.

Par la qualité de son travail, Carolina nous confirme les possibilités illimitées de la peinture contemporaine. Grâce à sa parfaite maîtrise technique et à ses capacités créa-trices, elle se surpasse dans chaque tableau.

that can be easily appreciated. Each painting is a feast of specific, significant details and suggestive notes. The subtle connection of all her paintings with nature provides her work with energy. This energy has its roots in the ges-ture of the hand that applies the pigment.

The imaginary within Carolina’s work links several domi-neering signs of an aesthetic language that appeals to symbolism and rhymes with magic. That is how with rich chromatic qualities and skillful, dynamic brush strokes, with tinges that synchronize the composition through an astounding tonal balance, Carolina transforms painting materials into canvases with admirable effects, in keeping with an unassignable artistry.

Carolina’s paintings are an opportunity to confirm the boundless possibilities of contemporary art. With each new painting she surpasses herself, both because of her trade, which she has fully mastered, and mostly because of her creative capacity.

Carolina est une jeune artiste dont le travail bénéficie déjà d’une certaine reconnaissance, grâce à sa créativité et à son engagement total envers son art. Le fait d’avoir entamé assez tôt

son parcours artistique, d’avoir étudié aux États-Unis, en Italie et en France, lui a permis de formuler un projet pic-tural en résonnance avec les défis contemporains, sou-vent exprimés de façon qui peut paraître arbitraire mais qui chez elle sont étayés par une logique propre.

Cette artiste a déjà participé à de nombreuses exposi-tions, tant individuelles que collectives. Si elle appartient aux courants innovateurs de l’art contemporain, son tra-vail est le fruit d’une optique très personnelle : elle n’hé-site pas à recourir à des jeux chromatiques audacieux où l’or joue parfois un rôle important.

Carolina est parfaitement à son aise dans le non-figuratif et ses abstractions permettent à notre imagination de se déployer de façon très riche, ce qui stimule les interac-tions entre les œuvres et ceux qui prennent le temps de les observer.

Grâce à leur énergie et à la force des couleurs utilisées dans des combinaisons inhabituelles, les tableaux de Ca-rolina baignent dans des atmosphères lumineuses. L’effet produit est généralement intense, somptueux même. In-consciemment, elle nous envoie des vibrations musicales.

Les toiles de Carolina se caractérisent aussi par un dyna-misme résultant de la gestuelle qui a présidé à leur exé-cution, de la juxtaposition des couleurs, des nuances et des glacis.

Page 7: CAROLINA ALFONSO DE LA PAZ - libroecuador.comlibroecuador.com/admin/paginas_interiores/Carolina Alfonso.pdfMaría Del CarMen alMeIDa TraDuCCIón a FranCés: hélène prouTeau IMpresIón:

12 13

ROBERT C. MORGAN New-York

eS/eN/Fr

Crítico internacional de arte, curador, historiador y pintor. Fue la primera persona en ganar el premio Arcale por su trabajo como crítico en Salamanca (1999). Autor de varios libros: Duchamp & los artis-tas contemporáneos posmodernos. Buenos Aires: Eudeba (Libros del Rojas), 2000. El artista en el siglo XXI, la era de la globalización (Buenos Aires: Eduntref, 2012).

International art critic, curator, historian and painter. The first recipient of the Arcale award for his work as a critic in Salamanca (1999). Author of many books, including Duchamp & los artistas contemporáneos posmodernos. Buenos Aires: Eudeba (Libros del Ro-jas), 2000. El artista en el siglo XXI, la era de la glo-balización (Buenos Aires: Eduntref, 2012).

Critique d’art international, curateur, historien et peintre. Premier bénéficiaire du prix Arcale pour son travail de critique à Salamanque (1999). Auteur de nombreux ouvrages dont Duchamp & los artistas contemporáneos posmodernos. Buenos Aires: Eude-ba (Libros del Rojas), 2000 L’Artiste au XXIème siècle :L’ère de la globalisation (Buenos Aires : Eduntref, 2012).

Las pinturas de Carolina Alfonso me impactan pues son una especie de poesía visual que se sustenta en pensamientos, sentimientos y re-cuerdos. Sus obras llevan consigo conciencia.

Y la conciencia se relaciona con la estructura de lo que Carolina observa a su alrededor y siente en sí misma. Cada una de sus pinturas proyecta una relación instin-tiva con la naturaleza, un sentido profundo de intimidad. Los sentimientos emergen de fuentes desconocidas que en última instancia nos conducen al universo. Mientras observo sus cuadros no me atrevo a utilizar el término modernista “espiritual” porque me podría equivocar. El término carece de precisión si tomamos en cuenta cómo reflexiona Carolina sobre la pintura. Podría decirse que a Carolina Alfonso no le interesa un mundo distanciado de la realidad, pero sí le interesa transmitir los sentimientos que lleva dentro. Más que una realidad fría e inmutable, Caro-lina busca una identidad conectada a fuerzas naturales que constituyen su visión de la vida como un fenómeno que está en constante movimiento a través del tiempo y el espacio. Probablemente, este fenómeno se asemeja más al concepto unificado de yin y yang que se encuentra en las culturas orientales. Tiene mucho menos que ver con la división de la realidad en segmentos y fragmentos disper-sos, tan común en varias culturas occidentales.

El interés de Kandinsky en lo espiritual se basa en sus sentimientos al escuchar la ópera de Wagner, Lohengrin; contemplar el Impresionismo de Monet y recordar los íco-nos rusos en las casas de los campesinos. Sin embargo, la perspectiva etérea de Kandinsky sobre la realidad di-fiere de la perspectiva de Carolina, cuyos lienzos sugieren una conexión con la tierra en la que hay un nexo del yo físico y mental con el sol, la luna y los ciclos de fertili-dad. Su pintura abarca una conciencia coherente de los distintos sistemas de circulación que son vitales para los tejidos, membranas y órganos dentro del cuerpo humano. La artista considera su experiencia de dar a luz como una vivencia que transforma la vida, pues comprendió en ese momento, como nunca antes, la unidad entre su cuerpo físico, sus procesos mentales y su potencial creativo.

Carolina Alfonso es una pintora gestual abstracta con un sorprendente sentido del color. No es posible separar en sus pinturas los rasgos expertos de los diferentes matices que vibran con la luz. Su forma de pintar es directa. El impulso de su gesto es fecundo, lleno de tensión y equili-brio. Sí, tan paradójico como suena, pues tensión y equili-brio van juntos. Como el yin y el yang, que no son contra-puestos sino que al contrario, se complementan. Al mirar su obra anterior, pintada en Venecia durante el verano de 2007, detecto el principio de la idea que luego maduraría, especialmente en Venetia – In my Water.

El origen del trazo elíptico, repleto de color, está ahí. Con el paso del tiempo, ese trazo se refinaría en sus pinturas a partir de 2009 y se mantiene actualmente. En Candor y Celestina (ambas de 2010), encontramos ya, un arrollador campo magnético azul que predomina en ambos lienzos, a medida que constelaciones brillantes de color primario se arremolinan hacia un universo infinito.

Page 8: CAROLINA ALFONSO DE LA PAZ - libroecuador.comlibroecuador.com/admin/paginas_interiores/Carolina Alfonso.pdfMaría Del CarMen alMeIDa TraDuCCIón a FranCés: hélène prouTeau IMpresIón:

14 15

Sus pinturas sugieren que cúmulos de luz mantienen al universo etéreo en equilibrio dentro del firmamento, donde el movimiento y la pasión van juntos como sucede en la danza. En otro cuadro, La Nueva Frontera (2008), los trazos de hoja de oro de 23 quilates se adhieren a la superficie acrílica de forma que insinúan, con la misma fuerza, una sensación interna y externa. Recuerdo un ensayo del pintor De Kooning, en el que se debate entre las sensaciones internas y externas que percibía el artista. Parecería que Carolina Alfonso no se deja llevar por esta lucha interna, sino que acepta ambas sensaciones como un complemento la una de la otra. Y al final la resuelve a través del sentimiento. Ella se refiere a este fenómeno sensorial como naturaleza creadora. Pintar se convierte en una fuerza brillante que emana y fluye a través del cuerpo y la mente. Es una fuerza que se mueve lenta pero inexorablemente, hasta que se plasma en el lienzo. Al fi-nal, estas sensaciones se funden en el horizonte deslum-brante del color, donde se halla el origen del sentimiento.

Carolina Alfonso’s paintings impress me as a kind of visual poetry based on thought, feeling, and memory. They carry a certain awareness related to the structure of things she observes around

and within her. Each of her paintings projects an instinc-tual relationship to nature, a deep sense of intimacy where sentiments emerge from unknown sources that ultimately point towards the universe. While observing her paintings I hesitate to use the Modernist term “spiritual,” because it is misleading. It lacks accuracy in terms of how she reflects on painting. Carolina Alfonso appears less interested in a world displaced from reality than in transmitting feelings held deeply within her. Rather than an antiseptic reality, she searches for an identity connected to natural forces that constitute her understanding of organic life as a phe-nomenon that moves perpetually through time and space. This phenomenon is perhaps closer to the unified concept of yin/yang found in Eastern cultures than to the splitting of reality into disconnected segments and compartments as found in many Western cultures.

Kandinsky was interested in the spiritual based on what he experienced in Wagner’s Lohengrin, Monet’s Impres-sionism, and the Russian icons he recalled in the homes of village peasants. But Kandinsky’s ethereal view of real-ity is different from that of Carolina Alfonso whose paint-ings suggest a connection to the earth where the physical mental self relates to the sun, moon, and fertility cycles. This would include a cogent awareness of the various sys-tems of circulation essential to vital tissues, membranes, and organs present within the human body. The artist recalls her experience in giving birth to her children as a life-changing experience, as she came to terms with the unity of her physical body, mental processes and creative potential in ways never fully comprehended previously.

Carolina Alfonso is an abstract gestural painter with an acute sense of light and color. It is not possible to separate the arched gestures in her paintings as being carriers of divergent hues that resonate with light. Her manner of painting is direct; the impulse of the gesture is fecund, full of tension and balance. As paradoxical at it sounds, the two go together. Tension and balance, like yin/yang, are not opposites, but are complements of one another. In looking at her earlier work, painted in Venice during the summer of 2007, I detect the beginning of her mature idea, particularly in Venetia – In my Water.

The origin of the arched gesture, filled with color, is here. Eventually, this would refine itself in her paintings begin-ning from 2009, continuing into the present. In Candor and Celestina (both 2010), a sweeping, magnetic blue field dominates each painting as bright constellations of primary color infinitely whirl toward the universal present.

Her paintings suggest a spectral universe held in balance by clusters of light within the firmament. They do not sep-arate movement from passion as one might experience in a dance. In another painting, La Nueva Frontera (2008), the added specks of 23-karat gold leaf cling to the acrylic surface in such a way to suggest an equally inward and outward sensation. I recall an essay by the painter De Kooning where he grapples with the problem of inward and outward sensations as felt by the painter. It would seem that Carolina Alfonso is not grappling so much as she is accepting the presence of these sensations as complementary to one another. Their interactive function is ultimately resolved through feeling. She refers to this sensate phenomenon in terms of creative nature (natura-leza creadora) as when painting becomes a brilliant force that emanates through the body and mind. It is a force that moves slowly and steadily until it eventually reaches its mark. Ultimately, these sensations merge on the ineffable horizon of color where the origin of feeling resides.

La peinture de Carolina Alfonso est basée sur la pensée et la mémoire. Elle transmet un état de conscience lié à la structure des choses, en elle et autour d’elle. Chacune de ses œuvres projette

une relation instinctive à la nature, une sensation d’intimi-té où les sentiments émergent de sources inconnues qui finissent par ouvrir sur l’univers. Alors que j’observe ses tableaux, j’hésite à utiliser le terme moderniste de “spiri-tuel”, parce qu’il est trompeur. Il manque de précision si on considère la façon dont Carolina Alfonso envisage son art. Elle semble moins intéressée par un monde inspiré de la réalité tangible que par la transmission de ce qu’elle ressent au plus profond d’elle-même. Plutôt qu’une réa-lité aseptisée, elle recherche une identité connectée à des forces naturelles, où elle puise sa compréhension de la vie organique qui ne cesse de bouger dans le temps et l’espace. Ce concept est sans doute plus proche du yin/

yang des cultures orientales que de la “réalité” divisée en compartiments séparés qui caractérise de nombreuses cultures occidentales.

Kandinsky s’intéressait à la spiritualité qui avait réson-né en lui à l’écoute du Lohengrin de Wagner, devant les œuvres impressionnistes de Monet ou les icônes de son souvenir, dans les foyers des paysans des villages russes. Mais la vision épurée de la réalité de Kandinsky est diffé-rente de celle de Carolina Alfonso, dont les tableaux sug-gèrent une connexion à la nature où l’esprit est relié au soleil, à la lune, aux cycles de la fertilité. Cela suppose une pleine conscience des différents systèmes de circula-tion essentiels aux tissus, aux membranes et aux organes vitaux présents dans le corps humain. L’artiste évoque la mise au monde de ses enfants comme une expérience majeure, qui l’a amenée à se confronter à l’unité du corps physique, à certains processus mentaux et à un poten-tiel créatif selon un angle qu’elle n’avait jamais envisagé jusqu’alors.

Carolina Alfonso pratique l’Action Painting abstraite avec un sens aigu des couleurs. La gestuelle qu’elle utilise donne vie à des nuances subtiles en résonnance avec la lumière. L’impulsion maîtrisée du mouvement est féconde, entre tension et équilibre, deux termes qui ne sont pas contradictoires mais s’interpénètrent à la manière du yin et du yang déjà cités. Dans ses œuvres plus anciennes, peintes à Venise en 2007, je discerne déjà la naissance de sa technique actuelle et je pense surtout à Venetia – In my Water.

L’origine du geste coulé dispensateur de couleur est là et il s’affinera dans ses toiles allant de 2009 à aujourd’hui. Dans Candor et Celestina (2010), un champ magnétique bleu vous emporte vers des constellations brillantes de couleurs primaires qui tournent à l’infini vers le présent universel.

Sa peinture suggère un univers spectral maintenu en équi-libre par des concentrations de lumières au firmament. Elles ne séparent pas le mouvement de la passion, une expérience comparable à la danse. Dans La Nueva Fron-tera (2008), des agrégations de petites feuilles d’or de 23 carats à la surface acrylique de la toile provoquent des sensations intérieur/extérieur. Cela me rappelle un texte du peintre De Kooning où il aborde le problème des per-ceptions intérieur/extérieur telles qu’elles sont ressenties par l’artiste. Il semblerait que Carolina Alfonso accepte leur présence, jugée complémentaire, sans qu’elle estime nécessaire de s’y confronter. Leur fonction interactive est résolue par la sensation même. Elle se réfère à ce phé-nomène physique en termes de nature créative (natura-leza creadora), par exemple quand la peinture devient une force éclatante qui passe par l’esprit et le corps. Cette force se meut dans un mouvement lent et régulier jusqu’à atteindre le but qu’elle s’est fixé. Et ces perceptions fu-sionnent à l’horizon ineffable de la couleur où réside l’ori-gine de la sensation.

Page 9: CAROLINA ALFONSO DE LA PAZ - libroecuador.comlibroecuador.com/admin/paginas_interiores/Carolina Alfonso.pdfMaría Del CarMen alMeIDa TraDuCCIón a FranCés: hélène prouTeau IMpresIón:

16 17

GÉRARD XURIGUERA PariS

eS/eN/Fr

Crítico e historiador de arte, escritor y curador. Au-tor de obras de referencia sobre pintura, escultura contemporánea y de numerosos prefacios de catálo-gos de arte. Curador de más de setecientas exposi-ciones en todos los continentes.

Art critic and historian, writer and curator. Author of reference works about contemporary painting and sculpture. He has written the foreword for numerous art catalogues. Curator for more than 700 exhibitions throughout the world.

Critique et historien d’art, écrivain et curateur. Auteur d’ouvrages de référence sur la peinture, la sculpture contemporaines et de nombreuses préfaces de cata-logues d’art, et a été le curateur de plus de sept cents expositions sur tous les continents.

Aunque la pintura, según la fórmula bien cono-cida, sea formas y colores reunidos en un cier-to orden, también encierra otros parámetros: sensitivos, históricos, sociológicos, filosófi-

cos…que resisten a la influencia de los formalismos.

Así pues, en la obra de Carolina Alfonso, el soplo nativo del instinto es el que guía su pensamiento y la orienta ha-cia una pintura liberada de ataduras, efusiva y sensitiva, donde se funden la energía arrasadora y la huella de sus raíces. Unas raíces esparcidas en los estallidos de una materia vibrante, que definen una práctica a primera vista abstracta, pero susceptible de evocar trazos emblemáti-cos de una figura mítica, la de la Madre Tierra, o de un linaje ancestral.

Formada en escuelas de arte de Nueva York, Madrid, Vene-cia y Paris, ha pintado desde su niñez y fiel a su vocación, no ha cesado de profundizar las nociones adquiridas. Ex-ploradora incansable, sus numerosos periplos estimulan su imaginación y enriquecen su paleta, así como también su maternidad, la reminiscencia de su infancia, la historia y la topografía de su país con sus connotaciones preco-lombinas, que la conducen a exteriorizar lo que lleva en su interior, puesto que finalmente sólo se pinta lo que se es.

Por consiguiente, identificándose con su credo, Carolina Alfonso ha podido construir una sintaxis irrigada de sím-bolos subyacentes, reflejados en los títulos de sus obras que nos dan la clave para interpretar mejor su cosmos. Así pues, partiendo de un trabajo específico con una materia constelada de trazos recurrentes, yuxtapuestos o aislados, de signos y paletazos enlazados al son de abun-dantes manchas luminosas, cuando no son fondos tem-pestuosos organizados alrededor de un centro unificador o de estallidos en arco iris, la artista sintetiza su quehacer sin traicionar su directriz.

Sus creaciones más recientes se suceden utilizando siempre el acrílico salpicado de pigmentos. “Meditación Andina”, con sus dos formas cónicas atravesando cie-los incandescentes, parece hacer alusión a los volcanes legendarios de su país. Luego el díptico “Granos de Quínoa”, acicalado con pan de oro, despliega sus rayos intersticiales, a la manera de un haz deslumbrante, mien-tras que “Revueltas” envuelve sus unidades en una espiral vibrante, y “Cosecha” asocia la impresión de velocidad con la intensidad de sus trazos.

A pesar de la vitalidad que la artista lleva en sus venas, como eco de un trazo enérgico, el proceso creador de Carolina no cede a la confusión, porque un orden interno, natural, regula el equilibrio estructural de cada elemento, haciéndonos sentir su fuerza en su diálogo con el espec-tador. El uso del pan de oro, también apreciado por los asiáticos, permite establecer una conexión con la cultura precolombina.

Desde un punto de vista técnico, Carolina trabaja larga-mente sus obras, en varias capas y subcapas, a fin de